a ^ppSMW.DAF. ^^. °°1^-^?^: ar ^^ ^ r.: r^° ^ ^^7I^i11iG^T i ^ ^5^^^^?^a ilei i C os ES M? Pilar Cerdán Navarro, alumna del colegio Padre Manjón. 1942. , el mundo de la enseñanza y la educación han tenido una presencia constante en alborada a través de las numerosas fotografías de temática escolar que se han publicado en los diferentes números. Ahora ha Ilegado el momento de vestir esas imágenes con palabras para revivir una historia que, tal como la conocemos hoy en día, está ligada básicamente al devenir del siglo XX, punto de encuentro de anteriores dosieres que han ido saliendo a la luz. No hay que olvidar tampoco que ha vuelto a renacer el colegio Padre Manjón, símbolo de la enseñanza pública de la ciudad, y que estamos a punto de entrar en el año del Centenario. Puede ser un buen momento para volver la mirada con cierta perspectiva el mundo de la educación y de la enseñanza, para seguir la evolución de la escuela, un fenómeno que a todos nos ha afectado o nos sigue afectando en mayor o menor medida, porque todos somos el fruto de la educación que hemos recibido. EI dosier agrupa una colección de dieciocho trabajos de muy diversa procedencia, que han ido surgiendo a iniciativa del consejo de redacción y del propio trío coordinador. los hay que parten de visiones globales. Los hay también que estudian aspectos muy concretos en el tiempo.Y tampoco faltan las reflexiones, las entrevistas y la evocación más subjetiva. Como en otras ocasiones, han sido mínimas orientaciones y escasos los condicionamientos que se les han hecho a los autores de los trabajos. Esto hace que el resultado Escuela de D. Pascual. Años 30. (Archivo Alborada). final haya sido una incógnita hasta el último momento, el de la cosecha, cuya calidad deberá juzgar y valorar el lector. Como otros monográficos anteriores de alborada, la motivación principal ha ido por indagar, revisar, ordenar y hacer más comprensible lo ya estudiado con anterioridad sobre el asunto en cuestión, aprovechando también la ocasión para aportar nuevas investigaciones y testimonios, escritos y orales, añadir nuevas reflexiones y diversificar los puntos de vista. Se han recuperado algunas imágenes publicadas con anterioridad -na todas las que hubiéramos querido- y también se han incorporado otras imágenes nuevas que se han podido recoger, incluidas las que han aportado algunos autores de los artículos. En resumidas cuentas, alborada vuelve a adentrarse en el conocimiento de otro aspecto importante de nuestra realidad. Como siempre, vaya por delante la invitación a recorrer las páginas con tranquilidad y total libertad de movimientos, siempre y cuando haya ganas de leer. Con el tema que se propone, ese interés se da por supuesto. I nventario cronológico de los espacios escolares eldenses • FERNANDD MATALLANA HERVÁS Y PEDRO CIVERA COLOMA La enseñanza primaria en Elda durante el Antiguo Régimen • JOAQU(N SAMPER ALCÁZAR La lengua vehicular de la educación en Elda hasta 1787 • BRAULI MONTOYAABAT La enseñanza pública en Elda hasta septiembre de 1932 • ALBERTO NAVARRO PASTOR Antonia Maymón: peda^ogía y libertad (Elda 1929-1932) • Me DEL CARMEN AGULL6 D(AZ Y Ma PILAR MOL(NA BENEYTO Breve resumen sobre la situación escolar en Elda en el siglo XX • GERMAN BERNABÉU SORIA Un colegio en el centro urbano: el caso del C.P. Padre Manjón • RAFAEL CARCELÉN GARC(A Manuel Martínez Cuenca, el maestro más antiguo • V(CENTE DELTELL VALERA Doña Lolita, una maestra legendaria • RAFAEL.IUAN ORTEGA Colegio Santa María del Carmen, presencia centenaria en Elda • LU(S MAESTRE AMAT Y EMILIO MAESTRE VERA La Casa del Niño, una experiencia de escuela parroquial • CONSUELO POVEDA POVEDA Recordando a tres de mis profesores de Bachiller • VICENTEALARC6N,IUAN La letra sin pan no entra. • RAFAELHERNÁNDEZ PÉREZ Y en eso Ilegaron los jesuitas. • LUIS ESTEVE IBÁNEZ Las enseñanzas medias en Elda • Jos^ Casao ^ucas La transición democrática y la escuela • JOSÉ LUIS DURQN ALVAREZ Las tareas de la profesión de enseñar • MIGUEL A. (ZQUIERDO LÓPEZ Retos educativos del siglo XXI • AGUSTfN CARUANA VAN6 41 44 46 53 54 56 58 60 66 70 73 Inv e n ta rio cr onológi c o d e lo s ^^ ^c ^^,^^r^ ► ^^r^,+^^c^^ ^ e ld enses FERNANDO IVIATALLANA HERVÁS Y PEDRO CIVERA COLOMA __ _ ._ _....._ a educación -y su vertiente más praqmática, la enseñanza- es una actividad compleja y eri zada de dificultades. AI proceso educativo no sólo se le pide la mera transmisión de conoci mientos, sino también se le exiqe la inculcación de costum bres y hábitos duraderos, el aprendizaje de habilidades y destrezas que, se supone, serán útiles a lo larqo de la vida, así como el pleno desarrollo de la personalidad del alumn@, cuando no la modificación de aquellas conductas y actitu des que no se consideren convenientes. Para tratar de alcan zar estas ambiciosas metas, la labor docente ha precisado históricamente de educadores capacitados, de instalacio nes y materiales adecuados y de un marco leqal propicio, elementos que casi nunca han ido parejos y que han dado luqar a múltiples carencias y disfunciones, problemas que, en cada época, no han dejado de ser puestos de manifiesto a medi da que la sociedad se concienciaba de la fuerza transfor- madora de la educación y la necesidad de que ésta fuera asumida por el Estado a través de la instrucción qratuita. EI desarrollo de la enseñanza primaria de titGlaridad pública en Elda, al iqual que en otras poblaciones, se ha movi do, hasta principios del siqlo XX, en unas coordenadas de pobreza e inacción por parte de las autoridades. Las escue-las privadas, por su parte y salvo honrosas excepciones, no pasaban de ser meros locales de quardería y viqilancia de los pupilos. La lamentable situación educativa de la Elda que se pre paraba a vivir las Fiestas del III Centenario (1904), caracterizada por el escaso número de puestos escolares y el mal estado de las casas-escuela (aulas pequeñas, inadecuadamente ventiladas, iluminación escasa, etc.), sólo comenzaría a paliarse hacia 1925-1932. Los qobiernos locales correspondientes a los últi mos años de la Dictadura de Primo de Rivera, pusieron las bases para solucionar ese apabullante problema, mediante las qestiones conducentes a la consecución del Grupo Esco lar. No en vano, la ciudad estaba en plena transformación; junto al despeque industrial y urbanístico, el modelo demo qráfico estaba en proceso de cambio, la población pasaría de 6.132 habitantes en 1900 a los 18.030 de 1935, lo cual vino a aqudizar «la cuestión escolar». En los primeros años de la República, que tanta importancia concedió a la política cul 5tylus completo y fraqmentos de otros ejemplares hallados en el yadmlento de EI Monastil (Archivo Histórico Municipal). ^^,^ ^:ycuete á`Iacionni de1 Ii:^rrio cle F:I . Conventn Coleqios recién construidos tegún aparecen en la revista EI Cronista de 1932. Eacuclas Nac;ont^tes clet l^nrrio CI C `•I.n Ira ternid.^d ^^^^^^^^° ^^`^a`^^ Colegio-Academia Verdú ^ PRINIERA EN5ENANZA ELEhIE;^rAL Y SIIPF_RIOR ^ BACHiLLER: ELF,MENr,^.L Y LINIVERSIIARIO ^ Ŝ CI^NTABILIbAb Y CLASES ESPEGtALES ! Director: ,J Q^^`^, V E 1^. L U i ELI^A i ^^^^^ W ^^^^^^^^^ Anuntios de academias eldenses aparetidos en la prensa local de los años 30. ^Y5 ^ k ,^ : ^ l ^ . ^ t @ ^ ! ^^ . i ^ r ^^ 9 ^ : ^ f ^^ f ^ ^i a h i a r J `. e a + f . ^ i ^ ^ ^ ^ e . ^ lá ^ ^ 3 ti ^ ;Z t ^ . 1 ^O Y .? ^^ y . fi. ^ ^ ^^ iI^ ^^ Y V Y ^ Y1 ^ Y V^ f/^11 Fi ^ OEOICAO %C U IVAMENTE R RAR CIbN PARA INGRE50 EN EL ^ ^A^^G3P@ ®^ u ^I^f ŝ ^i^2s^^C^^ ^ POSITIVOS RESULTADOS EN TODAS LAS OPOSICIONES ^ ^^ ^ ^ Fr. Profesores especizllxadns eR tadn matena. Lim c cidn del nulRero de atuRmos. ^strecha vigilancia e intenso régimen de n-abajo. Facultad de los padres o sus representantes ^ para-asist3r R les elases. PaRA INFbRMES Y RETAt.l.E3 AL DIRECTUR nE LA tatlt de Fetmtn GaláA. 5 ^ ^ ^ ® ^ .^, ^ ^ ^ ^ ^ ^ ELDA tural y educativa, se recogieron los frutos con la inaugura ción de cinco escuelas públicas y se seguían solicitando más centros: Escuelas Nacionales «EI Progreso», la Unitaria de la Estación de Monóvar, Escuelas Nacionales «La Fraternidad», Escuela Nacional «Giner de los Ríos» y Escuelas Graduadas «Emilio Castelar». Con estos colegios se trató de dar respuesta a lo que podemos Ilamar el primer boom demográfico del s. XX; el segundo punto álgido se produciría en las décadas de los años sesenta y setenta: en 1960, Elda tenía 28.151 habitan tes que, veinte años después, se habían convertido en 53.117, momento que coincidió, por otra parte, con la ampliación de la escolaridad obligatoria hasta los 14 años y los movi mientos de renovación pedaqógica. La contestación a esta amplia demanda social, encabezada por Asociaciones de Vecinos, APAS y maestros, fue la puesta en marcha de un ambicioso y poco estructurado plan de construcción de cen tros públicos en la periferia urbana, al mismo tiempo que se cerraban o se trataban de poner al día los viejos edificios de época republicana. Los últimos años han venido marcados por la implanta ción del sistema diseñado por la Ley orgánica de Ordena ción General del Sistema Educativo (LOGSE), y la escolarización de los niños y niñas procedentes de la inmigración de una qran variedad de países. Por otra parte, en el presente vemos que los centros docen tes se han preocupado por promover e incentivar una amplia variedad de actividades culturales, deportivas, artísticas, intercambios con alumnos de otras naciones, etc., que sin duda complementan y mejoran la calidad de la labor edu cativa que se Ileva a cabo en las aulas. EI recorrido que, sin ánimo de exhaustividad, presentamos a continuación no pretende ser más que un paseo por algunos de los espacios que, a lo largo del tiempo, se han dedi Escuelas de Ei Pro^reso,+sn cuyo solar:e ublca aetualmente la Casa de Cultura. Grupo de la Escuela Unitaria de la Estacián de Manóvar en los años 50. cado en nuestra ciudad a la enseñanza primaria y secunda ria y a algunas materias especializadas, así como el recuer do de maestros y maestras que, con su impronta humana e intelectual, Ilegaron a dar nombre o sustituir al del colegio donde ejercieron su profesión. EI trabajo aparece dividido en dos par tes: la primera abarca desde los orígenes y desarrollo de la enseñanza en Elda hasta la Guerra Civil española, en tanto que la segunda comprende desde los años de la postguerra hasta nuestros días. Para realizarlo nos hemos servido tanto de documentación archivística, como de referencias biblio gráficas, periodísticas y publicitarias, de ahí el carácter frag mentario y el contenido desigual sobre cada una de las escuelas reseñadas. AI mismo tiempo, esperamos que se sepan disculpar las omisiones y deslices que, en un volu men tan considerable de datos y en una primera aproximación de conjunto, hayamos podido cometer. N ESCUELAS Y ENSENANTES HASTA 1937 DENOMINACIÓN DESCRIPCIÓN EI stylus de EI Monastil Instrumento gráfico de hueso que se empleaba en la Antigiiedad para escribir sobre tablillas de madera enceradas. Era de uso frecuente para la realización de los ejercicios escolares. Enseñanza en las mezquitas Las mezquitas musulmanas, además de lugar de oración, son y han sido lugares de encuentro, centros de comunicación y de enseñanza coránica, por lo que es de suponer que la/s antigua/s mezquita/s de la villa medieval también realizara/n estas funciones. Clases de Gramática en la ermita de Se tienen noticias de la posible enseñanza de esta materia en la antigua ermita S. Antón o en la Iglesia de Sta. Ana de S. Antón o en la Parroquia de Santa Ana (aproximadamente s. XV-XVI). En cambio, sí conocemos de forma documentada que, en el s. XVIII, los frailes de la orden de S. Francisco bajaban a dicha ermita para dar clases de Gramática, según revelan los Libros de Clavarias del Archivo Municipal. Aula de Latinidad del Convento de «Una habitación que sirvió de escuela de primeras letras y latinidad, que Padres Franciscanos «Ntra. Sra. de qratuitamente enseñaban los PP. [franciscanos]» (1562-1835). los Angeles» Escuela Municipal de la Plaza del En 1702 existía una escuela de niños en una casa alquilada por el concejo en esa Ángel plaza pública, por cuyo arrendamiento paqaba 10 libras al año. El mestre descola, organistay relon^gier era Marcelo López; )uan Matheo Grau Crespo desempeñaba el puesto de maestro de Gramática, mientras que la enseñanza musical era competencia de mosén Miguel Morillo. Escuela de Primeras Letras Escuela de niños orientada a la instrucción elemental de la época: catecismo, Iectura, escritura y cuentas (finales del s. XVIII y principios del XIX). Escuela de Gramática o de Latinidad Enseñanza de segundo nivel que tenía como finalidad un conocimiento básico de las Lenquas Latina y Castellana y abría el camino hacia los estudios superiores. Escuela de Niñas o de Costura Escuela que, con unos objetivos limitadísimos, pretendía educar a la mujer mediante oraciones, máximas de pudor, urbanidad y labores propias de su sexo. Escuela Municipal de la Plaza de Situada junto a las cárceles del partido. A esta escuela asistió Emilio Castelar con Abajo anterioridad a 1842. Escuela de D. Joaquín Gras y Juan Profesor de latinidad y humanidades que ejerció en Elda entre 1857 y 1864. Escuela Municipal de EI maestroAyala desempeñó la docencia en la Escuela Municipal, situada en la D. Rafael Ayala Elull calle de La Palmera (hoy Cardenal Cisneros), durante la segunda mitad del s. XIX. Escuela Municipal de Escuela Municipal de niñas que, por la misma época que la anterior, tenía unas Dña. Manuela Santa Coloma 80 alumnas. Escuela de D. Miguel Beltrán Rico o Centro privado de Educación Preescolar, Enseñanza Elementa) y de Adultos, «Nueva Escuela de Párvulos» ubicado en la calle Pierrat (actualmente, Pedrito Rico), n. 1(1886). Escuela de Dña. Concha Bonmatí Sita en la calle Serrano (ahora José Amat Sempere), n.l. Este colegio de niñas se inscribe en la línea de las Escuelas de Costura (finales del s. XIX). Escuela de D. Juan Vidal Vera Fundada en la calle que Ilevaría su nombre, de esta escuela destaca, según el Inspector de Enseñanza Primaria, el acertado método que se sigue y el buen nivel de enseñanza (últimos años del s. XIX y primeros del XX) Academia de Ventura Pastor Centro de Enseñanza Primaria y de Contabilidad que estuvo situado, en la Martínez transición del s. XIX al XX, en la Plaza de Arriba, n. 7. Escuela Nocturna de Giménez y Creada en 1899, gracias a la generosidad de estos fabricantes, a ella asistían Peláez gratuitamente más de 200 niños y adultos. Colegio «Santa María del Carmen» Colegio confesional perteneciente a la Congregación de las HH. de la Virgen de las HH. Carmelitas. María del Monte Carmelo (carmelitas), cuyos oríqenes en Elda se remontan al Colegio «Sta. Teresa» año 1901, con distintos emplazamientos: Casa Abadía, calles A. Maura, S. Roque y avenida de los Álamos. Otras escuelas privadas a comienzos - La de Dña. Salud Martínez. -La de Dña. Josefa Martínez. del s. XX: - La de Dña. Emilia Juan (o Navarro). -La de D. Alfredo García. - La de Dña. María Jesús García. -«Y dos que Ilaman laicas» Escuelas Municipales en el primer Siempre en locales alquilados, estuvieron ubicadas en distintos lugares: tercio del s. XX - La de niños en las calles Independencia (1904) y lardines (1906). La de niñas en la calle Nueva (1904). Ambas pasan, en 1910, a la calle Antor,io Maura. - Escuelas Graduadas de cuatro secciones para cada sexo (concedidas en 1916), situadas en los años veinte en el comienzo de la avenida de Chapí, a la altura de la calle Chapitel. Escuela Racionalista Academias de Música Centro laico que seguía muy de cerca el ejemplo de la Escuela Moderna, de Ferrer i Guardia: coeducación de alumnos y alumnas, igualdad interclasista, ausencia de premios y castigos, defensa de la infancia, hiqiene escolar, contacto con la naturaleza, etc. La de D. Ramón Gorgé, en la calle de La Palmera. La de D. Francisco Santos Amat. - La Academia de educandos de la Banda de Música «Santa Cecilia» ha pereqrinado con ella en las distintas sedes de que ha dispuesto. Academia de D. Eliso o Colegio Fundada por D. Eliso Verdú Sala (1870-1956) en la calle S. Roque y luego Academia «Verdú» trasladada a la calle Hilarión Eslava. EI centro, «honra y orgullo de Elda», disponía de secciones de párvulos, instrucción primaria, secundaria y clases especiales (Contabilidad, Cálculo Mercantil, Taquigrafía, Mecanografía, Idiomas y Oposiciones). Escuela de D. Luis Crespo Ubicada en lo que era el final de la calle Cervantes, esquina a José María Pemán, en los años veinte del siglo pasado. Escuela de D. Damián Requena Situada en la calle de S. Antón o en la de La Comadre, también en la década de los veinte. Impartía clases nocturnas para trabajadores. Academia «Insa» Academia «Alfa» Creada por D. Francisco Insa, Jefe local de Teléqrafos, en la tercera década del siqlo pasado, estaba especializada en preparar «carreras del Estado», es decir, opositores para los cuerpos de correos, teléqrafos y ferrocarriles. Escuela qratuita de bordadoras abierta en 1930 por la empresa de máquinas de coser del mismo nombre que debía enseñar, asimismo, la técnica del aparado. Escuela de D. Pascual Borruel Coleqio de párvulos y enseñanza elemental, sito en la calle Antonio Maura, en los años treinta. anteriormente tuvo otra escuela en la calle La Cañamona. Escuelas Nacionales «18 de Julio» Escuelas públicas del Barrio de «EI Proqreso» que estaban ubicadas en el solar Escuelas Nacionales «EI Progreso» que, actualmente, ocupa la Casa Municipal de Cultura. Se componía de dos viviendas de la Cooperativa de Casas Baratas «EI Proqreso», con cuatro aulas: una de párvulos, otra de niños y dos de niñas. Se mantuvo en funcionamiento desde el curso escolar 1931/32 hasta el de 1978/79. Escuelas Nacionales del Barrio de La Sociedad de Casas Baratas para Obreros «La Fraternidad» (posteriormente, «La Fraternidad» «EI Ahorro») ofreció al Ayuntamiento, en 1931, una finca compuesta por dos locales independientes, unidos por un patio intermedio de 30 m. x 9 m., para destinarla a escuela de Primera Enseñanza. Escuela Nacional del Barrio de la Escuela unitaria mixta que entró en funcionamiento en octubre de 1931; estaba Estación de Monóvar ( término de ubicada al borde mismo del antiquo trazado de la carretera C-3213 y representa Elda) el único ejemplo de escuela pedánea en el término municipal. Collége Française Constituye una verdadera rareza en el panorama local. Especie de liceo francés que estuvo situado en una casa señorial de la calle P. Guarinos (hoy Pedrito Rico), durante la década de los años treinta, en el que se impartía enseñanza primaria, qestión administrativa, estudios de Comercio y, naturalmente, Idiomas. Academia Preparatoria «Capilla» José Capilla Beltrán (1897-1963), conocido por sus importantes trabajos periodísticos y liierarios, también dio clases de Contabilidad y Cálculo Mercaniil en los años previos a la querra. Escuelas Nacionales «Monte Centro construido por el Ayuntamiento para destinarlo, en un principio, al Calvario». sistema avemariano del P. Andrés Manjón, pero que, al suprimirse las Escuelas Nacionales «Giner de los subvenciones a este tipo de establecimientos, se transformó en Escuela Ríos» Nacional, comenzando su andadura docente en el curso 1932/33. Colegio Público «Padre Manjón» Con sus más de setenta años de historia, es el centro más emblemático de Escuelas Graduadas o Escuelas nuestra ciudad, donde representa el ejemplo de escuela por antonomasia. EI Nacionales «Emilio Castelar», larqo proceso de su creación, situado entre 1910 y 1932, se dio por bien (coloquialmente, «Escuelas empleado cuando tras su inauquración, el 7 de septiembre de 1932, el edificio Nuevas») fue calificado de suntuoso, magnífico; soberbio, grandioso y dehermosas Escuelas Nacionales. EI Grupo Escolar estaba inteqrado por dos Escuelas Graduadas, con 6 secciones para cada sexo, que funcionaban de forma independiente. En 1956 la Escuela Graduada de Niñas pasó a Ilamarse «Inmaculada Concepción» y la de Niños «S.luan Bautista de la Salle», pero seis años más tarde se decidió unificar el nombre en Coleqio Nacional «Padre Manjón», aprovechando el nombre de la calle donde está ubicado (no por la pedaqoqía manjoniana). En 1970 se inaugura el C.N. «Cardenal Cisneros», levantado en el patio de recreo del «P. Manjón», con lo que el núcleo formado por ambos centros se convertiría, según ).L. Bazán, en el complejo escolar «más grande de la provincia de Alicante y el tercero de toda España» y hubo de proceder a su desmasificación, a medida que se construían nuevos centros docentes en la periferia de la ciudad. Escuela de D. Juan Madrona Ibáñez Colonias escolares de niños y niñas refugiad@s durante la Guerra civil Instituto Obrero y Escuela de Preparación Cultural Escuela Profesional de la Industria del Calzado y Derivados de la Piel, anteriormente «Ateneo Artístico de Modelistas y Patronistas» (popularmente, Escuela de Artes y Oficios) D. )uan Madrona (Montealegre del Castillo, 1903), poeta y maestro, comenzó a dar clases en Elda hacia 1935. Su sólida formación humanística le permitió dar clases de un amplio abanico de materias que abarcaba desde la enseñanza primaria, secundaria y los idiomas hasta las cuestiones relacionadas con el mundo empresarial (peritaje mercantil y secretariado), utilizando para ello el local de la sociedad de socorros mutuos «La Caridad», en la calle Capitán Aguilar. Después de la contienda civil reabrió su academia en la calle Pi i Margall (antes Gral. Moscardó), a la altura de la plaza Castelar. Su jubilación tuvo lugar en 1968. Los Grupos Escolares «Pérez Galdós» y«Bartolomé Cossío», ambos de Madrid, fueron instalados con sus respectivos cuadros de profesores en las EE. NN. «Emilio Castelar» (1937). Centros formativos proletarios vinculados a la C.N.T.-F.A.I., creados durante la contienda civil. Escuela creada oficialmente el 13 de marzo de 1937 (Gaceta de Madrid) para enseñanza profesional de las materias relacionadas con la industria del calzado y conexas. Estuvo ubicada en el Barrio «EI Progreso» y respondía a una vieja aspiración expresada reiteradamente por empresarios, sindicatos, maestros y gobiernos municipales. Este centro representa el antecedente más inmediato del Taller Escuela Sindical del Calzado o Escuela Profesional del Calzado. ESCUELAS, ACADEMIAS Y MAESTR@S (1940-2003) Escuelas Infantiles E. I. Santa Infancia (1976). E. I. EI Puente (1988). E. I. EI Mirador (1988). E. I. Nuevo Almafrá (1982). Colegios Públicos C.P. Padre Manjón (1932). C.P. Virgen de la Salud (1962). C.P. Seráfico (1975). C.P. Rico y Amat (1976). C.P. Migue) Servet (1978). C.P. Miguel Hernández (1979). C.P. Pintor Sorolla (1979). C.P. Antonio Machado (1979). C.P. Santo Negro (1979). C.P. Miguel de Cervantes (1982). Centros concertados Centros de Enseñanza Secundaria C. Santa María del Carmen, anteriormente Ntra. Sra. del Carmen (1901) y Santa Teresa (1964). C. Sagrada Familia (1963). I.E.S. Azorín (1967). I.E.S. La Melva (1968, continuador directo de la Escuela Profesional del Calzado 0 Escuela de AA. y 00., que venía funcionando en la calle Araqón desde 1952). I.E.S. Monastil (1978). I.E.S. La Torreta (1978). I.E.S. Valle de Elda (1999). C. Sagrada Familia. C. Santa María del Carmen. Academias y escuelas privadas desaparecidas. Centros Públicos desaparecidos y cambios de denominación. Años 40 D. Norberto Verdú. D Francisco Verdú D. Jesús Andrés Sinobas D.1osé Navarro Payá. Años 50 Escuelas Parroquiales del Barrio de la Estación D. Pedro Gras. D. Pascual. Años 60 Colegio Lloret. Dña. Antonia Tortosa. D. Francisco Cuenca López Dña. María Teresa Herrero. Dña. Julita Gómez Hernando. D. Antonio Sarabia. Dña. Purita Andrés. Colegio San Fernando. Academia Cervantes. Dña. Adela Busquier. D.1osé Rico Albert. D. José Fernando Bertomeu. D. Francisco Verdú Berenguer. Escuelas de Bolón. Dña. María Brú. Academia Vera (D. Pablo) Academia Sanabria. Instituto de Idiomas Modernos en la Sagrada Familia. Años 70 Colegio Academia ldella. Academia D. Bosco. Centro Educativo «La Tafalera». Academia Godo. Años 80 Cetac «Romeu». Academia Maestre (D. Emilio). Emilio Castelar (actual Padre Manjón). La Fraternidad. Escuela Unitaria de la Estación de Monóvar. Giner de los Rios (posteriormente, Monte Calvario) EI Progreso (después, 18 deJulio). Ramón Nocedal. San Francisco de Sales. Cardenal Cisneros (fusionado con el C.P. Padre Manjón). 18 de Julio (anteriormente, EI Progreso). Monte Calvario. Alto del Pino-Virgen de la Salud (actualmente, Virgen de la Salud). San Cristóbal. EI Negret. Giner de los Ríos (Polígono La Almafrá). Emilio Castelar, (Polígono La Almafrá). Sempere y Guarinos. OTROS CENTROS Y SERVICIOS EDUCATIVOS Centro de Educación Permanente de 1976 Alfabetización, Graduado ESO, Español para inmigrantes, Valenciano, Adultos «Antonio Porpetta». etc.. Servicio Psicopedagógico Escolar. (SPE) 1986 Labores de apoyo a los centros públicos Escuela Universitaria de Relaciones laborales. 1969 En 1989 pasó a ser adscrita de la Universidad de Alicante. r ^ C^ 5 Inescop. 1972 Estudios técnicos relacionados con el sector calzado, gestión empresarial e idiomas. Universidad Nacional de Educación 1980 Centro asociado de la sede de Elche. Imparte el curso de acceso para a Distancia, ( UNED). mayores de 25 años. Conservatorio Profesional de Música Ruperto Chapí. 1980 En 1993 se íncorpora en la red de centros públicos. Centro de Formación, Innovación y 1990 Actividades formativas del profesorado. Anteriormente se denominó Recursos Educativos, ( CEFIRE). CEP. Escuela Taller Castillo de Elda, 1991 Programas formativas dependientes del SERVEF con una duración de (IDELSA). dos años. Centro Universitario de Idiomas a 2002 Dependiente de la UNED, imparte cursos de Inglés, Francés, Italiano y Distancia Alemán en los niveles elemental, intermedio y avanzado. Gabinete Técnico Municipal de 1983 Heredero del Gabinete Psicopedagógico Municipal, mantiene la Educación Escuela de Padres. Realiza también cursos para adultos, Escuelas de Verano, etc. Fuentes y bibliagrafía: AMAT Y SEMPERE, L., Elda. Ed. facs. Elda : Ayuntamiento-Uni versidad de Alicante, 2 v. EI baúl del estudianteydel emp1eo2003. Elda: Ayuntamiento-IDEL SA, 2003. BAZÁN LÓPEZ,I.L. (1989), Historia del Colegio «Padre Manjón». Elda: Club de Campo, 1989. BAZÁN LÓPEZ,I.L. (1992), «60 años haciendo camino». En: Fiestas Mayores, n. 9, 1992, p. 40-41. CANDELAS ORGILÉS, R., «D. Eliso». En: Fiestas Mayores, n. 19, 2002, p. 55-59. CAPILLA BELTRÁN,1., «Elda necesita escuelas, más escuelas». En: Albor, n. l, 1933. CASTELAR, E., Recuerdos de Elda o Las fiestas de mi pueblo. (...) Datos bio^ráficos generales y de su infancia en Elda recopi lados y completados porl.P.P. Madrid : Tip. de T. Minuesa de los Ríos, 1899. CRESPO GARCÍA, F. (Coord.. y dir.), Guía ^eneral de Elda 1964. Elda: F.C.G., 1964. La enseñanza pública: una enseñanza de calidad. Elda : Ayuntamiento, 2000. GARCÍA LLOBREGAT, E. (1983), «Recuerdos de las Escuelas Nue uas»». En: Alborada, n. 29, 1983, s.p. GARCÍA LLOBREGAT, E. (2001), «Las primeras luces». En: Fiestas Mayores, n. 18, 2001, p. 72-75. GONZÁLEZ HERNÁNDEZ, M.-A., «La enseñanza de Primeras Letras y de Gramática en el Vinalopó Mitjá y en IAla cantí (1733-1783)». En: Reuista del Vinalopó, n. 3, 2000, p. 137-157. Ide11a. Semanario independiente. Elda : Manuel Maestre Gras, 1926-1930. Informe de la Concejalía de Educación del Excmo. Ayuntamiento de Elda sobre el estado de los centros docentes. Elda, 17 de julio de 1995. MAESTRE AMAT, L., y MAESTRE VERA, E., Cien años de presencia carmelita. Elda : Colegio Ntra. Sra. del Carmen, 2001. NAVARRO PASTOR, A. (1981), Historia de Elda. Alicante: C.A.P.A., 1981, 3 v. NAVARRO PASTOR, A. (1995), «Escuelas y maestros en Elda antes de nuestro siglo». En: Fiesfas Mayores, n. 12, 1995, p. 34-27. 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EI Estado está inte resado en la alfabetización porque así contribuía a mejorar las actividades intelectuales y productivas que redunda ban en el beneficio económico del país. Con la Ilustración, la educación alcanza un papel pro taqonista. Instruirse es el «leit motiu» de los viajeros y uno de los campos donde los qobiernos ensayarán nuevas teorías, al mismo tiempo que se convertía en la base sobre la que descansaban muchos planteamientos reformistas. Los planes de estudio serán objeto de qrandes debates y Antiguo grabado extraido de un libro escolar que muestra las desigualdades en el aprendizaje de niños y niñas. los métodos educativos, así como el mismo concepto de educa ción, fueron sometidos a revisión partiendo de las propuestas roussonianas contenidas en el Emilio. La «felicidad» de los ilustrados se concibe como alqo alcan zable en este mundo a través del proqreso económico y científico y la educación aparece como uno de los medios útiles para consequir esta felicidad.Jovellanos considera la instrucción nacional «como la primera y más abundante fuente de la pública felicidad». Pero el panorama educativo español era desolador a todos los niveles. La Universidad era impermeable a la renovación, los cen tros educativos de qrado medio estaban controlados por los refrac tarios a las reformas y la Enseñanza Primaria contaba con centros que, o bien eran insuficientes o bien se encontraban en un deplo rable estado de abandono, penuria económica e indiqencia inte lectual. EI qobierno se desentendía de la enseñanza primaria; eran los municipios quienes la controlaban y, en alqunos casos, sub vencionaban. La Iglesia hizo alqo más: en alqunas iqlesias y con ventos los sacristanes y los frailes enseñaban primeras letras a las clases económicamente débiles. Únicamente los que disponían de medios económicos contrataban educadores privados para sus hijos. Tampoco se exiqía titulación para ejercer de maestro. Así que el impulso había que darlo desde la Corona, siendo ejemplos (as Reales Provisiones de 1771 y 1780 y la Real Orden de 1806, que entendían de la selección y nombramiento de los docentes de pri meras letras y el contenido de los textos escolares. La enseñanza estaba muy controlada por el Estado y por la Iglesia para evitar desviaciones de la ortodoxia imperante; de ahí la abundante normativa, criterios de selección de enseñantes y control sobre las traducciones de la Biblia y textos que servían de base. Por otra parte, abundaban los casos de intrusismo y de «leccionistas», cuyo control más eficaz venía de las autoridades municipales y de los maestros autorizados, que ya en 1666 habían consequido aqremiarse en la Hermandad de San Casiano. Durante el reinado de Carlos IV fueron notables los inten tos de Godoy en el campo de la renovación pedaqóqica. La idea persequida de reqenerar al pueblo con ayuda de las leyes tuvo su campo de experimentación en el Instituto Real Pestalozziano, creado en Madrid en 1806 para hijos de nobles y militares a fin de comprobar la bondad del método de ense ñanza postulado por Pestalozzi. Este método había sido el eleqido por una comisión desiqnada por Godoy de entre otros empleados en Europa. Pero pese a los esfuerzos del ministro, los planes de enseñanza se reducían al arte de leer, escribir e iniciación a la Aritmética. Así que la Enseñanza Primaria siquió siendo una asiqnatu ra pendiente del Gobierno durante todo el siqlo y parte del siquien te, ya que hasta adelantado el siqlo XIX, y a pesar de las reformas liberales de las Cortes de Cádiz, se continuaba sin ninquna reforma. Durante esta época conocemos la existencia de tres escue las públicas en Elda: una de Primeras Letras, otra de Latinidad y otra de Costura, para niñas. De la de Primeras Letras tenemos constancia para el año 1702: una Casa-Escuela para niños en la Plaza del Ánqel, sostenida con fondos municipales y atendida por un mestre de Escola, Marcelo López, que además era orqanista y relongier. ^ ° ? : CAIZTI^,i.A, . ^ ^ll C) CTR.INA CHRI STIA NA, - Z»ipxe,Qa eon Pzivileyío^2eal orL la Sanfat^l¢aia.decUalladvlid. Contede C^ Santidad clen dlas dc indulgeaa ĉ ia á los c]ue eñftñárcn , b aprend.i^^en en ella. Ay Paulina , con abColucion t^rvada a!u Santidads contta los que contrah7cieren efla Garúlla,en todp2i^ enparta kiho de Lf5fa , : ,; Mr Textos escolares del siglo XVIII. GUIR DEL NII^O INSTRUIDO, r Paor,E coucaoo, CARTILLA Y CATON PARA TODAS ARIFS. CONTIENE L?n Abeeedario y Silabario con reglas para pronun ci;n^ bien los vucaLlos : nnevo metodu , por el que se Iogra aprenddn lus Niños eou brcvedad á leer y escrlbir : duarmentos de 17o^trina Cbristiana, y Je educaciou pnra Lobradm•es, Pastnres, Artesanos y DTcuestrales utiles á tod;rs perwuas , con las Cuen tas de las Cinao Rrelas , Ta(+las para tod-as, otrascuriosas, y varias instrucciones de impor tancia a beueficio del públito. sv iz^roA Franeirm Gaarir! A9alo de díelina, PrerbL•rro delaYr1fa dr YrUa,lúr , T•rorera Jr S. jusn, Cmnirarm dd S^nroOfi o. /4.,,J.,dor de lar Erurl,rr dr Prnirrn, ^a : de fa de Curi Jr.[ .l. pri^nrrur lerr,rr : y drf Reol Cclrgio dr Hufr7anor E.l^^:andor dd did•o Pnerara , Ar.náerpudo de To[.do, y orror dr n Proninria d: r^ n/.^„^%, : rada rn rua ao..o l.+ udvor^ooion dr nverrra Srñoru dr lar polorrr, rilu rarranivror. cnn scartcic. MADA3D iN LA p IMYAF:ITA AF.AL. i(,07. Esta doble faceta de organista y maestro de primeras letras se prolonga a lo larqo del siglo, durante el cual, el Ayuntamiento paga los dos salarios. En la concordia de 1769 entre el conde de Elda y el obispo de Orihuela, el primero se comprometía a dotar a la iglesia de organista, que aunque debía de ser también maestro de escue la, mientras que su salario sería pagado entre el conde y el Ayun tamiento. En alguna fecha comprendida entre 1771, en que la tarea de enseñar se independiza del organista, y 1786, fecha desde la que tenemos documentado que el magisterio de primeras letras recae en frailes observantes del convento de Nuestra Señora de los Ánge les, es cuando se establece el convenio educativo entre Ayunta miento y comunidad religiosa. EI acuerdo contemplaba el procedimiento para designar al maestro, que pasaba por la elección municipal y el refrendo de la autoridad conventual. La cuantía económica con la que estaba dotado el puesto de maestro varía con el tiempo, desde las 52 libras que cobra como maes tro-organista en algún momento de finales del XVI I, las 100 como maestro-organista-relojero a principios del siglo XVIII, las 75 como maestro y organista durante el primer tercio del Setecientos y los 20 pesos, hasta que se reguló por ley la partida económica que cada Ayuntamiento debía asignar al maestro:451 reales de vellón con 26 maravedíes. En 1817 el magisterio de primeras letras pasa a cargo de la parroquia. En cuanto a horario y metodología, los niños eldenses entraban en verano a las siete de la mañana y a las tres de la tarde; y en invierno a las ocho y a las dos. Desde el punto de vista didáctico el punto X de la Provisión de 1771 establecía como libros de texto para escolares el Catecismo Histórico de Fleury, el Compendio Histórico de la Religión de Pintón, un compen dio de Historia de la Nación elegido por los corregidores de las cabezas de Partidos y un Catecismo señalado por el ordina ^ S^AB^I^^O PAR1 USO DL• LA3 IICALCS ESCCLLA$ DEL SITIO DE S. IL^^FOiYSO DE L.f C0^1fITTf A DE S. Dl. Y AE SAN ISIDRO^ LA CO$TE. N^ALAG^i, Impr. de Ñlartinez Calle del Marquea. rio de la diócesis. EI programa educativo eldense estaba un poco mermado en relación con el oficial, ya que las materias impartidas se limitaban a rudimentos de lectura, escritura y cálculo de las cuatros reglas según el método de don Tor cuato Torio de la Riva, obligatorio en todas las escuelas del reino por orden del Consejo de Castilla de 23 de septiembre de 1802; y la doctrina cristiana del Padre Vives, catecismo señalado por el ordinario para toda la diócesis. Una práctica relacionada con la costumbre de celebrar certá menes o concursos públicos como parte de la demostración de los conocimientos adquiridos por los niños, consistía en que los jue ves, el maestro seleccionaba a los mejores alumnos que salían por las calles explicando la doctrina cristiana. También a principio de siglo contaba la villa de Elda con un maestro de Gramática, aunque no era propiamente una escuela, sino unos estudios preparatorios, unos rudimentos que per mitían continuar los estudios en otros centros más capacitados, como el Seminario de Orihuela, a aquellos niños cuyos padres disponí an de cierta holqura económica y pretendían para sus hijos un porvenir distinto al de la agricultura, bien por cierto prurito per sonal, bien por no poder repartir el patrimonio familiar entre varios hijos. Este tipo de estudios no está financiado de forma oficial por el Ayuntamiento que, sin embargo, lo mantenía a través del concepto de «limosna» AI menos durante algún tiempo, las clases de Gramática se impartían en la ermita de San Antón, donde un padre francisca no bajaba desde el convento. En realidad, esta escuela de Latinidad se trataba de una ini ciación al conocimiento del latín utilizando, como texto base la «Gramática» de Nebrija, obligatorio desde 1598 por orden del Con sejo de Castilla, y complementado con el estudio de las obras clá sicas de autores grecolatinos, doctrina cristiana y algo de Retórica AI fondo, a la izquierda, el Convento de los Franciscanos, segun detalle de la conocida foto de Laurent de 1858. y Filosofía. Los métodos eran los mismos que en las escuelas de primeras letras pero aplicados con mayor rigor. Regía el mismo horario que en la escuela de Primeras Letras y la enseñanza se basaba en el «Arte» de Antonio de Nebrija y en la construcción de «selectas profanas» ElArte de Nebrija, con la explicación y notas del padre Agustín de San Juan Bautista, religioso escolapio, reducidas a compendio por el padre Pedro de Santa María Magdalena, también escolapio, resumido a principios del siglo XVII porel padre Luis de la Cerda, será la base de los conocimientos gramaticales posteriores. Este texto fue el propuesto para la enseñanza de la Gramática en el seminario de Orihuela fundado por el obispo Gómez de Terán y, por tanto, sequido en todas las escuelas de la diócesis. La construcción de «selectas profanas» se refería al uso de «Epístolas y Oraciones selectas» de ciertos clásicos, como Cice rón, Horacio, Ovidio, Marcial, etc., usados en todas la ŝ escuelas del reino. Las «cartas selectas» de S.Jerónimo y S. Pío V son tam bién «Epístolas». La «educación correspondiente» se refiere a las reglas de cortesía y urbanidad. Éste es el bagaje cultural con el que los niños eldenses salían de las aulas, unos para incorporarse al mundo laboral y otros, muy pocos, para continuar estudios fuera de Elda, como el caso de Sem pere y Guarinos, quien a los 10 años ingresa en el Seminario de Orihuela para estudiarGramática propiamente dicha después de las primeras letras y los rudimentos de la Gramática impartida por los religiosos del convento. La enseñanza femenina estaba al cuidado de dos maestras nombradas y financiadas por el señor de la villa. La educación de las niñas también se reguló en 1771. Su obje tivo era simplemente instruirlas en los rudimentos de la doctrina cristiana y labores propias de su sexo. «Por la mañana luego que están juntas la niñas, la oración de S. Luis de Gonzaga, luego toman la labor y por ambas Maes tras reunidas avían a cada niña en la hacienda que hacer. A las 91as oraciones de la Doctrina Cristiana diciendo una niña delante y repitiendo las demás sin dejar la labor; a las 10 una parte de rosario a María Santísima sin dejar la labor; concluida ésta se les lee un punto de meditación y leido se les hace guardar silencio por un rato para que mediten; al concluir el Bendito y una salve; por la tarde semejante distribución de horas a la de la mañana añadiendo los dolores de S. José y los de la Virgen». La enseñanza es una tarea irrenunciable de la Iglesia, casi siem pre ejercida por eclesiásticos o religiosos y centralizada en el con vento, pero financiada con fondos públicos. Educación y formación cristiana eran dos conceptos indisolublemnente unidos, cuya enseñanza estaba encomendada a la Iqlesia que así ejercía su labor de control sobre las conciencias formándolas en el respeto a los valo res tradicionales. La inspección se efectuaba a través de las visitas pastorales realizadas por un Visitador que recuerda a los maes tros y maestras «(...) el mayor esmero y ciudado en el cumplimiento de su deber e instrucción de los Niños, principalmente en la Doctri na Cristinana y buenas costumbres(...)» Con todo esto, podemos esbozar un pequeño mapa esco lar en el que reconocemos una enseñanza pública impartida por reliqiosos y subvencionada con fondos propios del Ayuntamiento, que era quien asignaba las plazas. EI modelo es el propio del siglo XVIII español (y de todo el Antiguo Régimen) en el que toda la enseñanza giraba en torno a la religión. Elda pre senta, a pequeña escala, el reflejo de lo existente en Orihuela y Alicante; la primera, antigua capital de la Gobernación y sede universitaria; y la segunda, sin Ileqar a la categoría de Orihuela, ambas con predominio dominico y jesuita. La enseñanza elden se está en manos de los franciscanos, orden que no contaba con tradición docente, pero cuya condición de religiosos era sufi ciente o Ilevaba implícitas las condiciones para ejercer la docen cia a un nivel elémental, como era, en líneas generales, el requerido para una juventud que, en su inmensa mayoría, estaba desti nada a las labores del campo. Notas: 1. JOVELLANOS, G.M. de: Bases para la formación de un Plan General de Instrucción Pública. Obras, Madrid, 1845, vol. II, p. 38. L a enaua venicuia de la educación en Elda hasta 1787 BRAULI MONTOYA /^BAT I 16 de abril de 1787 Ilegó un mensajero de Orihuela con una Carta Orden de Valencia que debía ser difundida y aplicada en la villa de Elda. Hacía referencia a una serie de obli gaciones sobre la instrucción escolar para los niños y niñas. EI escribano que certificó su recibo y dio cuenta de su publi cación escribió lo siguiente en el legajo que traía el mensajero y que hoy se conserva en el Archivo Histórico de Orihuela. Elda y Abril 16 de 1787. La Real Justicia de esta villa queda cerciorada de la pre cedente circular y, con copia para su cumplimiento, ya que se ha publicado, según costumbre, portodos los para dos acostumbrados de esta villa a son de tambor y por Grabado anónimo del siglo XIX titulado «Niños de jornaleros Ilevando la comida a sus padres» que muestra la infancia que no asiste a la escuela. voz de Francisco Antonio Moreno, público pregonero de la misma, con concurrencia de todas gentes a oirle. Y para que conste, lo firmo. Josef Amat y Ríos. iPero qué decía concretamente aquella orden que se difundió también portodos los pueblos de la jurisdicción oriolana, a la que per tenecía Elda? Leámosla con atención. Carta Orden del Señor Governador de la Sala del Crimen del presente Reyno para la aplicación y recogimiento de Niños y Niñas. D. Pedro Buonafede theniente coronel de los Reales exércitos, Governador Militar y Político de la Ciudad de Orihuela y su Parti do. Por quanto he recivido Carta Orden del Señor D.loaquín Herrán, Governador de la Sala del Crimen del presente Reyno de Valen cia, su fecha veinte y seis del transcurrido Marzo, refrendada por D. Francisco Antonio Vázquez, escribano oficial de Sala, que assí dice. Con motivo de haver sucedido en el encargo de Governador de la Sala del Crimen de esta Real Audiencia el Señor D. Joaquín Herrán, del Consejo de su Magestad, y su ohidor en la misma, y estar a su cuidado el Ramo de escuelas y costuras para su conser vación y aumento, en que interesa la felicidad común y utilidad del estado, y que por medio de la diaria asistencia de los niños y niñas a la escuela y cosiura se logre su educación y enseñanza, y se cumplan las intenciones de su Magestad, que tan estrechamente tiene encargado este asumpto: deceando su Señoría que en todas las ciudades, villas y lugares de este Reyno se observen y guar den las órdenes y providencias tomadas en el particular, ha man dado se escriban cartas circulares a los Corregidores Cavezas de Partido para que, comunicándolas por Vereda a las Justicias de los lugares de su respective comprehención, hagan saber por medio de vando público a los padres que tienen niños y niñas la presisa obligación en que se hallan para que, sin escusa alguna, asistan éstos diariamente a la escuela y costura desde la edad de cinco años hasta los doce, tres horas de mañana y tres de tarde, quieran o no quieran sus padres. Y quando no se logre el fin propuesto, encontrando a algunos niños y niñas por las calles, plazas y cam pos a las horas que deben estar en la escuela y costura, les exixan a los padres quatro reales vellón por la primera vez, ocho por la segun da, y ocho días de cárcel por la tercera, imbirtiendo dichas penas en cartillas, catones, libros, plumas y papel a beneficio de los niños pobres de las mismas escuelas cuyos padres estén imposibilitados de costearlo. Y lo que toca a las niñas, en yl o y agujas del mismo modo que va prevenido para con los chicos, en lo que intervendrán los Alcaldes, Regidor Decano y Síndico Procurador General de cada pue blo. Que esta orden se entienda también con los sucesores en sus respective empleos, a cuyo ingreso anualmente por el escribano de Ayuntamiento se les hará saver a fin de que celen y vigilen sobre su observancia, la que al intento se pondrá en el archivo. Que igual mente prevengan a los padres que a los niños menores de los cinco años no les dexen salir a la calle, plazas y campos, y les ten gan recogidos en casa para evitar toda desgracia y mala educa ción; que el maestro y costurera estén prontos en la escuela y costura las tres horas de mañana y tres de tarde para la enseñan za, y no permita el maestro que los niños ablen en el idioma valen ciano, sí que les instruya en el castellano para la mejor pronunciación, dando menudamente vista a la escuela y costura, en lo que contribuyan por su parte los curas párrocos con su celo. Lo que participo a usted de orden de su Señoría para su inte ligencia y que lo comunique a los lugares de su comprehensión. Y, de quedar así executado, le den a usted aviso, noticiándomelo para hacerlo presente a dicho Señor, y acusándome el recivo de ésta. Dios guarde a usted muchos años. Valencia y Marzo veinte y seis de mil setecientos ochenta y siete. D. Francisco Antonio Vázquez, escribano. Cartas y pueblos: Molins 1 dz (...) Guardamar 6d Catral 6d Crevillente 6d Aspe 6d Novelda 6d Elda 6d Monóvar 6d Pet re I 5d (...) De Oficial de Sala. Señor D. Pedro Buonafede. Por tanto, ordeno y mando a las lusticias de los pueblos de esta Governación que van notados al margen vean la preinserta Carta Orden y, en su más puntual debido obedecimiento, guar den, cumplan y executen quanto en la misma se manda en todo y por todo con la mayor prontitud, dándome aviso de tenerlo executado en el modo que se previene. Y de quedar enteradas para su obser vancia, pondrán a continuación de esta nota que lo acredite, por convenir así al real servicio. Y pagarán al veredero los asignados dine ros. Dado en la ciudad de Orihuela a diez días del mes de Abril, año mil setecientos ochenta y siete. Pedro Buonafede. Por mandato de su Señoría. Trinitario Martínez. Como se ve, a parte de otras indi caciones, de interés para la historia de la educación (sobre la obligato riedad de la asistencia a la escuela a los menores de 12 años, sobre el hora rio de alumnos y maestros, sobre las multas a imponer por faltar a estas ordenanzas, etc), se prohibía el uso del valenciano como lengua vehicu lar de la escuela. No era la primera vez que se hacía porque 19 años antes el rey Carlos III ya había ordenado por una Real Cédula, de 23 de junio de 1768, que la enseñanza de prime ras Letras, Latinidad, y Retórica se haga en Lengua Castellana generalmente, donde quiera que no se practique, cuidando de su cumpli miento las Audiencias yJusticias res pectivas, recomendándosetambien por el mi Consejo á los Diocesanos, Universidades, y Superiores Regulares para su exácta observancia, y diligencia en extenderel idioma general de la Nacion para su mayorarmonía,yenlace recíproco: Es evidente que la insistencia, casi dos décadas después, desde Valencia, en el cumplimienio de esta ley, significaba que la cédula real no había sido obedecida en el antiguo reino valenciano.0, al menos, no lo habría sido en su mayor parte, seguramente allá donde sólo se habla ba la modalidad valenciana de la lengua catalana. Pero, zqué sucedía en lugares como Elda, donde hoy predomina el castellano? Según nues tras investigaciones, la lengua auióctona de los valencianos se habla ría en Elda, como mucho, hasta la primera mitad del siglo XVIII (Montoya, 1986), por lo que para la fecha de la Carta Orden (1787) ya se habría extinguido. EI caso es que la Carta Orden se difundió en todo el parti do oriolano, que suponemos que era ya entonces, como hoy, de mayo ría castellanohablante. iA qué tenemos que atribuir, pues, la falta de distinción que hacía el mandato entre poblaciones que mantenían el valenciano y las que no lo harían ya? iPodríamos atribuirlo al hecho de que existieran todavía minorías catalanohablantes en Elda y en el resto de la zona que hoy es de habla castellana? z0 bien se trataba de sim ple ignorancia -o despreocupación- de las autoridades sobre la rea lidad ling ŭ ística de cada sitio? Hasta 1707 la lengua de las instituciones valencianas, tanto regio nales como locales, había sido el catalán. Ese mismo año Felipe V prohi be su uso en la administración5 pero no dice nada sobre la instrucción escolar, que debió, pues, continuar con la situación anterior. Unas directrices de 1625 y 1639 de la Universidad de Valencia, que tenía a su cargo la formación de los maestros, nos recuerdan esa situación: ./^wV31. `/ ĵ ^` hN^. GInYM. -------- JA/.^r. ^ fJ1YIrN. I a ^-^ b B c C d D e F. f+^n! ^ GLilarra. ^ // rpa. !.rls 3 wuW. ^+ i T^ G h H i I j ^1 .t:^4rdar.n. ^ I^ l,i^Mr. ^ ^!/as.uiv. .iiJo. ^ rrjr. ^ k K 1 L m ^I n N o 0 Pipa ^ -^ ( Mrinrnm. Ram. Jtnrra. ^ Tn++yrta. ^ ^ p p q Q r R s S .t. T j Ci^na. vl.r+ria `=-^ _ tíiaru . Yndió. ^-1l^ 2rr^ru. .___ a u U v V x X y Y I. z ASECEDARIO 86NCIL1.0, P.sns ^n. / rrinn yrr.sr.,6Gi lnns. r f.erre,/J^ ^ nfidnr,.arv^n:w:r^Rr... n.e.d,.s.• ^nr,^:.r,cy,^o ^..L..y..^.,,r ^, u^..,..n,..,^.w„i,,:n.. Abecedario sencillo de comienzos del s. XIX. que ningun foraster (...) puga mos trar ni tenir escola per ço que no pot pro nunciar bé la nostra llengua (...) que, així los examinadors com los que seran examinats de mestres, hajen y sien per sones de bo yarreglatjuhí, bons costums y uasalls de Ia Magestat del Rey Nostre Señor, precehint semprelos naturals de Valéncia als de altres parts.b Por ese tiempo (primera mitad del siglo XVII), todavía Elda, como el resto del área meridional valenciana que luego se castellanizaría, mantenía el uso de la lengua propia del Reino de Valencia., que era, según lo que acabamos de leer, también la lenqua vehicular de la ense ñanza. En ese aspecto, no habría dife rencias entre Elda y Petrer o Aspe y Novelda, por citar sólo localidades próximas entre si que hoy hablan lenguas distintas. Es decir, los métodos educativos, los con tenidos que se transmitían, los materia les que se usaban y, por lo tanto, la lengua de trabajo, que es nuestro centro de inte rés en el presente artículo, debían ser los mismos. Eso significa que cualquier información que tengamos sobre una población de nuestro entorno, puede ser generalizable al con junto, sobre todo por el hecho de que los maestros solían deambular de pueblo en pueblo. Este es el caso del detalle con que se desglosan en Petrer los pagos que los alumnos debían de efectuar al maestro según el grado que cursaban, lo que nos permite obtener una precio sa aproximación a los contenidos curriculares que se seguían en las escuelas del siglo XVII. (...J fon proposat per loluratluan Paiá que 1o mestre descola que a de uenir diu que vol que li afixgen fins a vint Iliures i que li bestragen 1a una terça, que vegen que•Is par. 1, óida dita proposisió, uoten i determinen que se li done uint Iliures de salari. I per ser veritat, digeren a mi, luan Gil, fes dita memória de Consell en Petrera 2 de mars de 1626. Lo que se li a de pagar: los chits ^sic], los de beseroles, un sou; los que Iletregen i pasen en franserls ^sic] dig ŭ it dinés;los que lligen, un real; los que escriuren (sic], dos reals; los que conten, qua tre reals cada mes. Comensa a seruir a tres de mars 1626 i IX que que se na fet de abril del dit añyMestre Medina. luan Gil en lloch de escrivá.8 Así, la sucesión de los diferentes niveles escolares de aquel entonces era la siguiente: l°, primeras letras; 2°, deletrear; 3°, lectura; 4°, escritura (=caligrafía y ortografía), y 5°, cálculo. De estos cinco niveles, el que consistía en deletrear -parece desprender se- iba unido a«passar en franserls», según nuestra lectura, o enfransechs, según la de Díaz Amat (2001: 23). A la vista de los errores habituales del escribano (provisional) de este acta (chits por chics, escriuren por escriuen), creemos que Juan Gil podia estar refiriéndose al nombre de un libro de lectura que se emple aba para leer en catalán, el Fra Anselm, que venía después de las primeras letras o beceroles (Lladonosa, 1970: 43-44). Este nom bre solía escribirse aglutinado, Franselm, de donde se podía construir el plural correspondiente, Franselms, si alguien quería referirse en sentido colectivo a este libro (Marfany, 2001: 409, 460). A par tir de aquí era posible que el uso popular del nombre degenera ra si no se tenía claro su origen: Fra Anselm Turmeda, autor mallorquín de la literatura catalana que escribió hacia 1397 el Lli bre dels bons amonesfaments. Este libro pasó a utilizarse para enseñar a leer en catalán y conoció muchas ediciones hasta épo cas muy recientes. Por lo tanto, lo más seguro es que el inexper to escribano luan Gil, que anotaba todo lo que oía que decían los regidores municipales (muchos de ellos, iletrados), se referi riera al famoso libro de lectura. No debería sorprendernos, pues, que el mismo libro de lectura que se utilizaba en Petrer se leyera también en la escuela de Elda, sobre todo mientras nuestra población no se diferenció ling ŭ ísticamente de su vecina y, por lo menos, hasta que la Carta Orden de 1787 dictaminó la exclusión definitiva del valenciano o catalán como lengua vehicu lar de la enseñanza en todo el Reino de Valencia. Bibliografía: DÍAZ AMAT, Pascual (2001). La enseñanza en Pefrer. Siglos XVII-XX, Petrer, Ayuntamiento de Petrer / Caja de Crédito de Petrel / Universidad de Alicante. FELIPO ORTS, Amparo (1991). La Universidad de Valencia durante el siglo XVl1(1611-1707), Valencia, Generalitat Valenciana. FERRER GIRONÉS, Francesc (1985). La persecució política de Ia 1lengua catalana, Barcelona, Edicions 62. 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Fondo Municipal, Instrucción pública, D.758, núm.47, folios 7 recto - 8 verso. 4 Citado por Ferrer Gironés (1985: 37). 5 Rea1 Provisión de 3 de agosto de 1707 e Instrucciones de 7 de sep tiembre de 1707 de la Real Chancillería de Valencia. Puede con sultarse la copia que se conserva en el Archivo Municipal de Petrer (AMP), en el interior del libro sin foliar Consells desde 1700 hasta 1712 (carpeta 49-3). 6 Citado por Felipo (1991, 78, 82). La traducción al castellano es la siguiente: «Que ningún forastero (...) pueda enseñar ni tener escue la por el motivo de que no puede pronunciar bien nuestra lengua (...) que, así los examinadores como los que serán examinados de maestros, sean personas de buen y arreglado juicio, buenas costumbres y vasallos de la Majestad del Rey Nuestro Señor, prece= diendo siempre los naturales de Valencia a los de otras partes.» 7 No hemos encontrado nada semejante en las actas correspon dientes del Archivo Municipal de Elda ni tampoco nos da noticia de ello el especialista en historia de la educación comarcal González Hernández (2000). 8«(...) fue propuesto por el Jurado luan Paiá que el maestro de escue la que tiene que venir dice que quiere que le añadan hasta vein te libras y que le adelanten un tercio, que vean qué les parece. Y, oída dicha proposición, votan y determinan que se le den veinte libras de salario. Y por ser verdad, dijeron a mí, Juan Gil, hiciese dicha memoria del Consejo en Petrer a 2 de marzo de 1626. Lo que se le debe pagar: los chicos, los de primeras letras, un sueldo; los que deletrean y pasan en franserls [sic], dieciocho dineros; los que leen, un real; los que escriben, dos reales; los que cuentan, cuatro reales cada mes. Comienza a servir a tres de marzo de 1626 y nueve que se ha hecho de abril del dicho año Maestro Medina.luan Gil en lugar de escribano». (AMP. Llibre de Consells de 1616 a11648. Carpeta 49/1, sin numeración de hojas). «Escuela rural», grabado de Renau para la novela La Barraca, de blasco Ibáñez. La ^ nse ^:i^ en Elda hasta septiembre de 1932 ALBERTO NAVARRO PASTOR LBORADA aborda en este número un aspec to de la cultura eldense muy importante, como es el de la enseñanza en su grado ini cial, puesto que es la base de aquella y del nivel que en este aspecto pudieran adquirir quienes la recibían, a pesar de que esta enseñanza se impartía en modestas escue las en las que abnegados profesionales -más vocacionales que técnicos, aunque de entrega y cualidades docentes demos tradas-, se esforzaban, en muchos casos vanamente, en des- pertar en las mentes infantiles la afición al estudio y a conocer el mundo al que se tendrían que incorporar más tarde, y hacer esto con los escasos medios que estaban a su alcance. EI campo para este estudio es amplio, aunque lo limitemos únicamente a nuestra población, Elda. En la ya impor tante biblioqrafía que se ha ido creando en torno al tema local en sus diversos aspectos no dejan de abordarse las mani festaciones y peculiaridades que la enseñanza en Elda ha adquirido a través de las distintas épocas, habiéndose publi cado estudios específicos, entre ellos el firmado por el autor de estas líneas y publicado en la revista Fiesfas Mayoresen 1995, con el título de «La enseñanza antes de nuestro siqlo», del cual tomamos algunos de los datos referidos a épocas ya bastante lejanas de la nuestra como las de los siglos XVII, XVIII y XIX. Por esta escasez de estudios expresamente dedicados a este aspecto de la enseñanza en Elda en sus periodos históricos es por lo que la iñformación obtenida de las diversas obras publicadas sobre este tema nos resulta más interesante, como lo son las notas aisladas que podemos recoger del citado artí culo y de otros trabajos, ofreciéndolas en síntesis a los lec tores de esta revista como ejemplo de los curiosos aspectos que ofrecía la enseñanza en las lejanas épocas de Elda, al igual probablemente que en cualquier otra población de parecidas características. Es en el siqlo XVII, cuando consta que la villa, o sea el Concejo de la misma, paqaba los salarios del personal que prestaba los servicios necesarios a la misma, entre los cuales des tacaba el «maestro de escuela y orqanista» que cobraba 52 libras al año y el maestro de Gramática, que cobraba 25, conociendo el nombre de Miquel López, «mestre de escola de la villa» a quien en 1678 el Conde de Elda don Juan Andrés Coloma Calvillo otor qó una pieza de terreno junto a la ermita de San Antón para hacerse una casa. En 1702 otro López, Marcelo López, «mes tre de escola, orqanista y relonqier» cobra ba 100 libras anuales por sus servicios en estas tres especialidades. En el mismo año podemos leer en los libros del Archivo Municipal que el Concejo ^. .,,^ mantenía la Casa Escuela, situada en la Plaza del Ánqel, o sea la misma en la que estaba Escuela de niñas en el local de la Avda. Chapí esquina Chapitel. Primera década del emplazado el Ayuntamiento, paqando por siqloXX.(ArchivoAlborada). su arrendamiento 10 libras al año, y por esta misma época paqaba además al maestro de Gramática, el nota rio luan Matheo Grau, así como a un maestro de solfa, ambas enseñanzas posiblemente encuadradas en lo que hoy Ilamarí amos enseñanza superior. En 1751 bajaba del Convento de Franciscanos «Nuestra Seño ra de los Ánqeles» a la población un fraile a leer -o sea a ense ñar- Gramática. Cuando Castelar en su infancia correteaba por las calles de Elda, se apunta que aprendió las primeras letras en la Escuela Muni cipal, situada junto a las cárceles de la Plaza de la Villa, o sea en la popularmente Ilamada Plaza de Abajo, aunque existen discrepancias entre Sax y Elda sobre este período escolar de la infancia del qran tribuno, polémica que queda fuera del tema prin cipal de este trabajo. Podemos leer en el Diccionario de Pascual Madoz que en 1846 había en Elda escuelas donde estudiaban 200 niños y niñas, situación parecida a la que nos expone Vicente Fillol en su Elda en 1884, con 125 niños y 100 niñas, aunque se reqistra ba en la población un alto índice de analfabetismo. Los maes tros eran entonces Rafael Ayala Elull -que falleció en 1885 Fachada principal de la calle Juan Vidal, donde este maestro tuvo su escuela (foto de Ánqel Vera aparecida en la revista Alborada de 1982). _..._.. _ ._. víctima de la epidemia colérica de aquel año-, Joaquín Ferrando Amat y Vicente Tormo Pérez, que cobra ban conjuntamente 3.350 pesetas anuales para los tres. En 1901 fue inauqurado el Cole qio de las Monjas, que en sus 100 años de actividad iba a tener una importante presencia en la edu cación de las niñas eldenses, en los diferentes luqares que a lo larqo de estos años fue ocupando. Primero en la Casa Abadía (esquina de Colón con San Roque), y después en la calle de Antonio Maura, de la cual pasó al edificio construido sobre el antiquo Hospital en la calle de San Roque, esquina a Maura. Con este nuevo centro de ense ñanza existían en la población, por esta época, un coleqio con 100 alum . ^ ^;^Yçs^ .i^.^., t:^1k1`;-i,.y ^if Escuela de D. Pascual Borruel, que estaba situada entonces en la calle La Cañamona (ahora Luis Buñuel). Sobre 1916. nos y otro de niñas con 120 alumnas, además de los coleqios privados diriqido uno de ellos por don luan Vidal Véra, más tarde creador de la imprenta Vidal y la Librería-Papelería de iqual nombre. En 1902 la nueva lunta Provincial de Instrucción Pública cele bró exámenes qenerales en todas las Escuelas Públicas y Pri vadas, cosa que en Elda no se hacía desde unos 25 0 30 años. AI examen celebrado en Elda por el Inspector Sr. Gómez asistió el director del semanario local EI Vinalapó, dejando constancia del mismo en el número 27 de dicho semanario, de fecha 25 de enero de 1903, pero habiendo publicado anteriormente una «inspección» particular suya, que prometía repetir en otras escuelas, presentándose inopinadamente. «EI miércoles, sin previo aviso, -escribía- nos personamos en la escuela municipal de niños para ver qué qrado de ins trucción alcanzaban los rapaces». «EI maestro interino, don Miquel Beltrán, amable de sí, faci litó nuestra misión, diriqiendo a los 131 pequeños prequntas pertinentes y, contestadas éstas y otras que formulamos, pudi mos convencernos de la penosa labor realizada por el ilustrado profesor. «Los niños están todos a la debida altura.Otro día le tocará a otra escuela, pensamos visitar la de ambos sexos». «Y puesto que de la escuela pública hablamos, nos permitimos diriqir al Ministerio de Instrucción la siquiente prequnta: Hace tres meses que el profesor propietario don losé Maestre, fundándose en impedimento físico, pidió la baja del Cuerpo, proponiendo para sustituirle a don Miquel Beltrán. iDónde para ese expe diente y por qué no se ha resuelto?» (EI Vinalapó, Elda, n° 7, 25 enero 1903., páq.3). Otro comentario del señor Tato sobre este mismo tema, aun que de interés por el resultado de la inspección y por los insólitos adjetivos que emplea el periodista, con los que evidencia sus pocas simpatías por la actividad docente diriqida por reli qiosas: «EI viernes Ileqó a Elda nuestro distinquido compañero en la prensa e ilustrado inspector de primera enseñanza, D. Federico Gómez. Por la tarde empezó la visita, la cual sequimos impar cialmente: ^ «Pública de niños. 120 en un local para 60. Imposibilidad de movimientos qimnásticos. Instrucción reqular». «Pública de niñas. También local pequeño. y lo que es peor, amenazando ruina. Enseñanza muy bien en qeneral. Labores bonitas y delicadas. Niñas de ocho años primorosas en iodo». «Escuela de don luan Vidal. Local reqular. Método bueno. Enseñanza a bastante altura». «Escuela de monjas. Local malo y antihigiénico. Papagayos en historia y doctrina y pavos reales en lo demás. Labores boni tas pero poco útiles. Por lo demás bien». «La de doña Salud Martínez, doña Josefa Martínez, doña Emilia luan y las dos que Ilaman laicas(?) sólo se vieron de refi lón. La nocturna, bien». «Nuestra opinión es que de las de niñas, la de mayor altura en todo es la de doña Emilia Navarro (sic), y de niños, la deJuan Vidal». «Y hasta nos atreveríamos a decir que el señor Gómez opina en un todo como nosotros, esto es un juicio imparcial». (EI Vina lapó, n°. 27, 14 junio 1903, pág.3). En este tiempo, la escuela pública de niños estaba en la calle de la Independencia, en local cuyo alquiler pagaba el Ayunta miento. Desde estas fechas las notas referidas a la enseñanza pública, sobre todo en las escuelas municipales de niños y niñas, son agobiantes, por cuanto coinciden todas ellas en la insuficien cia e insalubridad de los locales y el amontonamiento de alum nos en sus aulas, de las cuales damos algunos ejemplos por no alargar excesivamente este trabajo. En 1906 el maestro de la Escuela pública de Niños se quejaba de las malas condiciones hiqiénicas y de capacidad del local y de la necesidad de poner remedio a ello antes de que Ileguen «los calores», «pues el excusado está separado de la clase por una endeble puerta; no hay sitio para colocar gorras ni abrigos y no hay espacio para colocar a los niños que concurren a la escuela». EI Ayuntamiento aceptó como justa esta reclamación y que se contratara un nuevo local más espacioso, hiqiénico y ven tilado y que existieran junto al mismo habitaciones para el pro fesor, alquilándose dos locales de planta baja contiguos en la calleJardines, uno para escuela con capacidad para 120 niños y otro para el profesor. Dos años después, el 29 de sep tiembre de 1906, era visitada la escuela de niños por la Junta Local de Instruc ción Pública, comprobando la imposi bilidad de que en ella puedan asistir 140 niños, por lo que de acuerdo con los profesores de escuelas privadas se adop tó la medida de que a los «niños pobres se les daría enseñanza gratuita en las escuelas privadas por no ser suficiente la pública, y que los profesores don luan Vidal Vera y don Alfredo García habían ofrecido admitir en sus centros a los niños excedentes de la pública». Otros dos años después, el 2 de enero de 1910, la misma lunta Local informaba de que los locales de las escuelas no tenían condiciones higiénicas ni capacidad para los niños que asistían, por lo que se arrendó otro local más amplio en la calle de Antonio Maura. Estos locales permitían la separación en dos aulas, una para niños y otra para niñas, contando también con dos viviendas para maestros. En 1909 habia iniciado un expediente el Ayuntamiento de Elda para crear otras dos escuelas públicas, una elemental de niños y otra de párvulos, expediente que según informó don José Fran cos Rodríguez se encontraba archivado, con informe favorable del Ministerio, desde julio de 1909, por lo que se ordenó poner lo nuevamente en actividad. En la sesión de 24 de julio de 1910, a petición del concejal don José Payá Vidal -el famoso «Payá Lira» por su afición a este instrumento musical- acordó el Ayuntamiento que se estudia ra el medio de conseguir unas Escuelas Graduadas para la ciu dad, que contaba con unos 6.000 habitantes y sólo una escuela de niños y otra de niñas, iniciando el expediente ante el Minis terio de transformación de dichas escuelas en qraduadas. A pesar del interés de la Corporación, cuatro años después, el 24 de noviembre de 1914, se preguntaban en la sesión municipal de este día dónde estaba el expediente de creación de las escue las graduadas, sin hallar respuesta. Seis meses después se insistió en la petición, manifestando que por su población correspondía a Elda 4 secciones para niños y otras 4 para niñas y sólo había una para cada sexo con un censo escolar de 1.104 niños y un elevado índice de analfabetismo, acordándose reiterar la petición de graduación de las escuelas públicas en 4 de niños y 4 de niñas, lo que se consiguió al expe dirse en 13 de diciembre siguiente la Real Orden de creación de escuelas graduadas de 4 secciones de niños y otras 4 de niñas, y creando tres plazas de maestros y otras tantas de maes Curso de primer qrado del College Française, ubicado en la calle Pablo Guarinos (hoy Pedrito Rico. Curso 1930-31. (Archivo Alborada) Acto de colocatián de la primera piedra del colegio Emilio Gastelar, e19 de febrero de 1930. tras. En estas gestiones tuvieron un importante papel don loa quín Coronel Rico, alcalde de Elda, y don Salvador Canales, diputado por este distrito. Pero, a pesar de la Real Orden citada, la situación continuaba igual seis meses después, reclamando la Corporación eldense, el 4 de junio de 1916, el cumplimiento de dicha Real Orden, ofre ciéndose al Ministerio los solares adquiridos por el Ayunta miento para estas escuelas graduadas. Para desesperación de los miembros de la Corporación Muni cipal de Elda los años pasaban y la situación continuaba igual o peor, puesto que la población escolar aumentaba con el incre mento de los habitantes en general, debido a su próspera indus tria del calzado, que atraía a muchas familias de otras poblaciones, generalmente con niños en edad escolar, y la Real Orden continuaba inoperante todavía ocho años después, por lo que el Ayunta miento acordó aprobar un presupuesto extraordinario para la cons trucción del grupo Escolar el 21 de diciembre de 1926. Un año más tarde, en sesión de 25 de octubre de 1927, el Ayuntamiento acordó dejarse de peticiones a los organismos oficiales y construir por sí mismo, a sus expensas, el Grupo Esco lar para Niños y Niñas, aunque sí se solicitaba del Ministerio de Instrucción Pública, como ayuda, los planos, el presupuesto y la dirección técnica, así como que se le otorgaran las subven ciones que legalmente correspondieran. La Sociedad de Casas Baratas «EI Progreso» había ofrecido al Ayuntamiemto unos solares en los que iba a construir las casas de su barriada, para que se edificara allí el Grupo Esco lar, pero ya la Corporación Municipal había decidido hacer las cosas bien y por su cuenta y dar satisfacción a las necesidades que en este aspecto tenía la población, y considerando insufi cientes los terrenos ofrecidos en «EI Progreso», decidió el 31 de marzo de 1928 la compra de unos amplios solares entre las calles entonces Ilamadas Cervantes, Parque, Zorrilla y Pablo Igle sias, o sea las que actualmente for man el recinto del primitivo Grupo Escolar Padre Manjón, incluido el que posteriormente se construyó denominado Cardenal Cisneros y el amplio parque de recreo, encar gando sin más demora al arqui tecto alcoyano don Vicente Valls Gadea el proyecto del Grupo Esco lar.y sus correspondientes planos para su ejecución, con la impor tante modificación sobre el pro yecto inicial, de que el grupo escolar que al principio había de ser de cuatro secciones para niños y otras tantas para niñas tendría seis para cada sexo. Ya con la firme decisión de con seguir lo antes posible el anhelado Grupo Escolar, el Ayuntamiento solicitó de la Caja de Previsión Social del Reino de Valencia un préstamo de 350.000 pesetas para iniciar la construcción del grupo, solicitud que fue aprobada el 28 de septiembre de 1928, dando absoluta prioridad a acelerar los trámites para iniciar su construcción hasta el extremo de poder Ilegar al ansiado momen to de colocar la primera piedra de las obras, hecho que tuvo lugar el 9 de febrero de 1930, en solemne ceremonia presidida por el alcalde don Francisco Alonso Rico y el Obispo Dr. Iras torza, a la que asistió el pueblo entero. Seguidamente fue sacada a subasta la obra cuatro días des pués, el dia 13 del mismo mes, encontrando dificultades para la adjudicación, que tuvo lugar finalmente un año después, el 24 de febrero de 1931, adjudicándose ésta al constructor Tomás Gonzálvez Ramos por 296.000 pesetas y apurándose los pla zos para que pudiera ser inaugurada prontamente. La inauguración oficial tuvo lugar el dia 7 de septiembre de 1932, por la tarde, con presencia de D. Fernando Valera, director general de Agricultura, en representación del presidente de la República; don Vicente Sol, director general de Prisiones; don Miguel de Unamuno, que sería el mantenedor del acto literario conmemorativo del centenario del nacimiento de Castelar, en el Teatro de este nombre; el alcalde de Elda, don Aquilino Bañón, miembros de la Corporación y un gran qentío. EI cambio de régimen producido el 14 de abril de 1931 ocasionó el que todos cuantos alcaldes y concejales del ante rior Ayuntamiento de Elda, que habían dedicado su trabajo, esfuerzo y entusiasmo a la consecución de este magnífico Grupo Escolar, vieran la culminación de su obra -la inaugu ración-, desde la masa anónima del gentío o ni siquiera eso, pero suponemos que con la satisfacción del deber cumplido a pesar del desinterés oficial y las dificultades económicas del Ayuntamiento eldense ante obra de tal envergadura e importancia social y educativa. Antonia Maymón : a y liberta (E ld a, 1 929-1932) Ma DEL CARMEN AGULLO DÍAZ _ _ __ __ Y Ma PILAR MOLINA BENEYTO __ _ ___ I movimiento libertario se ha caracterizado, a lo largo de la historia, por preocuparse por educar integralmente a las personas, sea cual fuere su edad y, de manera prioritaria, las pertenecientes a la clase obrera. Este concepto de educación integral que tan bien reflejan autores como Bakunin comporta formar personas revolucionarias, críticas, capaces de transformar la sociedad, para lo que es imprescindible, por una parte, la indisoluble unión de la teoría y la práctica y, por otra, la de conseguir el cambio social al mismo tiempo que el intelectual. Así, Ferrer Guardia2 afirmaba que no se puede cambiar la sociedad si no se transforma la escue la, pero tampoco es posible la renovación radical del sistema edu cativo, si no se emprende el camino de la revolución social. Como consecuencia de estas premisas, el movimiento libertario, al mismo tiempo que crea las condiciones necesarias para el cambio social, se preocupa de poner las bases de una educa ción integral que la haga posible. Es por esta razón por la que los grupos anarquistas crean y sostienen escuelas racionalistas y Ate neos Libertarios, tejiendo una red educativa en la que, a lo largo de toda la vida, las personas pue den formarse en un ideario de libertad y solidaridad. AI mismo tiempo, las personas que se encuentran al frente de estos organismos educativos, con secuentes con su ideario, se com prometen no sólo con la tarea puramente pedagóqica sino que toda su vida se implica en la difu sión teórica y práctica del ideario anarquista. Este fuerte vínculo entre pedagoqía y vida hace que los educadores anarquistas sean fre cuentemente represaliados, ya que sufren las mismas persecuciones que el resto de sus compañeros de lucha. Un ejemplo significativo de este compromiso vital con la peda gogía racionalista y el pensamiento y prácticas libertarias, lo eneontramos en Elda, en el grupo de maestros que, sucesivamente, se encontraron al frente de la Escuela racionalista de la pobla ción: Eusebio Carbó (en los años 20), Fortunato Barthe, José Albe rola (director en 1924), Fontaura (años 30) y la maestra Antonia Maymón (1929-1932), cuya experiencia pedagógica y vital pasa mos a exponer. Recordemos que la Escuela Racionalista de Elda surgió en los primeros años de la Dictadura primorriverista, sostenida por los grupos libertarios relacionados con la Federación Local de la CNT-FAI. En ella, al igual que en el conjunto de escuelas que siguen las premisas de la Escuela Moderna fundada por Ferrer Guardia, se siguen los principios educativos de laicismo, meto dología activa, cueducación de sexos y clases sociales, prohi bición de premios y castigos, relación con el medio natural y social... destinados a formar personas críticas, libres y solidarias. A esta escuela eldense Ilegó, en la primavera de 1929, la maes tra Antonia Maymón, noticia que fue recogida por la revista Natu rismo, quien informa de su traslado en el siguiente suelto: «Nuestra colaboradora Antonia Maymón después de ocho días en esta ciudad (Barcelona), se ha trasladado a Elda, en donde fijará su residencia». E^cuela Mod¢ma de Elda 1.L7LS. ^L^tirL+s MItikCOL1S. 1 clyla . , . . vlr,f^ts, . . s.vlr^uo_ _ Y3odm•nfSlmD iYi,UCria! t1U iv1i5C11i1(IZit I, l;nr, c•fcrli:v rr.lcio:^;.lr. i, G^^/N%^//% Ĉ ^.`l ^ /rr L.1r/:i^VL./.^l !cs^ccc;óa tlc higieuc (eoas !as tl!as lxtn ISuCUela bn dCaterrado cn absolutO lox premios y lu.v caalitios. lil prcmio gcnero f}ccucntcmcutt; bajas pasioncs. 1^:1 ctstigo liwui Ila sicmpre. Lea das obawculiian rl^drscnvolvtmicmto dcl acr moral. Distribución del tiemr^o y MANANA.^LUr1rmL. J/,r., ^ Snl,rr.ruGr..^ra: 4:acrltur:r, Lscwra,,, Aritmraca. I^acriwra, Ltttura, .I.aolugia. Dlbujo, Pra Gm ^ ,.. liscritura, Iiietarict, Vocabularia. E^critura, Locturo, AraimCtica. Gau„u,+, Lmlura,Gram3tín. del trabajo 1.aLorc., Lacritor+, Isctuc:^, 19s1u. Luuor Ai9tmvtim,^ LscdGn dc,c, Gaogr., . tr^bajos Mnnua^ca. I^uiolu•e . u,^.,. 1aaees oacolurra, ICacursmuc.^= 1•;acriwra, Lcctura, Francís. Laborrr, unl^nir:,, nritn^,n+. rr,h^;t,a ^n.,n,^.^ra. Not®®.- Iocla clasc dunr. dc J6 „ y5 n iuotoa.-•Todox toe +lumnw obtoudrLr.la cuueronea dc las uaionatura:., dc cwilbru,idu^l cun n.^ro antcrior, a^n otra Jifercnu, ,lue la natenaion / pro(unJi,l.,d unrl., materi:..cyí,n I.i cI,d y cl deaarrnllo intcleclual.-I•.nlre cl.^sc Y.^L,ue I,alsr:r un i^c,fuc,inc,Ir.,c.,nao nr.rcu. Anuncio de la Escuela Moderna de Elda aparecido en la prensa local de la época. Alumnos de distintas edades de la Escuela del 5r. Durán, ubicada en la antigua sede de CNT. 1930-31 (Archivo Alborada). Elda supone un paso más en la larga trayectoria docente de Antonia Maymón Giménez5, tarea que siempre había desempeñado en escuelas racionalistas, desde que en 1899 había logrado la titulación de maestra de qrado elemental en la Escuela Normal Femenina de Zaragoza.b Primero fue la Escuela Moderna de Zaragoza, (1907), después Loqroño; más tarde la Escuela Horaciana de Sant Feliu de Guixols (1925-1928) y, por un corto período de tiem po, la Mutualidad Cultural y Cooperatiuista de Terrassa (1928-1929), trasladándose entonces a Elda, en donde, a falta de la documen tación pertinente que nos lo pueda confirmar, deducimos que permaneció durante tres años, entre abril del 1929 y mayo del 1932, ya que hasta el año 1932, cuando la encontremos en la Vila Joiosa, no tenemos constancia de su actividad en otra población. Los motivos de estos frecuentes cambios de domicilio y escue la son consecuencia de su compromiso personal y político. Vinculada al movimiento anarquista y al naturismo, se había implicado en los actos de protesta contra la gue rra de Marruecos, que conducirían a la huelga general que tuvo lugar en Zaragoza en 1911, por lo que fue detenida, procesada y condenada, teniendo que exiliarse a Francia, en donde desa rrolló una amplia tarea propagandista, intervi niendo en mítines y reuniones anarquistas. Anarquismo y naturismo la harían practicar un estilo de vida libre que sería denunciado y repri mido por la estrecha sociedad española de la época, lo que implicaría su traslado de una pobla ción a otra, tanto por su participación en actos de propaganda anarquista, como por su vida coti diana, libre de prejuicios. Antonia, una mujer menuda, morena, con vivos ojos qrises aunque padecía miopía,8 vertebró su vida en torno a cuatro grandes ejes: el naturismo, el anarquismo, las muje res y la pedagogía racionalista. Su indiso luble interrelación condicionará toda su conducta pública y privada convirtiéndo se en una propagandista eficaz de los dos primeros, manteniendo una original postura sobre la igualdad de los sexos y dedicán dose profesionalmente a formar personas libres. De su infatigable tarea como divulga dora de sus convicciones podemos recor dar su colaboración en numerosas publicaciones de carácter ácrata y/o naturista. Así, desde muy joven, publica artícu los en las revistas Salud y Fuerza, Humanidad Nueua, Acción Social Obrera, Tierra y Liber tad, Helios (órgano de la Sociedad Vegeta riana Naturista de Valencia), La Revista Blanca,Generación Consciente, (revista que se publicaba en Alcoi y tenía como finali dad la difusión del ideal neomalthusianista y la regeneración físi ca y espiritual de la clase obrera)9, Naturismo, Ética, Estudios, La Verdad (La Vila Joiosa), Inquietudes, Tiempos Nueuos y Solidari dad Obrera de Alcoi. Es inqente la cantidad de artículos que duran te más de 30 años escribirá difundiendo sus ideales de una sociedad más respetuosa con el orden natural, en la que el higienismo pre sidiera los actos humanos y en la que el equilibrio entre naturaleza y sociedad fuera posible. Presupuestos suyos como la defensa de la eugenesia pueden resultarnos hoy Ilamativos, pero hay que ubi carlos dentro de un contexto mundial de preocupación por la mejora de la humanidad, también des de una perspectiva pura mente fisiológica. Si analizamos sus escritos pedagógicos, se nos hace presen te a una mujer con una gran formación, ya que sus artículos y prácticas educativas resumen y condensan las aportaciones de peda Francísco Ferrer y Guardia, impulsorde la Escuela Moderna. gogos tan significativos y diversos como Ferrer Guardia (en el que coincide en la defensa del racionalismo, de la libertad..), Pestalozzi (el amor al niño), Decroly y Montessori (su preocupación por la «anormalidad», sus causas y modo de educar a los «anormales»°) Dewey (la vitalidad como norma en la escuela, vivir para aprender)... Por otra parte, muchas de sus afirmaciones coincidi rán y en cierta medida serán precursoras de las difun didas años más tarde por ilustres pedagogos que se sitúan en las corrientes antiautoritarias como A. Neill, en Sumerhill (educar el corazón y la cabe za, es decir los sentimientos y el intelecto, la liber tad como norma y finalidad educativa) o críticas, de la que sería un buen representante Lorenzo Milani y su Escuela de Barbiana ( el poder del lenguaje, el domi nio de la palabra...) Consecuente con el naturismo, la escuela que desea pre tende formar personas saludables física e intelectualmente, por lo que piensa que la educación física es básica para la moral e intelectual. De ahí su defensa teórica y práctica de las excursiones, de las actividades gimnásticas, de la escuela al aire libre... Alumnos sanos serán los que podrán utilizar la razón como instrumento de análisis de la realidad, desterran do mitos y prejuicios. Serán personas racionales y críticas, capaces de cuestionarse la realidad y ser, por encima de todo, libres. Libertad que se alcanzará potenciando, dentro de la escuela, el contraste de pareceres, la libre discusión, la igualdad entre alumnos, el asambleismo en la toma de decisiones. La escuela se vuelve, así, vital, porque en ella se practica la liber tad, algo que no puede aprenderse sino es en la realidad coti diana de la misma. Personas saludables física, mental y moralmente, que lucha rán independientemente del sexo al que pertenezcan, por una sociedad libre e igualitaria. La educación de las mujeres ocu pará parte de su producción literaria, manteniendo una posi ción que ella considera no feminista ya que, oponiéndose al feminismo burgués predominante en los años 20, Antonia defien de que las mujeres están oprimidas por la falta de indepen dencia económica, que las hace aceptar trabajos no acordes con su naturaleza femenina, abocándolas a matrimonios en los que el amor no es la base. Para ella, la función esencial de la mujer es la maternidad y la educación de los hijos, la madre es la mejor educadora, porque está destinada a ello por su propia constitución. La liberación de las mujeres pasará por una educación feme nina que les permita ejercer su función de madres de manera ópti ma, que les permita ser independientes económicamente para poder decidir de manera libre y basándose en el amor, las rela ciones sentimentales que deseen, y que, junto con los hombres, puedan participar, en pie de igualdad, en la construcción de una nueva sociedad más libre, en la que las relaciones entre ambos estén fundamentadas en la igualdad de derechos y debe res, pero sin perder cada uno de ellos las características pro pias de su sexo. Paradojas del destino, Antonia Maymón nunca fue madre pero si adoptó a un chico y una chica, Manolo y Vio leta, con los que Ilevó a la práctica sus teorías pedaqógicas aun que parece ser que no con el éxito deseado. Naturista, libertaria, pedagoga racionalista, la estancia de Antonia Maymón en Elda está todavía pendiente de un estu dio en profundidad que pueda acercarnos a sus prácticas peda gógicas, propagandistas y vitales en esta población. Qué hizo, por qué abandonó Elda para diriqirse a la Vila..., laqunas en el conocimiento de la historia de la educación y del anarquismo del País Valenciá que están pidiendo una atención inmediata cuando aún quedan personas que pueden dar testimonio de aque Ilos años. Os invitamos a que prestéis vuestra colaboración para poder completar la trayectoria vital de una pedagoga y mujer avanzada a su época, una persona que creía en la utopía y que por hacerla posible luchó y padeció toda la represión del franquismo hasta que, sola y olvidada, murió en Murcia en 1959. Notas: 1. BAKUNIN, Mijail. La enseñanza integral. (1869). Introducción y traducción de Claudio Lozano. Pequeña Biblioteca Calamvs Scriptoris. Barcelona 1979. 2. FERRER GUARDIA, Francisco. La Escuela Moderna. Ed. Zero. Madrid. 1976. 3. LÁZARO LORENTE, Luis Miguel. Las escuelas racionalistas en el País Valenciano (1906-1931). Departamento de Educación comparada e Historia de la Educación. Valencia. 1992. pp. 166-168. 4. Nafurismo. N° 109, abril 1929. Barcelona 5. En diferentes textos e incluso en documentos oficiales aparece como Maimón/Maymón o Giménez/limeno/ Gimeno. Había nacido en Madrid en 1881. 6. Archivo General de la Administración. Alcalá de Henares. Edu cación. Legajo 7921. Exp 50. Ferrer Guardia no consideraba imprescindible la titulación oficial de maestro conseguida en las Escuelas Normales para ejercer en las escuelas raciona listas, lo que produjo algunos conflictos cuando se intentaba conseguir subvenciones de organismos oficiales, como el Ayuntamiento de Valencia, pero Antonia Maymón sí que lo tenía. 7. En 1932 la encontramos ejerciendo en la Escuela Raciona lista de La Vila loiosa, sostenida por el Sindicato de Trabajadores de la CNT de la población, de ahí se trasladaría en 1936 a Beniaján en donde trabaja en la escuela racionalista creada por el Sindicato Obrero El Progreso.En plena guerra, en octubre de 1936 se traslada a Castelló de la Plana en donde el Ateneo Racionalista deCastelló había creado una Escuela Racionalista. Ver NAVARRO NAVARRO, F. lavier. La cultura libertaria en el País Valenciano (1931-1939): sociabi lidad y prácticas culturales. Valéncia. Universitat de Valéncia. 2000. Tesis doctoral. 8. Estos datos están extraídos de su ficha policial elaborada por la policía francesa, con fecha de 15 de noviembre de 1911. 9. En NAVARRO NAVARRO, Franciscolavier, El paraíso de la razón. La reuista Estudios (1928-1937) y el mundo cultural anarquista. Edicions Alfons el Magnánim. Valéncia 1997. pp. 31-36. 10. Utilizamos la terminología empleada por Antonia Maymón y que corresponde a la utilizada en la pedagogía de la época aunque sería más correcto hablar de personas con discapacidades físicas o psíquicas. 11. La utopía vital y pedagógica de Antonia Maymón finalizó tras la Guerra Civil.luzgada y condenada a muerte, pudo salir en libertad en 1944, aunque volvió a ser detenida en 1946. Sub siste dando clases particulares en Espinardo (Murcia) y falle ce en el Hospital provincial de Murcia el 20 de diciembre de 1959. Ver ITURBE, Lola. La mujer en la Iucha social. Editores Mexicanos Unidos. S.A. Mexico. 1974. Página 83 Breve ^pC ^ ^ ^ ^ sobre la situación escolar en Elda en el ^^ , ^^ ^ ^ .^ ^ . GERMÁN óERNABEU SORIA diferentes planes y reformas educativas promulgadas, han inFl uido sobre ella. Para hacer este pequeño análisis, sobre la situación escolar en Elda a lo largo del último siglo, me parece interesante realizarlo, primero desde la situación socio-laboral existente y, en segundo lugar, desde la incidencia que los , i nos remontamos a prin cipio de siglo, podemos considerarque la situa ción escolar en Elda no I sólo era deficiente, sino que se podría calificar de crítica. Un importante incremento de niños en edad escolar viene produciéndose debi do, fundamentalmente, a la inmigración de agricultores y jornaleros del campo, que cada vez más fijan sus miradas en la atractiva, toda vía, villa de Elda. Posiblemente entre estos atractivos destacan los numerosos servicios de que la población dispone, incluso de alumbrado eléctrico (1900) y teléfono (1905), y especialmente de una floreciente industria zapatera (fábrica de Vera Hnos. yJuan, Gran des Fábricas, que así se Ilamaban, de D. Rafael Romero o de D.José Tobar, fábrica de cajas de cartón de D. Francisco Santos, fábrica de hormas de Isidro Aguado e Hijo, etc. etc.), y en consecuencia, con grandes necesidades de mano de obra. Sin embargo, y a pesar de esto, las posibilidades económicas de las arcas municipales para crear escuelas que pudieran atenderles eran más bien escasas o prácticamente nulas. La población disponía únicamente de dos escuelas públicas, una de niños y otra de niñas, donde se hacinaban tanto los unos como las otras, además de algunas privadas. De entre estas des tacaba sobre las demás, por su importancia, por el número de niñas que atendían y, en definitiva, por las características del cen tro, la «Escuela de las Monjas», donde asistían, de modo mayoritario, las hijas de las familias mejor situadas económicamente. Se puede calcular que la población escolar en aquellos tiempos era aproximadamente de unos 1.000 niños y niñas. Mientras que las escuelas públicas escasamente podían acoger a un tercio de ellos, sumando lo atendido por las privadas apenas Ilegaban a libros de texto antiguos, entre ellos el conocido Corazón, de Edmundo de Amicis, muy utilizado en las escuelas eldenses. la mitad de dicha población, por lo que resulta que la otra mitad de niños no podían asistir a la escuela. Algunas iniciativas privadas ayudaron parcialmente a paliar el problema. Ese fue el caso de los señores Giménez y Peláez, propietarios de una fábrica de cal zado, quienes crearon y subvencionaron una escuela nocturna donde se impartía enseñanza gratuita a más de 200 niños y adul tos. Pero, aún así, estas iniciativas resultaban insuficientes, tanto que el propio alcalde de la localidad Ilegó a manifestar que «dentro de unos pocos años esta población estará compuesta sólo de anal fabetos». EI Ayuntamiento, con el fin de poder solucionar el problema, solicitó la creación de dos escuelas más, pero, y a pesar de que el expediente fue instruido en 1909, no es hasta mediados de los años veinte que éste se encuentra acabado. EI 21 de diciem bre de 1926 se aprueba el presupuesto y después de un sinfín de acuerdos y desacuerdos, de propósitos y despropósitos, de recursos y contrarrecursos, quedan inauguradas el 7 de sep tiembre de 1932 las Escuelas Graduadas de Emilio Castelar, las «Escuelas Nuevas» para los eldenses, un hermoso grupo esco lar que vino a remediar el trascendental problema de la edu cación en Elda. Este problema de carencias de escuelas no era único de nuestra pobla ción. La situación en el ámbito nacio nal no distaba mucho de la que aquí nos encontramos. En 1901 se crea el Ministerio de Ins trucción Pública y Bellas Artes. Se reor ganiza la enseñanza y es uno de sus ministros, Romanones, quien median te el Plan que Ileva su nombre, establece entre otras importantes medidas: • Que sea el Estado el que pague el sueldo a los maestros. • Divide la Enseñanza Primaria en Pár vulos, Elemental y Superior. • Dispone la obliqatoriedad de la Ense ñanza Primaria Elemental y Supe rior para todos los españoles. • Aumenta en tres años la duración de la escolaridad obl igatoria (de 6 a 12 años). • Se regulan los exámenes de ingre so al Bachillerato. • Se crea el Bachillerato de seis años. Biótruteca de Idcas y EstudíoS Contem¢oraneoa ,11^trcefiru ► lioiuiul^^ ► Sin embargo, el tema de construcciones escolares apenas tuvo incidencia y es con la implantación de la Segunda República cuan do por primera vez se realiza un estudio de necesidades, plante ando, seguidamente, las medidas necesarias con el fin de darle solución. En 1931, el número de escuelas públicas en el ámbito nacional era de 32.680 y se calculaba un déficit de 27.151, cerca del 50%, según informes de la época, lo que suponía que más de un millón de niños españoles estaban sin escolarizar. Se ha Ilegado a decir que a principios de 1931 el porcentaje de analfabetismo se encontraba situado entre el 30 y el 40%. AI mismo tiempo, la carencia de maestros debidamente formados y dignamente paqa dos era una realidad en la época, y es por ello que, formado el Gobierno provisional y siendo nombrado minis tro de Instrucción Pública y Bellas Artes Marce lino Domingo, comienzan a aparecer los primeros decretos en materia educativa. La carencia de escuelas fue abordada mediante un plan quinquenal de cons trucciones, que cubriría las necesidades existentes hasta el momento. En principio sería de 5.000 escuelas por año, excepto el primero que serían 7.000. Y en cuanto a la preparación profesional de los maestros, se establecieron cursos de selección, con la obli qatoriedad de que los candidatos pasarían tres meses recibiendo una orientación profe sional y una preparación pedagógica. Qui zás es la primera vez que un plan educativo considera la preparación del maestro como i AI año siguiente, se produce una esperanza dora vuelta a sus orígenes al ganar las eleccio nes el Frente Popular que, entre otras cuestiones importantes, retoma el aparcado plan quinquenal de construcciones escolares. Sin embargo, no hubo tiempo para desarro Ilarlo, y por ello, el número de escuelas públicas eldense se mantuvo invariable hasta julio de 1936. En julio de 1936, España y nuestra ciudad, como parte de la misma, comenzaron a sufrir la pesadilla más grande que un país puede padecer, la Ilamada Guerra Civil. La necedad de Anagrama del Ateneo Artístico de Modelista y Patronistas, nombre oficial de la Escuela de Artes y Oficios. ® uno de los aspectos fundamentales de la educación. Los distintos Ayuntamientos repu blicanos de nuestra ciudad, a pesar del escaso tiempo de que dispusieron, inten taron paliarel problema educativoexis tente mediante nuevas creaciones. Teniendo en cuenta que con las «Escuelas Nuevas», la cual contaba con 12 sec ciones graduadas, 6 para niños y 6 para niñas, y con una capacidad para 600 escolares, no era suficiente, otras escuelas o grupos escolares fueron inaugu rados. Se puso en funcionamiento el grupo escolar del Barrio Estación de Monóvar (curso 1931-32) y el del Monte Calvario (curso 1932-33). Si bien con esto tampoco se solucionaba el pro blema, al menos se reducía. Con el triunfo en las elecciones en 1933 de la coalición de los radicales de Lerroux y los de la CEDA de Gil Robles (1933-35), se inició un importante des censo de las construcciones escolares y un debilitamiento de la reforma pedagóqica. Sin embargo, en Elda se produce una situación que, al menos parcialmente, viene a miti gar el problema. La Sociedad de construcción de viviendas «EI Progreso», que desde 1921 venía trabajando en el desarrollo urba nístico de la ciudad, acordó arrendar temporalmente al Ayuntamiento dos de estas casas para escuelas de Primera Enseñanza (en 1934 fueron compradas por el Ayuntamiento). Posteriormente, serían denominadas «Escuelas 18 de Julio» en referencia a la calle en que estaban situadas. También se compraron a la Sociedad «La Fraternidad» dos locales unidos por un patio que pasarían a ser las «Escuelas de La Fraternidad», cerrando con esto, por muchos años, el número de escuelas públicas que Elda dispone. unos y la insensatez de otros Ilevó a la situación más dramática que quizás pade cieron los españoles a lo largo del siglo. En estos años de guerra, con el fin MINISTERIO DE EDDC^CION 1^^CIONAL DIRHCCION GENERAL DE ENSEAANZA PRIMARIA Cartilla de escolaridad del Colegio-Academia Cuenca. 1949. dar sentido de normalidad y organizar las actividade ŝ escolares en la ciudad, se constituyeron varias asociaciones. En 1937 se crea el Sindicato Comarcal de Enseñanza, afecto a la CNT, el Ins tituto Obrero, regido por la Federación Española de Trabajado res de la Enseñanza, el Ateneo Libertario, mantenido con fondos de la FAI, y la Escuela de Preparación Cultural. También se pone en funcionamiento la Escuela de Artes y Oficios, en la que se enseñaban todas las especialidades propias del calzado (zapa teros, aparadoras, cortadores, patronistas y modelistas). Debido a su situación geográfica privilegiada, situada en la retaguardia de la guerra, la ciudad vio incrementada su población escolar con los niños traídos de diferentes zonas y que fueron distribuidos en las escuelas de que se disponía Pasada, finalmente, la locura de la guerra, la situación social y educativa comenzó a resurgir, siempre mediante la dirección y el control de la España nacional. Se produce un cambio sustancial en la enseñanza. Básicamente, desde que termina la guerra y hasta 1945, católicos y falangistas se disputan el control de la educación. Desde 1938 y prácticamente hasta la muerte de Fran co en 1975, la educación estará en manos de los católicos, los cuales reestablecen la enseñanza confesional, que años atrás había sido abolida por la República, prohíben la coeducación, establecen el castellano como único idioma oficial, potencian la censura de los libros y depuran el personal docente. Mientras, la industria del calzado, poco a poco, se va repo niendo, volviendo las empresas eldenses a la «normalidad». Son años de empuje industrial y, en consecuencia, se va incre mentando la mano de obra. No debemos olvidar que la fabri cación del calzado sigue siendo fundamentalmente artesanal, y ello contribuye al paulatino asentamiento de gran número de inmigrantes que, abandonando en muchos casos las depaupe radas zonas rurales, acuden al amparo de una floreciente indus tria y menos sacrificada vida obrera. La población eldense en el año 1943 ya supera los 20.000 habitantes. Fruto de este incremento de población es el desarrollo de la construcción, volviendo a su actividad, paralizadas por causa de la guerra, las socieda des de la «Fraternidad» y el «Progreso», que continuaron con la construcción de «las casas baratas», como así eran denomi nadas. En cuanto a la política educativa nacional y siendo minis tro de Educación Ibáñez Martín, se promulga la Ley sobre Ense ñanza Primaria (1945), en la que se recoge los principios del nacional-catolicismo y establece como pilares básicos la reli qión y la familia. Regula tres tipos de escuelas: públicas nacio nales, privadas, y de la Iglesia. Divide la Enseñanza Primaria en dos etapas: General desde los 6 a los 10 años, a partir e ella se podrá ingresar al Bachillerato como paso previo para la Uni versidad, y Especial, de 10 a 12 años, que tiene como fin la obten ción de un certificado (Certificado de Estudios Primarios) que le permita ingresar en el mercado de trabajo. Mantiene la Formación Profesional, establecida en 1928 por Primo de Rivera, hasta 1949, mediante las escuelas de artesanos y las escuelas de enseñanzas industriales. En 1951 se produce, en el ámbito nacional, una situación de bastante trascendencia para la enseñanza en general. Se nom bra como ministro de Educación Nacional a Joaquín Ruiz Gimé nez, quien, mediante nuevos planes de estudio, tanto para la Primaria como la Secundaria, inició un proceso de moderniza ción educativa. Por primera vez en la historia de la Enseñanza Pri maria se incluyen cuestionarios para las diferentes asiqnaturas (1953). La enseñanza Secundaria (Enseñanza Media) queda dividida en seis cursos. Los cuatro primeros Ilamados el Bachi Ilerato Elemental, el cual tiene carácter común, mientras que los dos siguientes, que forman el Bachillerato Superior, están divi didos en dos especialidades, Ciencias y Letras. La superación de cualquiera de los bachilleratos se consigue, además de apro bando los cursos, superando una prueba de carácter nacional Ilamada Reválida. Los años 50 son años de importante desarrollo urbanístico, económico e industrial. En febrero de 1952 comienza la cons trucción de las dos aulas de Ramón Nocedal, una para niños y otra para niñas, y en 1953, el Ayuntamiento de Elda solicita a las autoridades educativas la creación de un Centro de Enseñanza Media Profesional que impartiera las especialidades de Agríco la e Industrial, de forma que pudiera atender a los jóvenes de Elda y otros pueblos de los partidos judicia les de Monóvar, Novelda y Villena. Aunque inicialmente la propuesta no fue atendida, años después daría lugar a la Escuela de For mación Profesional. Sin embargo, tanto duran te la década de los 50 como de los 60 la construcción escolar estuvo totalmente para lizada, a excepción de lo indicado anterior mente. A pesar del notable incremento de población, y en consecuencia del aumento de escolares (la población a final de 1960 ya superaba los 28.000 habitantes), el plan de construcciones escolares es absolutamente nulo hasta octubre de 1962, en que entra en fun cionamiento el nuevo centro escolar «Virgen de la Salud», edificado sobre los antiguos terrenos del «Manicomio». Debido a la política educativa de cons trucciones aplicada en estos años, se pro duce por iniciativa privada la aparición de numerosos colegios «de paqo», que vienen que suplir las carencias de plazas escolares ofertadas por los públicos. Son centros, gene ralmente pequeños, situados en muchos casos en habitaciones «arregladas» para las clases, dentro de las propias viviendas o en locales o viviendas habilitadas para tal fin. Los docentes, generalmente personas de un determinado nivel cultural, no siempre son maestros titulados, los cuales, con ayuda y colaboración de otros miembros de la fami lia (padre, madre, hermanos, hijos, etc.), imparten las lecciones a los escolares. En lo referente al número de aulas, nos encontra mos fundamentalmente con unitarias, donde se impartía clase a alumnos de todas las eda des, o con centros de dos unidades o clases, divididas en de mayores y de pequeños. Por el tipo de enseñanza que impartí an, eran unos colegios donde durante el día se atendía a los más pequeños y por la noche se impartían clases para los jóvenes obreros de las empresas zapateras. Allí asistían estos, con el fin de adquirir los conocimientos míni Dos fotos típicas escolares del niño Lorenzo Capó en 1949 y 1954. CUKS^ 1954 • 55 mos necesarios para poder Ilevar una vida social y laboral ade cuada (conocimientos básicos tales como leer, escribir y las «cuatro operaciones»), o de preparación para la obtención del Certificado de Estudios Primarios. Había otros que exclusivamente funcionaban por la noche. En ellos, el maestro durante el día desempeñaba generalmente otro trabajo y únicamente durante las horas nocturnas impartía clases (básicamente lectura, escritura y cálculo) a los jóvenes de la ciudad o sus alrededores. Finalmente, existían las academias, lugares donde los alumnos se preparaban para el Bachillerato (ingreso) o donde incluso se impartían los distintos cursos del mismo. Poste riormente, los alumnos que habían sido preparados durante todo el curso escolar debían asistir a los Institutos (situados en poblaciones como Alicante o Alcoy) para realizar en ellos los exámenes correspondientes. También funcionaron las academias de contabilidad y, más tarde, de mecanografía, donde los jóvenes aprendían los conocimientos necesarios para entrar a trabajar en la oficina de las diferentes empresas. Muchos coleqios fueron polivalentes, impar tían clases de Preescolar, Primaria, Bachiller, Con tabilidad y Mecanoqrafía. Debo insistir en que, aunque discutible y dis cutido el papel realizado por alqunos de los cole qios privados, no podemos olvidar la importante labor que realizaron en la escolarización de los niños y jóvenes. Se puede afirmar, creo que sin equi vocarme, que una considerable parte de la pobla ción adulta actual de nuestra ciudad estudió en estos coleqios. A partir del «I Certamen Exposición de la Indus tria del Calzado» realizado en septiembre de 1959, parece que comienza el despeque de la industria zapatera, con importantes repercusiones en nuestra ciudad. EI éxito obtenido fue de tanta importancia que hubo de constituirse el Patronato de la Feria del Calzado, que se encarqará a partir de ese momento de la convocatoria de las distintas ediciones de la Feria del Calzado, primero nacional y después internacional. EI edificio de la conocida academia de D. Eliso poco antes y durante el derribo, para dar lugar al edificio de viviendas del mismo nombre. 1999. Mientras el número de centros de enseñanza pública se mantiene inalterable, los de la privada siquen aumentando. Un hecho destacable fue la implantación como libro de texto de las Enciclopedias, compendio de los saberes necesarios que todo escolar debe recibir, orqanizados por materias. Como apoyo a la enseñanza vienen a sustituir, en muchos casos, a aquellos otros de Mi primerlibro, Iniciaciones, Lecturas, Rayas o Lecciones de cosas, entre otros. No obstante, y a pesar de ello, la escritura, la lectura y el cálculo siquen siendo los conceptos fundamentales de aprendizaje. Como hemos dicho antes, en 1962 se crea el sequndo centro público, por su tamaño, de Elda. Es el coleqio Virqen de la Salud. Poco tiempo después, entran en funcionamiento dos nuevos centros privados de qran importancia para la ciudad. Son cen tros de qran tamaño que disponen, además de las clases, de un elevado número de servicios complementarios (biblioteca, labo ratorio, sala de pretecnoloqía, sala de usos múltiples, etc.). Los dos están reqidos por sendas órdenes reliqiosas. EI primero, Ila- mado de Sta. Teresa , corresponde a la Orden de las Hermanas Carmelitas y, más que de un centro nuevo, se trata del traslado y ampliación del existente en la calle San Roque. EI sequndo es la Saqrada Familia, que comienza a funcionar en abril de 1964 como centro de Secundaria. Un hecho curioso se produce en la sociedad de la época, que comienza a dividirse en dos: los que mandan sus hijos a las tradicionales escuelas públicas y los que Ilevan a los suyos a la cada vez más floreciente escuela privada. EI qrado de mani queísmo es tal que, en alqún caso, se Ileqa a asociar escuela nacional o pública con lo retróqrado, arcaico o neqativo, mien tras que escuela privada se asocia a lo moderno, lo nuevo o lo positivo. «Todo padre que se precie, debe enviar a su hijo a una escuela privada», podría ser una máxima de ese tiempo, y duran te muchos años la sociedad o, al menos una parte de la misma, se comportó así. Quizás, en el fondo de este sentir se encontraba un cierto rechazo al sistema político que sequía diriqiendo y controlando la enseñanza pública, de manera que la pública se asociaba involuntaria o voluntariamente al «Réqimen», mientras que la pri vada se movía, al menos aparentemente, por «otros cauces». Fueron importantes las escuelas privadas de Da. Adela, de D. Paco Verdú, de D. Jesús, de D. Pablo, D. Federico, o de D. Fran cisco Cuenca, entre otras, o las academias de D. Eliso, y D. Emi lio Maestre. Posteriormente funcionarían otras muchas, tales como la de D. Abilio, de Da.lulita, de D. Alberto,... o academias como la del Cristo del Buen Suceso (antiqua de D. Eliso), la de Godo, la de Michel (Lloret) y la academia Vera (fusionadas las de D. Pablo y D. Emilio), En 1969, se construye otro centro público de qran necesidad para una parte de la población eldense. Se trata del C.P. EI Será fico, que vino a atender a los niños y niñas que vivían en la zona de la Huerta Nueva y adyacentes, evitando qrandes desplazamientos de escolares de una parte a otra de la ciudad. En 1970 y utilizando parte del patio del C.P. Padre Manjón, se construye un nuevo pabellón con 28 unidades, que recibió el nombre de C.P. Cardenal Cisneros, y a partir de este momento el doble qrupo escolar (Manjón-Cisneros) se convirtió en el coleqio más emble mático de la ciudad, tanto por ser el más qrande en número de plazas educativas como por tener la mejor situación, ya que se encuentra en el mismo centro de la ciudad. La población esco lar atendida superaba los 2.000 alumnos, además de otros ser vicios que prestaba. También comienzan a funcionar el Instituto de Secundaria Monastil que, junto con el Azorín (que ade más de Elda y Petrel atendía a los jóvenes de la comarca) y los dos de Formación Profesional, La Torreta y La Melva, cubrían las necesidades educa tivas de nuestros estudiantes de Bachillerato y FP. Esta reforma se implanta progresivamente durante un período de 10 años y no es sustituida hasta la década de los 90 con la implantación de la LOGSE. Con la aplicación de la Ley de170 y la creación de los numerosos centros educativos, la enseñanza pública adquiere gran preponderancia, de manera que poco a poco va absorbiendo la casi totalidad de la población escolar eldense. Los nuevos cen tros de EGB presentan una infraestructura que nada tiene que ver con lo que existía anteriormente, de mane ra que sólo unos pocos centros privados quedan funcionando como es el caso de Santa Teresa, Sagra da Familia, Colegio Academia Vera y el Colegio Llo Aunque la creación del centro, inicialmente, fue recibida con entusiasmo por la sociedad eldense, posteriormente se Ilegó a la conclusión de que la excesiva masificación de alumnos y la utili zación de todas las dependencias disponibles del colegio como aulas, impedía la existencia de otros servicios fundamentales y esto per judicaba notablemente la enseñanza de los escolares. Con el fin de mejorar su situación, fueron suprimidas algunos años después un número importante de unidades las cuales quedaron transfor madas en determinados servicios educativos. Con la Ley de Educación de 1970, se produce una reforma total del sistema educativo: • Se extiende la obligatoriedad de la enseñanza, de forma gra tuita, para todos los niños de 6 a 14 años. • Se reforman los planes de estudio • Se aplica la flexibilidad educativa • Se produce una importante apertura pedagógica • Se plantea, cuestiona y analiza, la calidad de la enseñanza • Se comienza a plantear las necesidades de formación del pro fesorado. • Continúa de manera intensiva la construcción de centros esco lares. De esta etapa tenemos, en el ámbito de Elda, la creación de varios colegios de Enseñanza General Básica (EGB). En general, son centros de módulo dos, es decir, disponen de dos unida des por curso, desde Preescolar de 4 años hasta 8°. de EGB (20 unidades en total), más los servicios educativos complementa rios. EI C.P. Juan Rico y Amat, el C.P. Sempere Guarinos, el C.P. Santo Negro, el C.P. Miguel Hernández (para Elda y Petrel), el C.P. Emilio Castelar (que sufriría diversas transformaciones hasta su posterior desaparición), el C.P. Pintor Sorolla y el C.P. Anto nio Machado, además de varios centros dedicados exclusivamente a la Enseñanza de Preescolar. Poco después se ponen en servi cio el C.P. Nuevo Almafrá y el Centro de Educación Especial Miguel de Cervantes (de ámbito comarcal). ret (de nuestro compañero, trágicamente fallecido, Miguel Lloret). Alqún tiempo después, estos dos últimos acabarían cerrando. Qué lejos queda aquella frase pronunciada a principios de siglo por el propio alcalde de la ciudad. Hoy en Elda, dispone mos de un importante conjunto de centros educativos, públi cos y privados, de Infantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional, repartidos por toda la ciudad, que atien den adecuadamente a la totalidad de la población escolar, donde excelentes equipos pedagógicos imparten toda clase de mate rias, de donde salen unos jóvenes que, o pasan al mundo del trabajo técnicamente preparados, o acceden a la Universidad. Des pués de un siglo de luces y sombras, podemos afirmar que la situación escolar en Elda puede ser comparable a la de las mejo res ciudades españolas. No obstante, el camino sigue, no acaba aquí. Detectamos muchas necesidades y mejoras en el terreno escolar y educativo que deben ser abordadas con entusiasmo y eficacia. Y, dado que la educación, como dijo alguien, es el motor del desarrollo, esperamos que la sociedad sepa adaptarse en el futuro, más allá de convencionalismos, a aquellos cambios educativos que, en el futuro inmediato, irá necesitan do nuestra querida ciudad de Elda. Bibliografia: NAVARRO PASTOR, A. (1981). Historia de Elda. Tres tomos. Ser vicio de publicaciones de la Caja de Ahorros Provincial. Ali cante. BAZÁN LÓPEZ,1. L. (1989). Historia del Cole^io Padre Manjón. Club de Campo. Elda. ESTEBAN, L. y otros. (1984). Historia de la enseñanza y de la escue la. Tirant lo Blanc. Valencia. TAMAMES, R. (1973). La república. La era de Franco. Alianza Edito rial Alfaguara. Madrid. EMMA CASTELNUOVO. (1984). Historia de la Educación matemática en España. SMPM. EI coleqio, entonces denominado Emilio Castelar, al poco de su entrada en funcionamiento, seqún el proyecto del arquitecto alcoyano Vicente Valls y Gadea. UN COLEGIO EN EL CENTRO URBANO: E l caso d el Colegio P úb l ic o raur^ iviair^uu RAFAEL CARCELÉN GARCÍA _ _ _ _ _...... _... Nada avala más la presencia del C. P. Padre Manjón en la vida cultural y educativa de Elda que sus 71 años de historia; 71 años de servicio a la formación de tantas y tantas promociones que han crecido entre sus aulas e instalaciones. Efectuar, aunque sea someramente, un recorrido por esta trayectoria ayudará a comprender mejor su papel y las señas de identidad que aún hoy configuran sus caracteristicas educativas y culturales. ^ mi modo de ver, se distinquen dos etapas en estos 71 años: la primera abarcaría desde la crea ción del coleqio hasta el año 1970, y la sequnda, desde entonces hasta la actualidad. Y es que hasta la construcción de nuevos centros escolares en la década de los 70, motivada por el enorme incremento demoqráfico, el Padre Manjón es uno de los pocos coleqios públicos existentes, y en torno al cual qira casi toda la actividad educativa y qran parte de la actividad cultural de la ciudad. Los cambios socio-económicos que en esta época se producen, la construcción del qrupo escolar Cardenal Cisneros inteqrado en el C. P. Padre Manjón, la constitución de la APA en el Centro o la implantación de la Ley General de Educación de 1970 serán factores también decisivos para comprender el rumbo educativo sequido desde entonces. EI coleqio se inauquró el 7 de septiembre de 1932, el mismo día que la plaza de Castelar, y contó con la presencia de Miquel de Unamuno. Su creación supuso la culminación de múltiples qes tiones y esfuerzos tendentes a dotar a la ciudad de Elda de un Grupo Escolar que pudiese acoqer y formar a una población infan til creciente, sin escolarizar en más de un 50%, y hasta entonces ubicada en su mayoría de forma dispersa por diferentes locales sin condiciones que el Ayuntamiento iba disponiendo seqún las nece sidades. Por esta época sólo existían dos escuelas públicas: el cole qio de las Hermanas Carmelitas y una escuela nocturna que los fabricantes mantenían por su cuenta para los hijos de sus obre ros. Considerando que durante el primer tercio del siqlo XX la población eldense se triplicó, pasando de los alqo más de 6.000 habitantes de 1900 a los 18.000 de 1935, se comprenderá mejor la maqnitud del problema educativo planteado y la necesidad de ir dando soluciones más allá de la precariedad existente. Proyectado por el arquitecto alcoyano Vicente Valls Gadea, el edificio sobresalía entonces por sus extraordinarias dimensio nes exteriores y su amplitud y luminosidad en el interior. Alqunos días después de inauqurado, se iniciaba el curso con 12 unidades de 1° a 6° Grado (6 aulas de niñas y otras 6 de niños, separadas a ambos lados del edifi cio), teniendo alqunos qrupos más de 80 alumnos. Para paliar los efectos del sol y la aridez en las horas de recreo, se plantaron posteriormente en el patio pinos y eucalip tos, muchos de los cuales fueron arrancados para instalar el recinto ferial en 1959. La aqrupación de todos los niños en un mismo centro tuvo inmediatas repercusio nes en su formación: además de unas mejo res condiciones físicas y materiales para el aprendizaje, el coleqio ofertaba un plan edu cativo secuenciado -por niveles, no por aulas unitarias-, proqresivo y coherente en sí mismo. Aquellos alumnos sequían sus enseñanzas, en pupitres bipersonales con los tinteros para carqar sus plumillas, con la Enciclopedia Dalmau Carles de Grado Medio, donde durante varios cursos aprendían Gramática, Aritmética, Geometría, Historia Saqrada, Geoqrafía, etc. Se realiza ba en el aula un cuaderno de rotación, en el que cada día un alumno pasaba a limpio la lección correspondiente, que al día siquiente el maestro les prequntaría colocados todos de pie alrededor del aula. Memorizaban y recitaban poesías de libros como Lecciones de cosas y leían colectivamente, por orden, cada día un párrafo 0 capítulo de alqún texto narrativo -Corazón, de Edmundo de Ami cis, por ejemplo- en torno al cual después reflexionaban. Por las tardes, las niñas aprendían Labores y los niños realizaban Manua lidades. Alqunos maestros preferían impartir las clases de Cien cias Naturales en los parajes próximos, por lo que una tarde a la semana iban al campo de excursión. Junto a las actividades académicas, se Ilevó a cabo por las alumnas y alumnos (estos desde el 2° número) de 6° Grado la edi ción mensual de un periódico, Pensamiento escolar, del que vieron la luz 7 números en este primer año de vida del coleqio; se realizaron varias excursiones por los alrededores: a Crevillente, Villajoyosa, etc. y 84 niños participaron en la Campaña de Colonias Escolares, pasando 15 días del verano en Santa Pola. Se puso en funcionamiento la cantina escolar, y para recaudar fondos se realizaron diversos actos y representaciones, alquna de ellas en el Teatro Castelar. Pero también desde su inicio, el coleqio -sus dependencias e instalaciones- fue punto de encuentro para la realización de más actividades que las estrictamente académicas. Así, desde el prin cipio, se orqanizó una campaña de alfabetización, mediante clases nocturnas, para mayores de 14 años. En la última etapa de la Guerra Civil se suspendieron las clases para que se instalara en su edificio la Subsecretaría del Ejército de Tierra y un hospital provisional Colonia escolar del Padre Manjón en Santa Pola con el alcalde Aquilino Bañón (primero por la derecha). 1932. Clase de 4 grado en el colegio recién inaugurado. Octubre de 1932. en las aulas de la primera planta; además, una guarnición militar organizaba bailes en el salón de actos del colegio. Acabada la contienda, se celebraron algunos consejos de gue rra en sus dependencias. La vida escolar volvió poco a poco a la nor malidad, destacando el cambio de enfoque en el tratamiento de la Historia de España -sobre todo la más reciente- y una mayor pre sencia del hecho religioso y su aprendizaje en las aulas. Así, duran te algún tiempo, se celebraron misas los domingos por la mañana en el salón de actos del colegio. EI mayor inconveniente de estos años, además de la precariedad de medios didácticos y servicios educativos, fue el elevado nivel de absen tismo y el abandono de la escuela provo cados por la temprana incorporación a la vida laboral. Hecho que se fue aqudizan do en paralelo al emergente despegue industrial de la ciudad. En diciembre de 1951 apareció el periódico El Escolar y, en 1954, Escuelas Graduadas, ambos reali zados exclusivamente por los alumnos de la Escuela Graduada de niños. Más que un periódico escolar, se trataba de un bole tín informativo y donde figuraba un cua dro de honor con los tres alumnos más aplicados de cada clase. EI Frente deJuven tudes realizaba una visita por Reyes, Ile vando regalos y juguetes para los niños. Durante 1946, por reforma, las ofici nas del Ayuntamiento se trasladaron al salón de actos del colegio. Desde 1944 hasta 1952, en que se ubicó en su pro pio edificio, y ante el pujante desarro Ilo económico e industrial, comenzó a funcionar en las aulas del colegio la Escuela Profesional de Calzado de Elda y Petrel, con el fin de diversificar y cualificar a los aprendices y trabajadores del sector. EI 10 de septiembre de 1952 se inauguró la Bibliote ca Pública Municipal, ubicada en lo que entonces era el salón de actos del colegio, y donde sique hasta hoy. Alberto Navarro Pas tor, conocido historiador y cronista de la ciudad, fue durante varios años su primer bibliotecario. Desde 1959 hasta 1963 se cele braron los primeros certámenes de la Feria del Calzado en las depen dencias del colegio: primero como feria de carácter nacional y Clase de niñas (párvulos) en 1942 con su profesora Da Victoria Dolores Sedano. desde 1962 como Feria lnternacional del Calzado e Industrias Afines (FICIA). En 1964 la feria se trasladó al edificio cons truido para tal fin. Poco a poco, en la década de los 60, se van produciendo visibles mejoras en el aspecto educativo. La disponibilidad de más medios didácticos y una mayor diversidad de recursos (cartillas esco lares, primeros libros de texto, cuader nos de trabajo por materias, etc.) contribuyeron bastante a ello. Las ense ñanzas del Catecismo y la Formación del Espíritu Nacional seguían teniendo amplia presencia en el currículo. Del mismo modo, la Navidad y el Mes de las Flores, en mayo, eran dos celebraciones reli giosas en torno a las cuales se realiza ban distintas actividades. Se implantaron las permanencias, horas (bien de 12 a 1 ó de 5 a 6) que los alumnos perma necían en el colegio repasando y/ o pro La alumna Ana Ma Villanueva recitando en el comedor del colegio el Antonia». fundizando en sus aprendizajes; pagadas generalmente por las familias, supuso un complemento para el profesorado que le permitía paliar en algo las estrecheces de un sueldo tan bajo. Las permanencias se suprimieron en el colegio en 1975. En 1961 se inauguró el comedor del colegio, y desde 1963 se impartían clases de Alfabetización a partir de las 5 de la tarde, a través de un programa que, coordinado desde Alicante, estaba promovi do por el Ministerio de Educación Nacional. Es hacia 1964 cuando empieza a denominarse al centro con su nombre actual, Padre Manjón, por estar ubicado en la calle con este nombre. Hasta ese momento, el colegio comenzó Ilamándose Escuelas Graduadas Emilio Castelar y, conocido aún hoy por muchos eldenses como Escuelas Nuevas, desde 1940 hasta 1964 tuvo dos nombres: Inmaculada Concepción la Escuela Graduada de niñas yJuan Bautista de la Salle la de los niños. EI enorme desarrollo económico e industrial propició que Elda pasara de tener 28.751 habitantes en 1960 a 48.250 en 1975. Ello produjo un considerable aumento del número de niños y niñas en edad escolar. Para solventar este problema, en 1967 se adscri bieron al colegio las aulas ubicadas en la Escuela Graduada Pro qreso y las de la Escuela Graduada Ramón Nocedal; y en junio de 1970 se inauguró el Grupo escolar Cardenal Cisneros, construido en el patio del Colegio Padre Manjón. Pero resultó insuficiente: aún pasando en 1972 tres unidades del colegio a San Francisco de Sales, en 1977, el colegio en su conjunto disponía de 62 aulas, 64 pro fesores y albergaba a más de 2.500 alumnos. Si observamos que tan solo diez años antes, en 1966, había matriculados 312 alumnos, distribuidos en 14 secciones, se apreciará mejor la problemá tica creada en los años setenta. AI mismo tiempo, con la promulgación de la Ley General de Educación en 1970 se producen cambios muy siqnificativos que también afectan a las actividades del colegio. Si hasta entonces la educación básica priorizaba ante todo su labor alfabetizadora y asis tencial, con la E.G.B. se persigue una enseñanza más individualizada, diversa e integral de los alumnos; acorde con una sociedad que demanda mayor formación a sus ciudadanos, una mejor espe cialización para sus técnicos de qrado medio y superior y un mayor número de titulados superiores que contribuyeran a su desarrollo. Se implantan con esta ley las aulas mixtas (niños y niñas jun tos en una misma clase), que comienzan a funcionar en el colegio en 1974. La diversificación por áreas de aprendizaje y una mayor aten ción a las actividades físicas y deportivas, confieren una nueva ima gen a las actividades escolares. Sin duda, merecería un capítulo aparte el activo papel jugado en los últimos 35 años por el depor te tanto escolar como extraescolar entre las actividades del centro; y no sólo por la gran cantidad de títulos obtenidos como por lo que la actividad física y la iniciación al deporte suponen para la for mación integral de las personas. Remito al lector interesado en abundar en el tema a la sección correspondiente del libro conme morativo del colegio recién editado, y donde Antonio Hervás - ani mador y máximo promotor del deporte en el colegio- detalla pormenorizadamente el desarrollo y amplitud de las actividades Grupo de profesores del colegio Padre Manjón el día de la festividad de San José de Calasanz en la comida del Hotel Sandalio. Años 50. deportivas que se realizan. Una actividad, la Educación Física, que antes del año 70 ya era importante en el coleqio puesto que la ini ciaron de un modo sistemático los hermanos Sebastián y Felipe Utrero; de hecho, en 1968 el colegio recibió el premio nacional otor gado por la Delegación Nacional de Educación Física y Deportes. Con la Ley de170, la enseñanza básica se organizó en 2 etapas: la la, de 1° a 5° curso y la 2a, de 6° a 8°. Organización que funcio nó en el colegio antes de 1970 puesto que durante algunos años se impartieron cursos experimentales de lo que iba a ser 2a etapa (60 7o y 8^) Los niveles más bajos -Preescolar, l° y 2° de EG B- que daron ubicados en el edificio Manjón, y de 3° a 8° en el Cardenal Cisneros. Aunque con lentitud, fueron creciendo las partidas pre supuestarias y de dotación destinadas a los colegios, lo que per mitió ir renovando el mobiliario e ir actualizando y adquiriendo mayor cantidad de material didác tico. Se promueve una enseñanza por objeti vos (generales, específicos y operativos), una mayor variedad en los agrupamientos de los alumnos (qran grupo, pequeño grupo, trabajo indi vidual, etc.) y un seguimiento más pormenori zado del proceso de aprendizaje mediante la evaluación continua. Cambian los libros de texto para cada una de las asignaturas impartidas y se implanta el sistema de fichas, como cuader nos individuales donde el alumno realiza las actividades referidas a cada tema. Se inicia la aten ción a la diversidad, con los primeros maestros de Educación Especial que Ilegan al colegio. Se instaura la enseñanza de un idioma extranje ro (Francés o Inglés) y se normativizan las acti vidades del Área de Plástica y Dinámica. La actividad, por esta época, de los Movimientos de Renovación Pedagóqica permitió un mayor intercambio de experiencias innovadoras entre los docentes, que cristalizaría en la constitución de los Centros de Profe sores una década después y que per mitiría al profesorado conocer distintas metodologías de trabajo, aplicar y eva luar su puesta en práctica, así como contrastar experiencias con otros profesores/ as. Por primera vez se establece la obliqatoriedad de la Educación Básica hasta los 14 años, lo que en un momento de enorme crecimiento demográfico supuso el reconocimiento de una necesidad evidente para toda Elda: la creación de, al menos, 40 unidades escolares más. La construcción a finales de los setenta de distintos colegios por los barrios de la ciudad fue la consecuencia lógica ante la situación creada y que contribuyó a desmasificar las aulas del Padre Manjón (más de 600 alumnos salie ron en 1979 del centro destinados a otros coleqios de la ciudad: Pin tor Sorolla, Antonio Machado, etc.), lo que supuso a su vez la creación de nuevos espacios para el coleqio (Laboratorio, Gimnasio o Aula de Pretecnología). Además, el Ayuntamiento pavimentó el patio del colegio, lo que permitió ganar espacio para más pistas depor tivas y unos recreos menos polvorientos, más respirables. Aparte de las actividades deportivas mencionadas, durante este periodo en el colegio se crea una rondalla, se organiza y pone en funcionamiento la Biblioteca con servicio de préstamo a los alumnos; el colegio participa durante varios años en el programa de Radio Nacional Misión Rescate; sale en 1978 un nuevo perió dico escolar IlamadoAula 0, se pone en marcha un Grupo de Tea EI pedagogo Padre Manjón, que da nombre al colegio. tro o se oferta una amplia gama de actividades extraescolares promovidas por la APA. La creación en 1971 de la Asociación de Padres de Alumnos del colegio (la primera que se constituyó en Elda) también fue decisiva para revitalizar el nivel de actividades (tanto en can tidad como en calidad) que se realizaban en el colegio. Ya desde el primer momento con su primer presidente, Marcelino Pérez González, hubo claridad en cuanto a los fines persegui dos y que en esencia eran: orqanizar a sus aso ciados para una mayor participación e implicación en la vida escolar, contribuir a la mejora del material e instalaciones del colegio y promo ver la realización de actividades (tanto escola res -en coordinación con el profesorado- como extraescolares) que redundasen en una mejo ra del nivel formativo de los alumnos/ as del colegio. Organizada, desde su junta directiva, en distintas comisiones de trabajo, su contribu ción ha sido desde entonces fundamental. Con dinero aportado por la Asociación se ha comprado abundante material didácti co, deportivo, audiovisual, etc.; se han mejo rado instalaciones y dependencias, se construyó el gimnasio del colegio, etc. Se han realizado múltiples actividades de carác ter cultural (charlas para padres, cine forum, teatro, creación de una rondalla, etc.) y depor tivo (subvencionando y Ilevando multitud de equipos en todos estos años). Progra- mando actividades de gran interés, como por ejemplo la visita al Centro de Félix Rodrí quez de la Fuente, quien además impartió una conferencia en el cine Ideal. Partici pando en actividades escolares de carácter general (Navidad, celebración del Carnaval, Fiesta de Moros y Cristianos, Semana Cultural, Fiesta fin de curso, etc.). Organizando la realización de actividades en horario extra escolar (de 12 a 1 y de 5 a 6 de la tarde) para Inauquración del Cardenal Cisneros, 27 de junio de 1971. los alumnos del coleqio; entre otras, actualmente se Ilevan a cabo: Expresión Corporal, Inqlés, Ajedrez, Dramatización, Gim nasia Rítmica, Deportes (futbito, basket, multideporte, etc.), Taller de Ciencia y experimentos, Expresión Plástica y Pintura, etc. Su participación e implicación en los distintos órganos del cen tro también es reseñable, así como su contribución, trabajando con otras instituciones, para la resolución de problemas comple jos en momentos puntuales. Baste citar su colaboración para el proceso de desmasificación del colegio en los años 1978-79 0 laintensa actividad despleqada para que, frente a otros intereses e infinitas trabas, la ejecución de las obras de remodelación del colegio Ilegasen a buen puerto. La implantación, a comienzos de los 80, de los Programas Reno vados conlleva modificaciones siqnificativas en cuanto a la orga nización escolar: las dos etapas anteriores se distribuyen ahora en tres ciclos educativos, concibiéndose cada ciclo como unidad pedagógico-didáctica asentada sobre las características evolutivas de cada etapa del crecimiento, y permitiendo una mayor fle xibilidad organizativa dentro del ciclo para garantizar los aprendizajes respetando el ritmo de desarrollo individual de cada niño/ a. Se supe ra, con ello, la rigidez de los objetivos establecidos por la ley anterior y se establece una metodología más diversa y adecuada a los intereses y necesidades de los alumnos/ as. Desaparece el méto do de fichas, iguales para todos, y se establecen pautas de coordinación entre los distintos ciclos que garanticen el normal desarrollo al pasar de uno a otro. Antes de ser implantada por ley, la organización por ciclos fun cionó en el colegio desde 1978, con la particularidad de que el pri mer ciclo abarcaba de 1° a 3° curso, y no hasta 2° como luego se estableció. Tras la aprobación del Estatuto de Autonomía y la implantación de la Llei dUs i Ensenyament del Valenciá, se comien za a impartir el Valenciano como asignatura, no sin dificultades en el colegio. Del mismo modo, se inicia el proceso por el que se irán integrando en el aula ordinaria los alumnos de Educación Espe cial. La distribución de los alumnos no varió, permaneciendo Preescolar, 1° y 2° de EGB en el edificio Manjón, y el resto -de 3° a 8°- en el edificio Cisneros. La desmasificación señalada ante riormente permitió crear nuevos espacios. Asimismo, el posterior cierre del comedor escolar, en 1985, supuso la creación de un amplio salón de actos en dicho espacio, importante para el desa rrollo permanente de actividades teatrales, proyecciones, etc. Todo ello, unido a una mayor dotación de material didáctico (proyec tores, retroproyectores, TV y vídeo, material de laboratorio, etc.) redundó en una mayor calidad educativa. Con motivo del cincuenta aniversario del colegio, en noviem bre de 1982, se realizaron diversas actividades para conmemorar la efemérides. Entre ellas, se realizaron alqunas excursiones de montaña y que constituyeron el qermen de lo que desde 1984 es una actividad que se realiza anualmente por profesores/ as, alumnos/ as y padres/ madres del centro. En las instalaciones del cole gio se siguieron realizando múltiples actividades: proyecciones de cine y ciclos de Cine Forum, representaciones teatrales, etc. Por esta época, y durante varios años, el patio se utilizó para la orga nización de actuaciones y bailes en Fiestas de Septiembre y con pos terioridad por la Falla de EI Trinquete para la realización de algunos actos propios de esta fiesta. Desde entonces hasta hoy no ha dejado de crecer el número de actividades complementarias y extraescolares realizadas. EI colegio participa activamente en las iniciativas organizadas desde dis tintas Concejalías (Día del Árbol, Día del Libro, etc.) o promueve algunas que lo significan: Expo-Navidad, Día de la Paz, Carnaval, Fiesta de Moros y Cristianos por los más pequeños, Fiesta de Fin de Curso, Semana Cultural, etc. En 1997, con motivo de la celebración de los 25 años de Depor te en el colegio, se Ilevaron a cabo múltiples actividades -depor Equipo de balonmano femenino del colegio. 1971. tivas sobre todo- y se editó un cuadernillo que recoqía, entre otras cosas, la trayectoria deportiva del coleqio en esos 25 años. La implantación proqresiva de la LOGSE, en los años noventa, también ha conllevado cambios importantes en el coleqio. La divi- sión de la enseñanza obliqatoria -ahora hasta los 16 años- en Pri maria y Secundaria supuso la salida del coleqio de los antiquos niveles 7° y 8°, ahora 1° y 2° de E.S.O., en el año 2000. Del mismo modo, la división de la Etapa Infantil en 2 ciclos (0-3 y 3-6 años), ha supuesto la incorporación a los coleqios de los niños y niñas de 3 años, y que por la falta de espacios motivados por el traslado, en nuestro coleqio es efectiva desde este curso 2003-2004. Esta ley ha permitido la elaboración del Proyecto Educativo en cada cen tro, adecuado a las características y necesidades del al ŭ mnado y el medio socio-familiar concreto, fijando unos objetivos mínimos para cada ciclo pero permitiendo un currículo abierto a concre Excursión al Rincón Bello de 8° de EGB. 1990. tar por los centros y sin máximos. Una mayor aten ción a la diversidad, la ampliación de servicios pedaqóqicos (psicóloqo, loqopeda, educador/ a, etc.) y un mayor número de profesores especia listas (Música, Idiomas, Educación Física, Pedaqo qía Terapéutica, profesorado de Apoyo, etc.) son alqunos aspectos desarrollados con la LOGSE. En cuanto a la dotación material y didáctica, tras las obras de remodelación, hoy día el coleqio reúne las con diciones establecidas por la LOGSE, siendo total mente nuevos el mobiliario y qran parte del material didáctico disponibles. Y es que las obras de remodelación, por su siq nificado y maqnitud, bien merecen unas líneas. Una remodelación que se comenzó a fraquar diez años atrás cuando se le encarqó al arquitecto Anto nio Marí un proyecto para arreqlar los aseos del anti quo edificio Manjón, y que fue creciendo hasta ser una obra de remodelación de todo el centro. EI estado de sus dependencias e instalaciones era depl,orable: la dejadez en lo que a su mantenimiento se refiere (dado que el rei terado anuncio de las obras no aconsejaba invertir en él) ofrecía una imaqen deprimente e insalubre del coleqio. Un proyecto de remodelación no exento de altibajos y polémicas y que ahora, qra cias al empeño y dedicación de toda la comunidad educativa, es una realidad plena. Alqo similar a lo ocurrido con la creación del Grupo Escolar de 1932: un proyecto que comenzó a estudiarse en 1910 y que no se ejecutó hasta 21 años después. En junio de 2001 se efectuaba el traslado de las aulas de Infan til al Centro Parroquial de la Iglesia de Santa Ana y de las aulas de Educación Primaria al IES La Torreta. Lo que, previsiblemente, iba a prolonqarse durante un curso escolar, finalmente se alarqó hasta dos, con los inconvenientes que ello ha supuesto para todos. Terminadas las obras, el coleqio lo conforman dos edificios: el aulario -antiquo edificio Cardenal Cisneros- y la zona administrativa y de servicios -antiquo edifi cio Manjón-. Entre ellos, el patio con dos pistas deportivas, un recinto vallado específico para los niños/ as de Educación Infantil, una zona ajardi nada y un espacio central con un porche que comu nica ambos edificios. EI aulario, con espacios amplios y luminosos, cuenta con varios accesos a su interior y un ascensor para sus 3 plantas. En la planta baja se encuentran las doce aulas de Educación Infan til con dos aulas de Apoyo y otra de Pedaqoqía Terapéutica. Con aseos entre ellas, cada aula de Infantil tiene acceso propio a un patio interior no totalmente cubierto. Cada una de las plantas acoqe ocho aulas de Educación Primaria más otras aulas de apoyo de pequeño qrupo, de reunión, música, aula taller, etc. EI que fuera edificio Manjón alberqa en la plan ta baja el qimnasio, el aalón de actos, la sala de profesores, las dependencias administrativas del cole gio (dirección y secretaria), el departamento de orienta ción (SPE), un espacio para la APA del colegio y la conserjería. En la primera planta se encuentran la biblioteca del cen tro y un aula de informática. Ocupando la mitad de esta primera planta y toda la segunda, la impresionante Biblio teca Municipal con acceso propio desde la calle, aún por terminar. Pero Lcuáles son las líneas fundamentales que defi nen un Proyecto Educativo?. Hay tres aspectos esen ciales que definen el Proyecto Educativo de un Centro: • Los fines educativos perseguidos y que se desdo blan en el conjunto de objetivos mínimos y de ampliación, secuenciados por niveles y ámbitos de aprendizaje. • La adecuación de estos objetivos a las caracterís ticas y necesidades de sus alumnos, atendiendo tanto a su diversidad individual como grupal (situa ción socio-económica, familiar, cultural, etc.). Derribo del coleqio Cardenal Cisneros. lunio 2002. • EI establecimiento de las estrategias organizativas, las pau tas metodológicas y el conjunto de actividades a desarro Ilar para conseguir dichos objetivos. Como es lógico, durante estos 71 años de vida del colegio, su propuesta educativa se ha ido modificando y acomodando a las necesidades y la realidad de cada momento. En primer lugar, porque desde la Ley de Primeras Enseñanzas promulgada por el Ministerio de Instrucción Pública en 1932 hasta la actual implantación de la LOCE, muchas y muy variadas han sido las leyes instauradas y luego modificadas y/ o derogadas en materia edu cativa, como se ha puesto de manifiesto en estas páginas. Por otra parte, el paso de una sociedad agraria y de carácter artesanal/ preindustrial a otra de tipo plenamente industrial y de ésta últi Vista general del colegio, rodeado de edificios altos. 1992. ma a otra tecnológica y de servicios, supone cambios impor tantes que afectan lógicamente a la planificación curricular y a la organización de toda la enseñanza. Además, con la división por zonas de influencia desde la creación de varios colegios a fines de los setenta, y siguiendo fun damentalmente el criterio de proximidad, el C. P. Padre Manjón acoge mayoritariamente a los alumnos/as cuyas familias resi den en la zona centro. En la actualidad, y tras las obras de remo delación que se han Ilevado a cabo, dispone de 12 unidades de Educación Infantil, 24 de Educación Primaria y 3 de Pedagogía Terapéutica. Cuenta con 51 profesores, un/a educador/a, los servicios complementarios de psicopedagogo y logopeda, y una matrícula de casi 900 alumnos. Pero también nuestro Proyecto Educativo hoy contempla medidas organizativas y metodológicas con cretas para dar respuesta a situacio nes individuales específicas: alumnos/as con necesidades educa tivas especiales -sea por discapaci tación física y/ o psíquica-; otros/as con retrasos en su ritmo de aprendi zaje; niños/as inmiqrantes; situacio-nes de absentismo escolar -mínimo en el colegio-, de desajustes en la normal convivencia del centro, etc. Y desde luego las actividades realizadas (académicas, complementarias, extra escolares, etc.), casi todas ellas ya comentadas en las páginas prece dentes. Por todo ello, de lo aquí expues to, sería interesante retener a modo de conclusión, lo siguiente: ^ C^^^C ^^^^^ 1,^ !. ,--_ ^ ^ w r ^ ^u ^ ^ ^ ^^; Planos de alzada y sección del nuevo edificio del Padre Manjón. Proyecto básico del arquitecto eldense Antonio Manuel Marí Mellado. • EI C. P. Padre Manjón ha sido, además de un colegio fun damental en la historia educativa de Elda, uno de sus refe rentes para la promoción y el desarrollo cultural, económico y social de la ciudad. • Su actividad pedagógica, no sin dificultades, se ha ido acomodando a las demandas y necesidades reales de cada momento. • En sus aulas se han formado eldenses de muchas gene raciones que, en su gran mayoría, han obtenido unos resul tados académicos más que satisfactorios. • Resultados que hablan del alto nivel de calidad del cole gio, acorde con el dinamismo y autoexiqencia de sus docen tes y el grado de implicación de las familias en la educación de sus hijos/ as. Un alto nivel de calidad mantenido desde siempre y que se proyecta hacia el futuro en condiciones inmejorables después de unas obras de remodelación que hacen del Padre Manjón un cole gio preparado para afrontar los retos educativos del nuevo siglo con plenas garantías. Quisiera terminar señalando la deuda contraída con José Luis Bazán, Alberto Navarro yJoaquín Samper, y de cuyos trabajos -en torno a la historia de Elda y del colegio Padre Manjón- me he ser vido para la confección de este artículo, sobre todo en su parte pro piamente histórica. Agradecer asimismo sus aportaciones a cuantas personas me han transmitido sus vivencias y experiencias para la elaboración de la trayectoria pedagógica y educativa de todos estos años de vida del colegio. A mí, no a ellos, son achacables los errores y carencias que estas páginas puedan contener. n ^ ^^ i v MANUEL MARTINEZ CUENCA EMPEZO A EJERCER DE ^ . MAESTRO EN 1937, EN LA REPUBLICA, JUBILANDOSE EN 1983 E 1 VICENTE DELTELL VALERA A Manuel Martínez Cuenca, nacido en Elda hace 87 años, le cabe el honor de ser el maestro nacional vivo más antiguo de la ciudad, ya que comenzó a ejercer su profesión en 1937, durante la República, si bien fue movilizado en la Guerra Civil y, tras múltiples avatares, no pudo volver a su profesión hasta 1945. Después de pasar un año más antiguo D. Manuel en la actualidad. ejerciendo en un pueblecito de la provincia de Tarragona, pudo venir a Elda, donde empezó a impartir clases en la Escuela Unitaria n° 1 «Monte Calvario». Posteriormente hizo de intermediario con la administración para la construcción, en los años 50, de la Escuela Unitaria N° 4 ccRamón Nocedal», donde impartiría clases durante varios años, hasta su traslado definitivo al colegio Padre Manjón, jubilándose en 1983 con 46 años reconocidos de ejercicio en la profesión y habiendo ostentado también el cargo de Secretario de la Junta Municipal de Enseñanza. Con cuatro hijos, tres de ellos dedícados como él a la enseñanza, D. Manuel, que reconoce encontrar en su afición a resolver crucigramas una buena gimnasia mental, recuerda en la siguiente entrevista muchos de sus avatares personales y profesionales, que están indisolublemente ligados al devenir de la enseñanza en nuestra ciudad. Curiosamente, la época que recuerda D. Manuel con más cariño fueron sus primeros años como maestro en la escuelas unitarías citadas, en las que debía atender a una clase de medio centenar de niños desde los seis a los 12 ó 13 años, «pero 11^^^ todo el mundo respetaba al maestro». También fue uno de los partidarios de la coeducación de niños y niñas cuando se implantó en los años setenta, «porque ya la había cuando ejercí el primer año durante la República». Hoy, este octogenario que reconoce se hizo maestro, entre otras razones, por influencia de D. Pascual Borruel, ve la enseñanza de manera distinta comparada con la de entonces, y sigue manteniendo lo que expresó en la nota que leyó a sus compañeros el día en que se jubiló: «Procurad ser, más que enseñantes, educadores, sed verdaderamente maestros, que es lo que éramos antes». gQué recuerda de su época de alumno? Yo estudié en la escuela privada de D. Pascual Borruel, con el que mi padre tenía mucha amistad, ya que hasta le Ilegó a hacer una vivienda en el patio del colegio. D. Pascual, que tenía la escuela al principio de la calle Legionarios, estuvo muchos años en Elda, se marchó y volvió otra vez, trasladando la escuela después de la Guerra Civil a la calle Maura. De ► r Asociación Provincial del Magisierio Mes de _.3 0 SE?i,1937 ALiCANTE toaalidod 1^^^ ... D.^ y.I{Gi,-t.d^^. ^/^l.Q/t/N^ :!^^ __. _..._ { t ^ /Jpt YESFTAS .RS. I ^é ^I J^aa^i yP h.aF.tN ^) UE ^ 5 a^ .^. Liquido de su haber, deducidos lmprl to de ^tllidades y II°^0 proteccidn Hufrfenos _ .._.S .!. 4.. ^r Idem de gratlflcaclón de adulms . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ^ _.-..._._ _-^_..I,..:^_.. . . . . ._, _. ...^ Idem de dlreccidn graduada ^ Mmestre . . . . . . . . .. ............ .. Idem del materlal del -^ ^ ^-^^^^ ......... ..... o^ouccior•^ffs Por timbre del reabo de ndmina . ...... n ia v«Ioddn Cuotas de Naclonal r Pro+incial ..., nr ^ Adminlstraeron ^d. td. (0S0 °;e). . . . . . . . . Para la Asoclación de Partido . . . . . . . . . . . . . . Por anticipo rcintegrable . . . . . . . . . . . . . . . . Por cuota de socorros . . . . . . . . . . . . . . . . IJ o i z y4 I^^ . ^ ^:^: f ^ ^ A PERCIBIR. . lIr7 ;I _z7z ^dr^ --^- f Recibo del primer sueldo como maestro de D. Manuel en 1937. aquellos años como alumno tengo un grato recuerdo, ya que como maestro era fenomenal. tCómo se decantó por la enseñanza y cuáles fueron sus primeros pasos como maestro? Yo estudié en Alicante con el Plan de Magisterio de Marce lino Domingo, que para mí fue el mejor que ha existido, un plan de estudios modélico. Estudié Magisterio por vocación, por que me qustaba mucho, aunque también me animó las facilidades que había entonces al ser una carrera corta y poder ejercer en la provincia. En aquellos años de la República, los maestros tenían una serie de ventajas, qanaban 3.000 ptas. al año y noso tros entramos ganando 4.000 ptas. En el año 34 nos presenta mos 500 aspirantes para 50 plazas en Alicante. Yo tuve la suerte de obtener plaza, a la que podías acceder con los estudios de Magisterio o con el título de Bachiller y había después tres años de estudios dedicados a metodologías, y luego un cuarto curso ADVERTENCIAS Nn olride envfar cl re c-ibo para ^usnficar la nd neanco Cemral nos ha otorgaao las m.íximas ven rajas afianzando la habfli^ tacidn; e espnnaamn^ a esta distinción aandn e,trasa,;^taaes I ^ ^cros dc ahorro y N cierosestableddospor t 8anc . Para toda dnda o recla i n diríjase a Presiden^ ce de la Asociación del Ma^ gisrerio, Albernla Romero, x, prinapal. de prácticas, pero ya cobrando, no con el sueldo total, pero sí con la particularidad de que teníamos plaza en la pro vincia. Yo tenía el título de Bachiller Superior y entré así, superando prime ro las oposiciones. Terminé los estudios de Magisterio en el año 37 y el primer destino como maestro fue en Petrel, donde sólo estuve un mes, porque me movilizaron por mi quinta y me marché a la guerra. Hice el servicio militar y la guerra en transmisiones. Durante la gue rra pasé a Francia, donde estuve en un campo de concentración. Con los avales conseguí volver España, estuve un par de días en un campo de concentra ción en Bilbao. Allí vino a buscarme mi padre y me vine para acá. Cuando Ilegué a Elda nos hicieron repetir el último curso y, sal tándose a la torera también lo que habíamos conseguido duran te la República de tener la plaza en la provincia, me mandaron a un pueblo de 100 habitantes de Tarragona, Belltall, lindando ya con la provincia de Lérida. Dio la casualidad de que un día en vacaciones se presentó un compañero de aquí, Antonio Tamayo, con un maestro nuevo que había venido a Elda y que resulta tenía la novia en un pueblecito al lado de donde yo estaba. Y entonces hicimos una permuta, al año siguiente él se fue para allá y yo me vine para Elda, donde me dieron plaza. Cuan do empecé aquí eran mayoritarios los maestros que venían de fuera. De aquí sólo estaban D. Antonio Tamayo, Da Antonia María Martínez, alguno más que se me habrá olvidado y yo. Luego se incorporaron Hortensia Guill, Pedro Gras, Da Lolita y Da Asunción Vera. En aquellos años de represión de la postquerra supongo que los maestros debían ser afines al Régimen. Usted, además, combatió en el bando repu blicano. i cómo consiguió superar todos los impedimentos para poder volver a ejercerla profesión? Cuando terminé finalmente la carrera, me mandaron un pliego de cargos por izquier dista y antirreligioso, algo que hicieron con casi todo el mundo, teniendo que buscar me unos avales.Y haciendo de nuevo el ser vicio militar en Barcelona, porque después D. Manuel en (a Escuela Unitaria Monte Calvario en el curso 1946-47 de la querra me chupé otros tres años de mili, Ilegó al regimiento un oficio en el que me daban dos días de permiso para tomar posesión de la escuela en Elda. Vine y enton ces estaba de alcalde José María Batllés, que tenía que firmar el nombramiento. Ese señor vivía en la misma plaza que yo y me m conocía, aunque no teníamos amistad. Como no estaba en el Ayuntamiento, me tocó ir a su farmacia y me preguntó: ies usted de Falange?, a lo que le contesté que no. A continuación, entró a la trastienda, sacó un pliego y me dijo: «Cuando firme esto, le confirmo la posesión». Firmé sin ningún inconvenien te, puesto que se me acababa el permiso. iCómo empezó a ejercer de maestro aquí? EI primer colegio en e) que estuve fue la Escuela Unitaria n° 1, que estaba junto a la carrete ra nacional, cerca del Hospital, D. Manuel con sus alumnos de la Escuela Unitaria Ramón Nocedal al poco de su ínauguración. en lo que hoy es (a Asociación de Curso 1960-61. D, Manuel hizo de intermediario entre el Minísterio y el Ayuntamiento para la VecinosNumancia-MonteCal construccióndeesteequipamientoescolar. _ __ __ _ _ _ _ .. vario. Allí estuve oce años. Entonces recibí un oficio del Ministerio en el que me pedían que recabara del Ayuntamiento un solar para hacer una escue la y que me hiciera carqo de él. Me presenté en la alcaldía y fui mos a ver el solar, que luego sería la Escuela Ramón Nocedal o Escuela Unitaria n° 4. Se terminó de construir la escuela y yo entré el sequndo año, accediendo por concursillo de traslado. Una de las razones por la que pedí el traslado es porque padecía de los bronquios y me costaba subir la cuesta. En Ramón Noce dal estuve unos 15 años, aunque en los últimos años pertene ciendo ya a Padre Manjón. Ocurrió una cosa por entonces y es que enfermé, tuve una oclusión intestinal, me operaron y cuan do me reincorporé, a los tres meses, lo hice ya a Padre Manjón, donde estuve ya hasta que me jubilé en el año 83 impartiendo clase a 3°, 4° y 5° curso, lo que me tocara. tCómo fue calando el Nacional-Catolicismo en la escue la y qué papel desempeñaba el maestro? Los maestros eran en su mayoría católicos, pero había tam bién muchos republicanos que tuvieron que admitir el catoli cismo si querían trabajar. En aquel tiempo, los domingos teníamos que acudir a misa de once con los niños y aquello me reventaba. Y los maestros también tenían que ir bien vestidos, aunque en los pueblos grandes como Elda la figura del maestro pasaba más desapercibida, a diferencia de cuando estuve en Tarragona. gEn la Escuela Unitaria, todos los maestros se ajustaban al mismo sistema de enseñar o cada uno tenía su librillo? Cada uno tenía su sistema. No podíamos seguir un sistema común porque dábamos clase a todas las edades, desde los seis a los doce años. Tenías que poner trabajos a todos y los pequeños aprendían incluso de lo que explicabas a los mayores. Entonces había mucho respeto al maestro, los niños eran díscolos, como han sido en todas las épocas, pero sin malas ideas, como pare ce que hay hoy. Elda ha sido una población muy cosmopolita y aquí ha venido gente de todas partes. Los padres se han preocupado poco por los niños, ya que era raro que vinieran al colegio a pre guntar por sus hijos, sólo lo hacían si se habían peleado con otros chicos. Nosotros procurábamos cumplir, aunque había mucho absentismo, ya que generalmente eran niños que a los once o doce años se ponían a trabajar, aunque salían sabiendo lectura, escritura y las cuatro reglas aprendidas. Admitíamos a todos los alumnos mientras hubiera sitio e incluso, si no era así, había madres que me decían: «yo le traeré una sillita para que se siente el niño». También estuvimos muchos años sirviéndoles la leche en polvo y el queso americanos. La leche la hacíamos en el colegio hasta que una madre se ofreció a hacerla en su casa. Tanto en Monte Calvario como en Ramón Nocedal yo tenía 50 alumnos hasta que fue bajando la ratio y acabé con 45. tEra usted un maestro autoritario? Regular, porque al que era muy condescendiente se le subían a las barbas los alumnos. Habiendo dado clase a tantas generaciones de elden ses, gmantiene relación con algunos de sus antiguos alum nos? gReconoce a alguno por la calle? Como alumnos he tenido a algunas personas conocidas de la ciudad como Benjamín Ortuño o José Miguel Espinosa, que han sido concejales del Ayuntamiento. Generalmente, cuando veo a alguno lo reconozco cuando me dice quién es, ya que yo lo conocí cuando tenía la edad escolar y de eso han pasado muchos años. ^ ^ ^^^^ ^ ^ .^ una maestra legendaria RAFAEL ^UAN ORTEGA __..__. Dolores Martínez Vera, más coriOClda con10 Da LOlita, es una maestra casi legendaria que forma parte de la memoria sentimental de muchísimos eldenses, incluido el actual alcalde, que fue alumno suyo. Da Lolita ejerció su magisterio desde 1951 hasta 1990, año en que se jubiló. En total, cuarenta y nueve años dedicados a la enseñanza en cuerpo y alma y con el antecedente familiar de su tía, Da Antonia Martínez Maestre, que también fue maestra durante muchos años. acida en Elda el 21 de diciembre de 1924, Da Lolita es nieta de Manuel Vera, que «fue muchos años alcalde de Elda». A sus 78 años, todavía recuerda su vivienda de la infancia en la calle San Roque, «una casa grandona y muy hermosa que la han derri bado y la han hecho jardín». Después de hacer sus primeras oposiciones, estuvo en LAI gayat, cerca de La Alqueña. Fue su primera plaza de maestra: «Era una escuelita con niños y niñas, una escuela unitaria, y me coqie ron mucho cariño. Yo me venía a Elda los sábados y volvía los lunes. Allí, estaba en una casa de un matrimonio muy cariñoso que me había alquilado una habitación. Estuve muy a gusto». Poste riormente, Da Lolita estuvo mucho tiempo en las Escuelas Parroquiales de la Estación: «Había un aula de niñas y otra de niños y yo tenía a las niñas. EI profesor de los niños era D. Pascual Ibars. Uno de los alumnos era el que es ahora alcalde de Elda, Juan Pascual Azorín, por eso me tiene tanto cariño». Era la época de la ayuda americana: «Nos mandaban unos bidones enormes de leche en polvo y, mientras se estaba haciendo la leche, yo le D? Lolita en la actualidad. decía a alguna niña: Ve a darle una uueltecica, que no se pegue. Y todas traían su vasico y, a la hora del recreo, se tomaban la leche. También nos daban un queso de color de butano y yo lo repartía en trozos para la merienda». Da Lolita recuerda alguna anécdota de aquellas Escuelas Parroquiales de la Estación: «Una vez, vino el Obispo a visitarnos y Da María Sequí tuvo que dejar me un sillón para él porque no teníamos nada donde pudiera sentarse». Había más carencias: «Teníamos que poner un altar para celebrar misa porque no había iglesia», algo que no deja de ser paradójico en unas escuelas parroquiales. Era una época en la que proliferaron en Elda las escuelas unitarias: «Conforme el pueblo Claustro de profesores del colegio Padre Manjón en el curso 1982-83, el del cincuentenario. Da. Lolita aparece rodeada por un círculo. se iba haciendo mayor, se iban haciendo escuelas en los nue vos barrios: Fray Luis de Granada, Ramón Nocedal..., donde estu ve yo también antes de Padre Manjón». Padre Manjón. Da Lolita tuvo que pasar por unas nue vas oposiciones, esta vez para consequir plaza en municipios de más de 10.000 habitantes, como era el caso de Elda. Las opo siciones tuvieron luqar en Valencia y Da Lolita quedó en sequn do luqar: «Los del tribunal no hacían más que pasar por donde yo estaba y eso me ponía muy nerviosa. Lueqo, resultó que está bamos empatados el número uno y el número dos y no sabían a quién dárselo». Fue así cómo Da Lolita volvió a Elda, esta vez con plaza en el coleqio Padre Manjón, del que Ileqó a ser direc tora: «cuando vino la inspectora, me coqió del brazo y me dijo: usted, de directora. Y lueqo, cuando venía, me decía: vénqase conmigo, que vamos a ver dónde están las escuelas de EI Proqreso. Y es que ella no sabía dónde estaban, por eso tenía que acom pañarla». Hay que recordar que las escuelas de EI Proqreso esta ban donde está ahora la Casa de Cultura, en la calle Príncipe de Asturias. Fue con Da Lolita como directora cuando se inauquró en el coleqio Padre Manjón el edificio de Cardenal Cisneros, recientemente demolido y vuelto a construir dentro de la rehabilitación de la que ha sido objeto el centro. Evolución. Durante cuarenta y nueve años, Da Lolita expe rimentó los sucesivos cambios en la enseñanza: «AI princi pio, cada maestro enseñaba a su manera con una enciclopedia en la que había un poquito de cada cosa. Después, ya hubo libros para cada cosa y los maestros tuvimos que especializarnos más». Alqunos cambios afectaron a la disciplina, aunque Da Lolita confiesa que «nunca fui una maestra autoritaria, pero, a veces, tenía que poner paz. Lo que más nos trastornó fue cuan do juntaron a los niños con las niñas, que se perdió un poco la disciplina». También se ha perdido bastante la costumbre de reqalar alqo a los maestros el día de su patrón, San José de Calasanz: «Siempre nos reqalaban alqo, pero, a mí, me reqalaban más por mi santo, la Virqen de los Dolores. Entonces, sí que me traían muchos reqalos los niños, y eso que yo les reñía». EI hecho de ser mujer, asequra, no supuso dificul tad añadida alquna: «Nunca tuve problemas con los compa ñeros por ese motivo». Ahora, Da Lolita, que en su tiempo también escribió alqu nos artículos sobre la enseñanza, vive una apacible jubilación rodeada de recuerdos y ejerciendo de secretaria de la Cofra día de los Santos Patronos. Cuando vuelve la vista atrás, todo son buenos recuerdos: «Siempre se portaron muy bien conmiqo en todos los sitios donde estuve». Coleqio de las Hermanas Carmelitas en la calle Antonio Maura,1901. Las hermanas Asunción Soler y Josefa Albert junto a un grupo de alumnas. Colegio Adil l ,d María d PRESENCIA CENTENARIA EN ELDA LUIS MAESTRE AMAT Y EMILIO MAESTRE ^/ERA En 1901, la Congregación de las Hermanas de la Virgen del Monte Carmelo acude a la llamada de D. José Navarro, cura de Santa Ana, para fundar un colegio en Elda en el que aliviar la carestía de puestos escolares que padecía nuestra ciudad. Nace así la primera Fundación en Elda de la institución de la mano de siete hermanas: Asunción Soler, Trinidad Tarrazó, Ma de los Ángeles Badosa, Ma Gracia Albalat, Evangelista María Vila y Patrocinio Sánchez, siendo ésta la primera Superiora que tuvo la Comunidad. E1 colegio, como es expreso deseo para todos sus centros de Madre Elisea Oliver Molina, fundadora de la Congregación, es denominado Nuestra Señora del Carmen, y la Casa queda bajo el patronazgo de San Joaquín. Grupo de niñas con el característico babatel del Colegio. 1928. eqún un testimonio oral, las hermanas se estable cieron durante un corto periodo de tiempo en la Casa Abadía. Pero de esta estancia no se guardaningún registro más, probablemente debido a que en breve cambiaron sus locales a la entonces calle de la Espe- ranza, más tarde Ilamada de Antonio Maura en agradecimiento por la concesión del título de Ciudad a la entonces Villa de Elda. En esta calle tenía su casa la familia de D. Lamberto Amat, y un miembro de ella, Luisa, profesará en 1914 en la Congregación con el nombre de hermana Elia. Esta familia cede parte de su vivienda para que las Hermanas Carmelitas habiten y desarro Ilen su labor docente. Y allí permanecerán hasta 1931. La educación que daban a las niñas respondía a los criterios al uso tamizados por el ideario carmelita, y por ello debió gozar de aceptación ya que el número de alumnos, incluidos los párvulos, va en constante aumento. Debemos tener presente que los inicios del siglo XX coin ciden con el pleno desarrollo de la industria zapatera y el con secuente cambio de una sociedad agrícola a otra industrial con la aparición de nuevas clases sociales que demandan mejoras educativas, sanitarias y laborales. Esta situación ori qina un aumento demográfico del que un alto porcentaje corres ponde a niños en edad escolar, acentuando el problema del déficit de instalaciones escolares, pues en ese momento sólo existí an dos escuelas públicas complementadas por la iniciativa privada de alqunos industriales como Giménez y Peláez, y de maestros como Rafael Ayala, Concha Bonmatí o Juan Vidal Vera entre otros. AI referirnos al alumnado carmelita hemos dicho «niñas» porque eso es lo que se repite una y otra vez en las memorias académicas que han Ilegado a nosotros. Sin embargo, testi monios como el de Vicente Valero Bellot o Julio Capilla hacen patente la asistencia de niños de párvulos al colegio durante toda su historia. Lo que sí es cierto es que abandonaban el centro tras recibir la Primera Comunión por lo que la Educación Elemental sí que era netamente femenina. Como institución religiosa Nuestra Señora del Carmen se regía por las Constituciones propias de la Congregación y más concretamente por aquellos artículos que se referían específicamente a la educación, siendo en ellos en los que se dibu ja el carácter religioso que impregnaría la formación de sus alumnos. La redacción del Reglamento Interno, que sería la norma de funcionamiento del Colegio, quedaría a criterio de la Dirección y la Comunidad Docente tras la presentación y aprobación de la Superiora General y el Consejo, otorgando al centro una cierta autonomía.. En este Centro el horario de asistencia y los días lectivos refle jan las costumbres de la época que incluían el sábado como día laborable, y de hecho el «calendario escolar» quedaba más condicionado por las circunstancias climatológicas que por las fechas dictadas por el Ministerio de Instrucción. EI hora rio era de nueve a doce y de dos a cinco por la tarde y el des canso coincidía con el de la industria, pues en aquella época era habitual que la comida se realizase a los doce del medio día. Junto a asiqnaturas como Gramática, Aritmética o Geo metría, las alumnas aprendían Historia Sagrada, Higiene, Urbanidad y Catecismo apoyándose en libros de texto como los de Paluzzi, Saturnino Calleja o el Padre Ripalda. La asistencia a clase era obligatoria y el Reglamento inclu ye puntos referentes a la disciplina escolar en los que se insta rIC Grupo de párvulos de ambos sexos. Años 40. a las hermanas a hacer uso de «dulzura, cariño y una prudente severidad». También insta a los padres a interesarse por la educación de sus hijas acudiendo al Colegio a enterarse per sonalmente de los progresos de las niñas, sentando así desde un principio la necesidad de compartir la responsabilidad de la educación con las familias, algo que en nuestros días es intrínseco a todo el sistema educativo. Ante estos aspectos formales quedan los recuerdos de antiguos alumnos que, como poco, nos harán sonreír. Julio Capilla nos relata: «Por martirizar con mis pellizcos a un com pañero de banco, una monja me Ilevó de la oreja hasta la temi ble celda de castigo y dentro del jaulón permanecí toda la tarde. Durante el encierro, las insolentes gallinas no dejaron de contemplarme con descarada impertinencia...» Curioso método pedagógico el encerrar a los niños en el gallinero junto a las gallinas para corregir sus travesuras infantiles... Otro elemento, recogido en el Reglamento del Colegio, que es a la vez diferenciador y unificador, es el uniforme. Es obli gatorio el Ilevar uniforme seqún modelo del colegio que en esta época queda reducido a un «delantal». Ahora bien, esta norma no debía ser de cumplimiento estricto, pues los docu mentos gráficos nos muestran a qrupos de alumnos tanto con uniforme como sin él. EI colegio era privado, y es significativo el hecho de que en 1923 los honorarios eran de dos pesetas para la Primera Sección, tres pesetas para la Segunda Sección y cuatro pese tas para los alumnos que asisten a la Tercera, atendiendo siem- pre de forma qratuita a niños y niñas cuyas familias no pudieran satisfacer estas cantidades. Conforme pasan los años las instalaciones se van ade cuando a las necesidades y si en el año 1903 el Inspector de Primera Enseñanza D. Federico Gómez las considera como «malas y antihigiénicas», en 1923 D. Juan Rico Pérez, médico tiiular e Inspector Munici pal de Sanidad, consideraba los locales espaciosos, con cubicación suficiente para 200 alumnos y que «si bien la casa es anti gua, por su capacidad, ventilación, sola mento y limpieza, reúne buenas condiciones para el uso pedagógico destinado». Durante todo este primer periodo el carácter religioso del colegio y la educación allí impartida es fiel reflejo del Idea- rio de la Madre Elisea: «procurar instruir a los niños en la ciencia de los Santos que es el principal fin». La actividad docente se prolonga hasta el año 1931 en que la situación sociopo- lítica del país obliga al cierre del Colegio Nuestra Señora del Carmen. La permanencia de la Comunidad Carmelita de la Casa de Nuestra Señora de la Salud en el Hospital, fundada en 1908, será decisiva para el regreso de la Comunidad de Nuestra Seño ra del Carmen que una vez finalizada la Guerra y con el resur gir del sentimiento religioso, realizará su labor docente en el nuevo colegio de la calle San Roque a partir de 1940. EI edificio que albergó el antiguo Hospital de Pobres, las Escuelas Públicas hasta su traslado al centro Padre Manjón en 1932, y posteriormente las Escuelas de Acción Católica, es el lugar escogido para el establecimiento de las instalaciones del nuevo Colegio Carmelita, y la hermana Ma Teresa Navarro la encargada de su puesta en marcha. Junto a la hermana Guadalupe y la hermana Mercedes Puche estuvieron hospedadas en el Hospital desde el que se desplazaban todos los días hasta que la Casa ofreció unas condiciones mínimas de habitabilidad. Este reqreso fue muy bien acogido por los vecinos hasta el punto de que se volcaron en su ayuda ofreciéndoles los enseres que necesitaban. Así nos lo cuenta Teresa Navarro en sus memorias: «Por otra parte casi todos los vecinos de San Roque también cooperaron una con una sartén, otra con dos cazos, otra varios vasos, otra con un cubo y palanqana, total que en pocos días ya teníamos nuestra casa provista de casi todo lo necesa rio con el cariño y franqueza que les caracteriza a los eldenses. Que el Señor se lo haya recompensado y les proteja siempre». Aparte de esta colaboración general, Teresa Navarro cita a Da Anita Romero, que había sido religiosa carmelita, y a D. Ernes to Ortiz, que regala los bancos de la Capilla y los pupitres necesarios para dotar dos aulas. La imaqen de la Virgen del Carmen que presidió la vida del Colegio hasta que la Comunidad adqui rió una propia fue cedida por D. Enrique Vera.. A las tres hermanas mencionadas pronto se une la Madre Belén Martínez, quien asumirá el cargo de Superiora desde 1941. Grupo de alumnas. 1940. Puesto en marcha el coleqio su acoqida fue tan popular que la afluencia de alumnas obliqa a hacer reformas inmediata mente. La primera de ellas fue dividir la,capilla para poner un aula de párvulos a la que, como ya vimos al hablar del centro en Antonio Maura, asistirán niños. A ésta sucederán múltiples modi ficaciones del edificio para ir adaptando el centro a las necesi dades educativas de cada momento. Cinco horas diarias permanecían los alumnos en el centro, incluidos los sába dos, salvo el jueves por la tarde en que no tenían coleqio. A las doce acudían a comer a casa, excepto aquellos que hacían uso del comedor y las alumnas internas. Ade más el coleqio tenía matrículas qratuitas de obliqada oferta para alumnos de fami- lias con dificultades económicas. La formación reliqiosa que estos alum nos recibían se completaba con la parti cipación en cuantos actos proponía la Parroquia, a la que apoyaron durante todo el tiempo que ocuparon el centro de la calle San Roque, cediendo sus locales para todas las actividades que los qru pos que surqían en Santa Ana quisieran desarrollar. A la Madre Belén Martínez le suce derán como Superioras las Madres Encar nación Fornés y María Teresa Navarro durante los años 50 y 60 en una época de continua expansión del centro. Las niñas que asistieron al Coleqio de Nuestra Señora del Carmen durante toda esta época se identifican con un elemen to muy característico: el uniforme. Aunque ya en las primeras instalaciones de la calle Antonio Maura se usó un «delantal» a Patio del coleqio en la calle San Roque. Grupo de teatro. 1949. modo de uniforme, en 1940 se adopta uno de falda marrón con bodoques, cuello duro de color blanco y un lazo. Poco después, para completarlo, se le añadieron capa marrón y sombrero. Todo ello generaba una estampa muy característica con la que se relacionaba al colegio de las Hermanas Carmelitas. Pero, como todo, el uniforme también cambió y así el babi fue sustituido por uno de rayitas azules y el traje marrón por otro de falda de tela Príncipe de Gales con camisa blanca. Evi dentemente, este uniforme cambiaba la falda por pantalones cortos para los niños de párvulos. Este será el que herede el Centro Santa Teresa cuando abra en 1963 para abandonarlo definitivamente en los años 80. Hasta los años 50 son las hermanas quienes se encargaban de la educación de las niñas, pero las nuevas normativas exi- gen la contratación de maestros y licenciados que añadiera a la labor de las Carmelitas la titulación exigida por la ley. Con la puesta en marcha del nuevo Centro Santa Teresa en 1964 la Comunidad se reparte y parte de este profesorado se despla za dejando a la Madre Elisea Poveda al frente de un colegio que hasta 1974 aún cubre la etapa que va de párvulos a bachiller. A partir de este año, se dedicará sólo a párvulos. Madre Elisea Poveda es sustituida por Madre Lourdes Aran da en 1969 por lo que es ella quien supervisa todo este cam bio, y en 1975 vuelve Madre Elisea siendo la encargada de cerrar la Casa unos años después. Aún se utilizarán las aulas del colegio de la calle San Roque para otros fines educativos al alquilarse al Ayuntamiento en 1979 como local provisional del Centro Emilio Castelar o del Instituto Monastil. También albergó al Conservatorio Ruperto Chapí que comparte aulas con la Escuela de Música de la Madre Eli sea... De todas formas, el Colegio Nuestra Señora del Carmen, a los 43 años de su apertura, habiendo servido de nodriza a otras dos comunidades educativas, Santa Teresa y Tafalera, y con un pasado de integración en la ciudad, cierra sus puertas defi nitivamente en 1984. Además de la enseñanza oficial, la Congregación de las Her manas Carmelitas desarrolló también una labor importante en el terreno de la enseñanza no reglada a través, entre otras, de las actividades educativas desarrolladas por su Casa situada en el barrio de la Tafalera durante los años 70 y 80. Allí se trabajó en dos frentes en colaboración con el Secretariado Gitano. Por un lado se atendía a los niños en una Guardería atendida por las hermanas y por otro se apoyaba a la promoción del pueblo gita no con su participación en la construcción de un Centro Educativo y Social que pretendía la promoción de las personas que habitaban esa zona. Cerrada esta comunidad en los años 80, la labor edu cativa de la Congregación en Elda está garantizada por la existencia del Centro Educativo Santa Teresa fundado 20 años antes. Lo que nos obliga a retroceder algo en el tiempo. En 1962 la hermana Tere sa Navarro vuelve a Elda con el mismo cometido que en 1941: poner en marcha un nuevo colegio carmelita que vendría a completar la capa cidad y funciones de Nuestra Señora del Carmen. EI desarrollo industrial y urbanístico que Elda experi Grupo de alumnos. Años 50. menta a lo largo de los años 50 implica una explosión demoqráfica que incrementa el número de niños con la con siguiente demanda de puestos escolares. Las Hermanas Car melitas, conscientes de esta necesidad y para poder cumplir con las condiciones que las reformas educativas de la época exigen, se deciden a acometer en 1962 la construcción de un nuevo centro, cuya apertura ayuda a paliar la falta de instala ciones públicas, situación similar a la ocurrida en 1901. EI primer paso fue la adquisición de terrenos y a ello se dedicó la hermana Teresa Navarro apoyada por el Ayunta miento y muy especialmente por D. Luis Juan Alba, quien con siguió reunir en una sola escritura 4000 mZ en la Avenida de las Acacias, terreno suficiente para erigir un edificio en el que impartir Primera y Segunda Enseñanza. En marzo de 1963 ya están ultimados los planos de la pri mera fase y en mayo se celebra el acto de colocación de la pri mera piedra del colegio bajo una Iluvia torrencial con la presencia del Obispo, de las autoridades locales y de la Madre General, Josefina Serra. Se colocó dentro de esta primera pie dra una botella de cristal con monedas, el nombre de las hema nas y alumnas que allí estaban y se procuró colocarla donde después iría el Sagrario de la Capilla. Este centro se denominó Santa Teresa, en claro contraste con la tradición de poner los colegios fundados por la Con qregación bajo la advocación de la Virgen del Carmen. Probablemente esto se hiciera para evitar confusiones con el centro de la calle San Roque. Comienzan las obras y en el mismo 1963 empiezan a fun Alumnas con el uniforme del coleqio. 1955. cionar con un solo pabellón tan pronto como pudo habilitar los alumnos de esta etapa a Santa Teresa con un cierto males se unos locales desplazándose un par de hermanas de Nuestra tar de las familias vecinas a la calle San Roque. Finalmente, Señora del Carmen para atender a los niños de la zona que ya las mejoras que ofrecía el nuevo colegio acabaron imponiénse matricularon allí. dose, asumiendo Santa Teresa el total de la EGB. En abril de 1964 las alumnas de Bachi Ilerato junto a varios profesores y her manas ocupan ya el nuevo centro. Y en octubre celebraron un festival con moti vo de la inauquración oficial dando ya por plenamente establecido el colegio. EI Centro Santa Teresa mantiene los vínculos con Nuestra Señora del Carmen en todo momento. Si en un principio éste le sirve de «nodriza», inmediatamente comparte niveles educativos durante un largo periodo de tiempo desplazando grupos de uno a otro centro según las exigencias que en cuanto a instalacio nes tuviera el curso. Solicitan autoriza ciones y presentan memorias conjuntas para el Bachillerato Elemental, mientras el Superior se imparte exclusivamente en Santa Teresa. Y así hasta 1974 en que la entrada de la Educación General Bási ca, que ha venido a sustitutir al Bachi Iler Elemental, aconseja desplazar a todos Patio del coleqio en la calle San Roque. 1965. Edificio del actual Colegio de Santa María del Carmen. EI centro impartió también Bachiller Superior teniendo que desplazarse las alumnas junto a las de Bachiller Elemen tal a Alcoy a examinarse hasta que dependieron administrati vamente del INEM Azorín. La reforma educativa de 1974 implanta el Bachillerato Unificado Polivalente que, tras ser experimen tado un año, fue abandonado en 1975 concentrando la labor educativa del colegio en Infantil y EGB. • EI alumnado del centro se nutrió durante muchos años de niños de Elda, Petrer y Sax, dejando de venir de estas poblaciones vecinas a medida que estas ciudades pudieron ofertar pla zas escolares, sobre todo coindiendo con la entrada de la EGB, que supuso la universalización y gratuidad de la educación. Con ella desapareció también la figura de las internas y de las becadas ya que el nuevo sistema facilitaba el acceso a la edu cación de todos los niños. Si ya en Nuestra Señora del Carmen señalabamos la existencia de profesorado laico que aportó las titulaciones y cono cimientos necesarios para la educación de su alumnado, en Santa Teresa se convierte en un nuevo elemento de simbio sis con Elda. Algunos de estos profesores dejarán hondo recuer do en la memoria de sus alumnas: Emilio Maestre, Carlos Vera, Juan Colom, Francisco Coello... y tantos otros. Dado el carácter religioso del centro, la formación se com pleta con la labor de los sacerdotes de la Parroquia de San Francisco de Sales, que junto a las hermanas y profesores intentan que las alumnas reciban una formación humana más completa. Esta formación se ve cumplimentada con activida des de movimientos apostólicos promovidos por las parro .^-----_ quias o por la propia Congregación como las Juventudes Car melitas y Karit. La dotación e instalaciones de Santa Teresa distan mucho de aquellas que había en Nuestra Señora del Carmen, y de hecho las modificaciones se suceden para adecuar los servi cios, no dudando en recurrir a convenios con otros centros como es el caso del comedor escolar que durante unos años se comparte con el Colegio Público Miguel Hernández. En horario de mañana y tarde la actividad del centro se mantiene similar durante los años 80 y 90 siendo de señalar que el carácter femenino del centro, en el que los niños sólo esta ban en párvulos, se abandona definitivamente con la matrí cula mixta en todos los níveles impartidos, después de unos años en los que, curiosamente, no hubo ninqún niño en el colegio. A lo largo de estos 40 años Santa Teresa se ha adecuado a los cambios habidos. La evolución de los tiempos y del siste ma educativo Ileva al centro a ampliar la etapa de escolariza ción obligatoria hasta los 16 años, saliendo su primera promoción de Educación Secundaria en 1999, integrándose así en la red de Centros de Secundaria de nuestra ciudad. Con motivo del Centenario de la presencia carmelita, la Comunidad de Santa Teresa recibió en el año 2001 la Meda Ila de Oro de la Ciudad en reconocimiento a su labor educativa, social y sanitaria. Y el claustro, de acuerdo con los principios fundacionales de la Congregación, decide cambiar su nom bre por el de «Santa María del Carmen», recuperando la advo cación del primer colegio que abrieron en Elda en 1901. La ^ ^ ^ ^ ^ una ^ experienCia de esCUela parroquial CONSUELO POVEDA POVEDA __ ___ _ __ _ ._ mitad del siglo XX, finalizando la década de los cincuenta, aparece en Elda lo que podría mos denominar la «primera escuela infantil». Se trata de la Casa del Niño-Escuela Parroquial. Institución que inicia su andadura con un doble objetivo: ser lugar de encuentro y de juego para los niños eldenses y centro en el que los pequeños acudían desde los 3 años hasta que tomaban la Primera Comunión. Cuando finalizaban su estancia, según palabras de Da Eva luan, los niños sabían leer y«las cuatro reglas». La primera Casa estuvo ubicada en la placeta de Santa Ana, siendo responsable de la parroquia homónima D.losé María Amat Martínez. A petición de Da Carolina Amo, la casa fue ben decida por el Obispo de la Diócesis D. Pablo Barrachina, quien además contribuyó con la nada despreciable cantidad de 3.000 pesetas de la época. Los niños acudían a la escuela de 9 a 12 de la mañana y por la tarde de 3 a 6. Nos contó Da Eva Juan que que Ilegaron a tener mas de 100 alumnos que abonaban, si la economía familiar lo per mitía, la cantidad de 20 0 30 pesetas al mes. No obstante, si no se contaba con recursos, el niño no satisfacía cantidad alguna. Impartían las clases Da Carolina, Da Eva y Mari Cruz. Nin quna de ellas era maestra titulada, lo que no fue obstáculo para que, tras una inspección educativa, les diesen el visto bueno para cotinuar con la acti vidad docente. Un desafortunado día, quiso la Providencia que los niños no se encontrasen allí, ya la primera Casa, a causa de las Iluvias, se derrumbó. Después de esto, Chimo Vera, altruis tamente, les ofreció un inmueble para que continuasen con la activi dad. Esta situación provisional se mantuvo hasta que, justo al lado de la Casa derruída, se comenzaran a edi ficar dos naves que fueron amorti zándose con la organización de tómbolas y rifas. En la faceta lúdica, queremos destacar que la Casa del Niño era Eva Juan en la actualidad. obritas de teatro, contando con la especialísima colaboración de Da Matilde Insa de acompañamiento al piano. Cabe decir que cuando dicha señora se ausentó de nuestra ciudad por motivos familiares, recogió el tes tigo musical nuestra paisana Mari Carmen Segura. Estos montajes tea trales siempre estaban dirigidos a alguna causa benéfica, tanto para Elda como para toda la comarca, puesto que en infinidad de oca siones lo recaudado se destinó al Asilo de Ancianos de nuestra vecina Monóvar. Asimismo, se organizaban sesiones de mario netas los fines de semana, siendo manipuladas por Ana Rosa Tamayo y su hermano. También contaba la Casa del Niño con un magnífico equipo de cine de 16 mm, siendo los sábados, domin gos y lunes los días elegidos para las proyecciones. EI deporte no había caído en el olvido, ya que un equipo de fútbol en el que jugaba Juanito Vidal cometió la proeza de ganar un encuentro al equipo de los «flechas». La Casa del Niño estuvo en activo hasta que los cauces edu cativos recondujeron esta altruista labor docente por los sen deros que marcaban las diferentes reformas educativas, según las cuales era preceptiva una titulación específica del profeso rado y que los centros estuviesen dotados de una serie de servicios de los que carecía la Casa del Niño. Da Carolina (primera por la izquierda) y Da Eva (primera por la derecha) con los alumnos de la ese lugar donde se representaban ^asa del Niño. ^ °r^^^ ^ ^ ^ ^ a tres de mis profesores de Bachiller VICENTE ALARCÓN ^UAN oy a hacer una descripción muy subjetiva, pero con una mención de cariño y respeto, sobre tres de mis profesores que pasaron por la Academia de Bachillerato de D. Jesús Andrés Sinobas durante los primeros tres o cuatro cursos, entre los años 1945 y 1949. D. Alonso Gordillo era nuestro maestro en la rama de letras y para mí un buen educador, dentro de los mejores que pasaron por mi vida. Creo que en Elda tuvimos una gran suerte al acogerlo entre nosotros pues, si no hubiese sido perdedor y depurado después de la guerra, sus brillantes estudios le hubiesen Ilegado a situar como catedrático eminente en alguna de las más importantes universidades del país. D. Pablo, sacerdote, era profesor de Religión. Desde el primer momento, el clérigo no cayó bien a los chicos pues parecía que en clase éstos no le interesaban, entiéndase bien, como alumnos. Sus gustos, preferencias y enseñanzas iban dirigidas hacia mis compañeras, entre las cuales departía con asiduidad su interés y deferencias y nosotros solo éramos algo casi ajeno a los que tenía que atender casi con disgusto y, en todo caso, la diana de sus enfados y castigos: por alborotar en clase, por no sabernos las lecciones o por otras causas, por suerte, sin Ilegar a golpearnos nunca. Y si eran las chicas las que debían ser castigadas, sus reconvenciones eran casi paternales y en un tono que nunca Ilegaba al airado y elevado con el que se dirigía a los varones cuando caíamos en idéntico hecho, acreedor de una reprensión severa. D. Iqnacio, el profesor de Francés. Apareció en Elda casi como por ensalmo o generación espontánea. EI día que D. Jesús nos dijo: «os voy a presentar a vuestro profesor de Francés, esperad un momento que ahora vuelvo con él», salió de la clase e inmediatamente volvió a entrar por la puerta sequido de una persona que nos era completamente desconocida; desde luego no era de Elda y si lo era habría estado alejado del pueblo durante muchos años porque una vez visto no se podría olvidar jamás. Su aspecto, su figura y el modo cómo iba vestido era tan singular que quien lo viera por vez primera seguro que lo fotografiaría para siempre en su mente, como creo que nos ocurrió a todos, y aun sin querer soltaría la carcajada. A nosotros, con D.lesús presente, ni se nos ocurrio reírnos. Y ahora, como parte integrante de ese curso, paso a describirlo no sólo físicamente, sino especulando sobre qué clase de vida podría haber tenido hasta Ileqar a la situación presente. Me pareció que era un hombre solitario en aquellos momentos, quizás hubiera tenido familia antes que, por motivos desgraciados, estuvieran muertos o separados de él definitivamente. No lo Ilegué a saber nunca, aunque tenía la pinta de ser un solterón, porque, así como Ileqó inesperadamente, del mismo modo desapareció de mi vida e incluso de Elda. Casi aseguro que no Ilegó a terminar como profesor mi primer curso de Francés y, si lo hizo, desde luego en el segundo no recibí sus enseñanzas. Tampoco tuve en mi relación escolar con él indicios para saber si efectivamente era enseñar Francés su profesión adquirida con un título académico, que lueqo muchos años más tarde averig ŭ é que, efectivamentea antes de la Guerra Civil era catedrático de dicho idioma en un instituto de bachillerato en Alicante. Pero como perdedor fue depurado para, bastantes años, después ser repuesto en el lugar que le correspondía en un colegio de Alicante, e incluso Ilegó a casarse. Pero al principio, sin tener conocimiento de su vida anterior, me forjé con un poco de imaginación por mi parte y al ver su aspecto que, debido a su estancia en Francia, sus colonias o el Marruecos donde el idioma hablado era éste, se dedicaba a dar clases de la lengua qala como una manera ocasional de ganarse la vida. En fin, me quedé con las ganas de saber la nacionalidad que tenía. Creo que era español aunque también podía ser francés; lo que sí puedo asegurar es que parecía un pobre de solemnidad, medio muerto de hambre que sólo Dios y él podían saber por las calamidades que había pasado o estaba pasando y a saber las condiciones en las que había Ilegado hasta ser nuestro profesor. Ahora voy a describir su aspecto físico que a primera vista daba risa. Era muy alto, delgadísimo, desgarbado y desnutrido y muy mal vestido. EI traje, arruqado y brillante por el uso en algunos sitios, con algunas que otras manchas, le venía pequeño. Las mangas de la chaqueta, al igual que los bajos de los pantalones, eran cortas para unos brazos y piernas tan largos. Las primeras se continuaban con los puños de una camisa que finalizaban en unas manos huesudas y muy grandes y, por encima de los zapatos, se veían unos calcetines que generalmente no hacían juego con el resto de su vestimenta, con unas canillas delgadas que unos centímetros más arriba se cubrían con el final de los pantalones. Calzaba unos zapatones muy usados con cordones viejos y, como en uno de sus pies padecía de un juanete grande, que el zapato muy holgado era incapaz de ocultar, él lo había solucionado haciendo un agujero en la piel del zapato por el Grupo del tolegio de D. Jesút. 1946. (Archivo Alboradaj. que lo dejaba emerger recubierto por el calcetín para evitar que le hiciera daño. Podíamos adivinar que quizás no tuviese otra camisa que la que Ilevaba en aquellos momentos y que el cuello y los puños fueran postizos y tuviera algunos más para podérselos cambiar cuando se ensuciaran. En este aspecto, daba la impresión de ser un chupatintas como los empleados del Estado y de algunas sociedades mercantiles como bancos o entidades financieras que eran tan pobres que ni siquiera en su trabajo, que obligaba a un cierto decoro de persona bien vestida, Ilevaban camisa y aparentaban Ilevarla bajo la chaqueta con una pechera, un cuello postizo, corbata y unos puños también postizos, cosa que por cierto había visto sucedía en algunas escenas de películas con mísero protagonista. Bastante feo, no sólo de cuerpo sino también de cara, sus facciones alargadas y huesudas también eran sorprendentes; ya no era joven, tendría treinta y cinco años o más, pero intentaba aparentar menos con un pelo escaso neqro en que terminaba su cabeza, peqado con gomina desde la raya de un lado y cruzado al otro tapando una pronunciada calvicie, de la que descendía una frente amplia terminada en unas cejas normales bajo las cuales aparecían unos ojos grandes y saltones que se acompañaban de unas orejas también enormes. En el centro de su rostro, brillaba una nariz afilada debajo de la cual se iniciaba en su labio superior un bigote de tipo daliniano no muy exagerado con sus dos guías cortas terminales dirigidas hacia la parte superior de unos pómulos muy marcados. Su boca, normal de labios no muy pronunciados, dejaba entrever una dentadura algo cuidada con un diente postizo de oro. Todo esto, unido a su vestimenta y aspecto ridículo o extravagante, me hace ahora recordarlo con cierta añoranza y cariño. Para terminar la relación que en mi vida tuve con este personaje sólo me queda comentar, como anécdota, una faceta del modo que tenía de darnos las clases. Era un señor como se supone que quería demostrar seriedad en su forma de tratarnos y en su clase aprendimos algo de vocabulario, a leer y nociones de gramática y ortoqrafía francesas. No tengo mas remedio que hacer referencia a mi querido compañero ya desaparecido Fernando Vera, porque D. Ignacio la tomó con él. En una de sus explicaciones, hablando sobre la conjugación de los verbos franceses, nos enseñó que al hablar o al leer en voz alta la -ent final de los verbos no se pronunciaba y así lo intentamos hacer. Pero al principio, al equivocarnos, D. Ignacio, que siempre Ilevaba un puntero muy largo de más de dos metros de longitud en una de sus manos, no recuerdo si tenía otra función que la que voy a relatar, golpeaba al pobre Fernando en la cabeza y éste saltaba como un resorte y decía gritando: «la -ent del final de los verbos no se pronuncia». Nosotros nos reíamos con grandes carcajadas y, aunque aprendimos la lección, en nuestras lecturas las pronunciábamos a propósito con tal de ver golpear a nuestro compañero con el puntero y responder él de la forma descrita como un muelle a tal golpe con la respuesta ya comentada. L a L ra sin pa ^ no entra f3AFAEL FiERNÁNDEZ PÉREZ unca pensé que, con el paso del tiempo, yo sería uno de esos niños de la Ilamada generación per dida de los años cincuenta, perdida, sin duda, por el escaso interés que se tomaron las autori dades educativas de aquellos tiempos, cuando la inmensa mayo ría de niños íbamos a lo que se dio en Ilamar «escuelas del gobierno»: sólo unos pocos privilegiados estudiaban en colegios de pago y serían los que, con el paso del tiempo, detentarían los poderes económico, social y político de la ciudad. Otros ya no tan niños Ilegaron a conocer y a añorar profundas y efimeras reformas del tiempo de la I I República, especialmente las intensas experiencias vividas en las Escuelas Graduadas, pero éste era un asunto tabú. Unos, por miedo, callaban sus conoci mientos y vivencias de la Escuela Racionalista, por ejemplo; otros fueron absorbidos por el oscurantismo del Régimen; para casi todos, el mayor afán en la décadas de los cuarenta y cincuenta del pasado siglo era tener de qué comer. Sin duda, el poder trabajar en los zapatos era la mayor preocupación en la Elda de aquellos años. La escuela de los años cincuenta. Recuer do que, en 1951, tenía yo cuatro años, mis padres ya intentaron meterme en la escuela unitaria situada en el Monte Calvario, cono cida antiguamente como la Escuela de la calle Convento. Lo consiguieron en 1952 sacándome de la «costura de cagonicos» qué había en la calle Tenerías, que no era otra cosa que una casa particular que funcionaba como una guardería cutre donde una señora nos tenía sentados en una grada que parecía un gallinero. En el Monte Cal vario, comencé mezclado con otros niños, sólo niños, de edades com prendidas entre los cinco y los catorce años, aunque de los mayores había muy pocos. Una vieja estufa de serrín, que nosotros mismos preparábamos, presidía el fondo del pasillo central, cerca del maestro. A sus espaldas , una a cada lado, había dos descomuna les pizarras donde, a primera hora, escribía la consigna del día, por ejemplo: «La fe mueve montañas». A continuación, el maestro Ilenaba las pizarras de interminables sumas y restas y otras operaciones más complicadas que teníamos que resolver en función de la edad de cada uno. Mientras unos resolvían problemas inve- rosímiles sobre un sujeto que compraba una mercancía de vasos a 035 la unidad, otros escolares se aplicaban con atención al dic tado de algún texto leído por el maestro. Cuando el frío era insoportable y apenas acudíamos a clase una docena de alumnos, nos sentábamos alrededor de la vieja estufa y nos calentábamos los sabañones con el vapor que des prendía un viejo bote de conservas Ileno de agua caliente. Mien tras, don Manuel nos contaba alquna historia o nos incitaba a ir a la pizarra a ver si lográbamos pintarle, con los ojos tapados, el rabo a un cerdito. Las tediosas tardes del verano se hacían inaca bables cuando leíamos en fila, uno tras otro, fragmentos del Qui jote o de Corazón, de Edmundo DAmicis, facilitando, con nuestra cansina cantinela, la siesta del maestro. Cuando el maestro estaba Plantilla de la fábrica de calzado de José Bernabé Orgilés en 1958. Obsérvese la gran cantidad de niños en edad escolarque ya están integrados en la fábrica. (Archivo Alborada). totalmente dormido, nosotros empezábamos nuestra particular guerra de lanzamientos de papeles, aviones y otros objetos con las gomas de las carpetas. Las excursiones a la erica San Pedro algu nas tardes de primavera, las salidas al Cine Rex a ver películas de santos y alquna que otra salida a la Iglesia de Santa Ana, ya fuera porque era Miércoles de Ceniza o porque venía algún predicador, constituían todas las aventuras extramuros del colegio. Dentro, el rezo del Rosario, los cantos a la Virgen de Mayo -«Venid y vamos todos, con flores a María...»- y las fre cuentes visitas de los seminaristas para cap tar adeptos, qeneralmente por San losé, Ilenaban casi todas las actividades extraescolares, sin olvidar los cantos de himnos patrióticos, ya fueran el Himno de la Legión o el Cara al Sol, que nos ponía en la calle a las cinco de la tarde con un rosco de pan y dos onzas de chocolate en la mano. Clase unitaria de D. Manuel Martínez en las Escuelas Nacionales de Monte Calvario, curso 1954-55. Remarcado con un círculo, el autordel artículo. Cuando me trasladé al coleqio de la calle Ramón Nocedal, recién inauqurado, creo que en el curso 1955-56, y que estaba reqentado por D. Rafael Mas, descubrí la leche en polvo qracias a la ayuda americana. Recuerdo que me Ilevaba un sobre de canela para poder traqarme aquel líquido Ileno de qrumos que ni siquiera se licuaba del todo con el aqua caliente que una vecina vertía en un lebrillo y que removíamos nosotros mismos. Los escasos juquetes que se repartían en vísperas de Feria o Reyes eran de poco valor: una pelotita de qoma, un rompe cabezas de cartón, un motorista de hojalata que se movía con cuerda... A veces, nos tocaba ir a recoqerlos a las Escuelas Nue vas. Allí, yo notaba otro nivel, otro estilo, en los alumnos, tal vez por aquello de los qrados, las clases. En mi escuela, no había esas cosas. De todos modos, la calle, en este caso la industria del cal zado, nos recibía pronto, las más de las veces, cuando tenía mos ocho o diez años, para ser aprendices de zapateros y, así, hacernos hombres de provecho, ya que los oficinistas, botones de banco, dependientes y otros no eran considerados buenos oficios porque, entonces, no qanaban tanto como los zapate ros, como se encarqaban de remacharnos nuestros padres. Había un cierto desprecio hacia el estudio. Recuérdese el refrán de la época: «Pasa más hambre que un maestro de escuela». Alqunos completábamos la dura jornada laboral de once o doce horas con la asistencia, por la noche, a las clases que alqún maestro daba en su propia casa, qeneralmente un repre saliado político dzsposeído del título o una persona muy pre parada. En este aspecto, quiero recordar, entre otros, a D. Anto nio Mirambell, oriundo de Monforte, o al bueno de Rubén, que acudía a las casas en bicicleta para dar clases a domicilio. Estas personas desempeñaron un papel muy importante, pues nos mostraron, con sus explicaciones y experiencias, la cruda rea lidad educativa que vivíamos en aquel réqimen político cas trador de ilusiones que tuvimos que padecer. Tras un paso efímero por la escuela de paqo de D. Jesús, en la Plaza de Saqasta, cumplí con el inevitable destino, al iqual que otros muchos amiqos. Todos terminamos cruzándo nos por las calles acarreando carretillas o capazos Ilenos de pares de zapatos procedentes de fábricas y talleres de cosido, enton ces en ebullición y en plena pujanza qracias a una explota ción infantil muy propia de la época y que contribuyó al despeque industrial de los años 50 y 60. Como hombres pre maturos, rememorábamos aquellos tiempos de cuando éra mos niños e íbamos al coleqio. Teníamos entonces unos diez años de edad, pero la escuela ya era alqo lejano, una especie de paraíso perdido que nunca recuperaríamos. Esta qeneración perdida, mencionada al principio y en la que me incluyo, fue la que reivindicó, en la transición demo crática, una educación pública, diqna y al alcance de todos para nuestros hijos, una educación que nosotros nunca tuvi mos en un tiempo oscuro y Ileno de carencias en el que se aplicaba eso de que la letra con sanqre entra sin tener en cuen ta que, sin pan, no hay letra que valqa. Grupo de 2s curso de Bachiller Elemental con el padre Abad. Curso 19d8-d9 del Cale^io Sagrada Familia. Y en eso llegaron EI padre Feliu en Brasil, fotografiado en 1992. LUIS ESTEVE ^BÁÑEZ bamos por la sequnda mitad de los sesenta cuando los alumnos de la Saqrada Familia vimos marcharse al desiqual qrupo de curas del Obispado e irrumpir a los Padres )esuitas. Pronto distinquimos a sus líderes, el padre Parra y el padre Feliu, siendo los demás (hermanos Font y Baltasar; padres Abad, Remiqio,Yaqo, etc..) los peones en el desplieque de la «Compañía». Los jesuitas parecían interesados en actualizar la educación, aplicándose sin reparos en estimular la sensibilidad de los muy escarmentados -a causa de las desilusiones acumuladas- alumnos. Convivencia, vocación de servicio, aleqría, apoyo a los más débiles y no sólo «esfuerzo» eran alqunas de sus consiqnas. Se mostraban dispuestos para la «obra». Vicente Parra, natural de Oliva y primo del actor homónimo -como su rostro delataba-, sería el astuto director de finos modales. Una calva precoz y perfecta, el pitillo de rubio emboquillado y las gafas Ray Ban singularizaban su aspecto. EI conocimiento de la actualidad y la formación psicológica le permitían elaborar brillantes prédicas. Apólogo pragmático de las nuevas tecnocracias, él se ocuparía en deslumbrar a las élites locales, haciéndoles ver lo conveniente de aunar las bondades del Concilio Vaticano II y el sistema meritocrático de las clases medias. Nosotros, empequeñecidos ante su intelectualismo, supimos ipso facto que era reacio al recurso de la bofetada. Tomas Feliu, el padre Tom, con un físico entre Sócrates y Sansón, tenía el carisma del gordo de Bonanza y unos pelirrojos cabellos desgreñados. Había nacido en Pollensa, en el seno de una familia numerosa y adinerada. Tras abrazar el misticismo en el monasterio de Veruela, estudió Filosofía e Idiomas y pasó en Cuba toda la Revolución. Allí fue castigado al fusilamiento y, quizás por los mismos méritos, exculpado y condecorado personalmente por Castro. Trabajó también de capellán con la selección nacional de fútbol durante el Campeonato Mundial de Londres, pudiendo admirar la grandeza del pequeño y viejo Gento. Vitalista, solía correr las carreteras sobre una enorme y negrísima motocicleta Sanqlas. Ya en la Sagrada, se acompañaba de Boy, un torpe pastor alemán. A Feliu le gustaba jugar al fútbol tanto como comer fruta, pero su gran ilusión era irse a la India de misionero. ÉI se encarqaría de poner en marcha la liga de los equipos de empresa, y en tomar contacto con los ambientes dinámicos de la juventud y de los trabajadores de la ciudad. A su Ileqada a Elda, yo estudiaba en el curso de los niños de nueve años. A ambos los conocí posteriormente, en especial, en sendos veranos que recorrimos la Comunidad Valenciana con Vicente, y la isla de Mallorca con Tom. A comienzos de los setenta, el primero pasó a detentar puestos directivos en Zaragoza y Palma, mientras que el segundo, de épica biografía, eligió ponerse al lado de los desheredados en el noroeste brasileño (que se sepa, ya han atentado cinco veces contra su vida los terratenientes y él, terco, no pierde su bendita y descarada sonrisa). iSe propusieron aquellos jesuitas azuzar nuestra rebeldía o, más bien, terminamos cayendo en la indocilidad precisamente en su contra?. De hecho, el conformismo anduvo espantado por una larga temporada. Puede ser que en la Sagrada Familia no estudiáramos demasiado y que exprimiéramos la libertad de maniobras que sus amplias instalaciones nos granjeba a unas docenas de favorecidos chavales, amantes de la escapada. Ellos, paternalistas y previsibles, transmitían unas historias que poco tenían en común con el sofocante transcurrir de los cursos en las catacúmbicas academias. Fuese una epopeya o puro vaho en el cristal invernal de la memoria, la primera peripecia de los jesuitas concluyó al ser redestinados a otros frentes: el Parra, con los guantes blancos, y el Feliu, con su volcánico pecho. LDieron a Elda por ganada, o por perdida?. Alumnos de la Sagrada Familia en una excursián a las cuevas de San José, en Vall de Uxb, en el mes de )ulio de 1970. Aparecen el padre Parra (destacado en el circulo) y el hermano Font (con ^afas neqras). Las ^ nsenan edia e n E ld a ^OSÉ CASAO LUCAS comienzos del siglo XX, las inversiones en enseñanza eran todavía muy raquíti cas. José Luis Bazán nos recuerda en su Historia de1 colegio «Padre Manjón» que los maestros tenían que ense ñar en locales alquilados y en condiciones demasiado precarias. Y serán las Hermanas Carmelitas las que en 1901, tras un breve periodo pasajero en la Casa Parroquial de la calle Colón, inicien este servicio para las niñas en una de las casas más dignas de la calle Antonio Maura, -entonces calle Esperanza-, según detallan Emilio Maestre y Luis Maes tre en Cien años de presencia carmelita, tras ladándose a la calle San Roque en los años cuarenta tras el paréntesis de la Guerra Civil. Lo importante y decisivo para sobrevivir era Interior del I.E.S. La Torreta, anteriormente Centro de Formación Profesional. aprender los oficios y éstos no se aprendían en los coleqios; leer y escribir no dejaba de ser un lujo que no todos se lo podían per mitir. Tendremos que esperar al año 1932, tras veinte años de esfuerzos y dedicación, para que Elda pueda inaugurar las Ila madas «Escuelas Nuevas», en el Colegio «Padre Manjón», y pueda así disponer de una infraestructura de calidad dedicada a la enseñanza. Por ellas han pasado muchas de la generaciones eldenses que en la segunda mitad del siglo XX han Ilevado a cabo la gran transformación de la ciudad. Esta circunstancia justifica sobrada mente el interés y el coste que está suponiendo el mantenimien to de su fachada en la actual remodelación. Tras la Guerra Civil, la Ley de Bases de la Organización Sindical del 6 de diciembre de 1940, establecía la necesidad de procurar el perfeccionamiento profesional de la juventud trabajadora, según el Estatuto de Formación Profesional promulgado en 1928 en tiem pos de la Dictadura de Primo de Rivera. En esta línea, en 1941 en España sólo había inscritas 6 Escuelas de Formación Profesional, en 1945 ya constan 36, entre ellas en Alicante la Escuela de Banca y Bolsa y en la provincia las Escuelas de Formación Profesional de Elda, Benisa, Ibi, Villena y Monóvar. En Elda se trata de la Escuela de Formación Profesional de La Torreta que en un principio se sitúa en las Escuelas de «Padre Manjón» y cuya estructura era de un curso de Orientación, otro de Especialización y un tercero de Perfeccio- namiento. A partir de la década de los cincuenta. En la década de los cincuenta, España comienza a salirdel aislamiento a que había sido sometido el réqimen franquista, y el Gobierno está obligado a comenzar a adecuar sus estructuras al entorno europeo. Por lo que a la Formación Profesional se refiere, la Ley de 20 de julio de 1955 establece los estudios de Oficialía y Maestría Industrial, que se establecerán en el Centro de Formación Profesional La Torreta que, desde 1952, había dejado ya las instalaciones del coleqio público Padre Manjón. Por otro lado, siendo ministro de Educación D. Joaquín Ruiz Giménez, la Ley sobre Ordenación de Enseñanza Media de 26/02/1953 modifica los Bachilleratos Ele mental y Superior, implantados ya en la Ley de Reforma de la Segunda Enseñanza (20/09/1938), que abrirán el paso a la Uni versidad a las generaciones que en la actualidad andamos entre los 40 y 60 años, y que tan añorados resultan en tantas conversa ciones. Entonces sí que había auténtica exigencia, se comenta. Nadie podía pasar el examen de inqreso con más de tres faltas de ortografía.Y qué decir de la reválida de 4°, ésa sí que era una prue ba que aseguraba que sólo pasaban los que realmente estaban preparados. Naturalmente, todos los contenidos, especialmente los de Historia y Literatura, tenían que estar revisados y aprobados por el régimen político y todavía podemos recordar la asiqnatura de Formación del Espíritu Nacional, estudiando sobre unos tex tos lujosamente editados y con una calidad de estilo difícil de superar por haber nacido de la mano de Gonzalo Torrente Ballester, catedrático de Literatura del Ins tituto Nacional de Enseñanza Media de Sala manca, y que posteriormente aparecería como una de las mejores plumas de la nove la española. Elda por aquellos años ya había fijado su dedicación al mundo del calzado, pero será en los años sesenta en los que se fra gua el periodo de mayor desarrollo indus trial, demográfico y urbanístico de toda su historia. A pesar de ello, los jóvenes elden ses que desean superar los estudios pri marios tienen que servirse de centros privados como la Academia de D. Emilio y la «Academia del Cristo del Buen Suceso», ubicada en el solar del recién construido edificio D. Eliso, teniéndose que desplazar hasta Alcoy para superar los exámenes de los catedráticos de su Instituto. Es precisa mente en el año 1963 cuando, por una parte, se funda en el actual emplazamiento el Colegio Santa Teresa, hoy denominado Santa María del Carmen, regido por las Carmelitas, independien te de su centro en la calle San Roque, para dedicarlo a las niñas que deseaban cursar estudios de Bachillerato. Y por otra, algunos ciudadanos eldenses, qracias a su inquietud cultural, avalan la construcción del colegio que a los dos años quedará en propie dad de una entidad financiera, tomando el nombre de Colegio Sagrada Familia y asignando su dirección a los jesuitas, y pro porcionan así a los vecinos eldenses la posibilidad de realizar los estudios de Bachillerato. Pero los estudiantes de estos centros tení an que desplazarse hasta Alcoy para realizar los exámenes de ingreso y reválidas y sólo preparaban para los cursos del Bachi Ilerato Elemental. Eran centros libres reconocidos cuyas calificaciones tenían que ser visadas por el profesorado oficial. Sólo los alumnos de familias con un respaldo económico sólido, o beca dos, podían permitirse el lujo de residir en Alcoy para continuar con el Bachillerato Superior. Debido precisamente a este desarrollo, se genera en Elda la necesidad de facilitar a los hijos de las familias eldenses y de tan tas Ileqadas de otras regiones españolas el acceso a estudios de Ense ñanza Media que al mismo tiempo les permitiese su continuación en los estudios universitarios. Y nos encontramos con un hecho que puede convertirse en un símbolo por la relevancia que en sí mismo tiene y por el precedente que genera. Para resolver esta necesidad, los Ayuntamientos de Elda y Petrer -entonces todavía «Petrel»- acuerdan aunar esfuerzos y crear un Instituto de Enseñanzas Medias que satisfaga los deseos de ambas poblaciones y de los pueblos de la zona como Sax, Monóvar, Novelda, Salinas y otros. Su génesis es analizada minuciosamente por Pascual Díaz Amat ^ Clásico texto de Gonzalo Torrente Ballester para la antigua asignatura de Formación del Espíritu Nacional. en su obra La enseñanza en Petrer. Con este fin, se constituye una comisión formada por Nicolás Andreu Maestre, entonces Alcalde, José Luis Perseguer de Castro, Evaristo Pla Medi na y Gabriel García Romeu por parte de Petrer, y por parte de Elda, el Alcalde Antonio Porta y el Delegado de Educación Anto nio Tamayo Maestre, que deciden adquirir al 50% entre ambos municipios 10.032 mz del término municipal de Petrer ubicados en la zona de la Frontera y ponerlos a disposición del Ministerio de Educación para construir lo que Ilegará a ser el Instituto Nacional de Enseñanza Media Azorín. Curiosa mente, al final de la Ilamada Gran Avenida de Elda durante muchos años se conser vaba una señal indicativa de dirección con la leyenda IN EM, que desde hacía ya mucho tiempo correspondía al Instituto Nacional de Empleo, y hasta hace poco la dirección oficial del Instituto ha sido C/Prolongación de General Monasterio (después Pablo Igle sias) s/n, de Elda, y todavía los números de teléfono asignados dan algún que otro pro blema. Esta confusión fundacional viene justificada porque en aquellos años nadie podía imaqinar todavía la gran expansión urbanística que iba a desarrollar Petrer en los años siquientes, y de alguna forma viene a ser símbolo al mismo tiem po de la integración y simbiosis que se ha constituido en ese mismo centro entre los adolescentes de ambas poblaciones. EI Instituto Nacional de Enseñanza Media Azorín comienza a funcionar el 21 de octubre de 1967 ejerciendo de directora Da Ma Foto aérea del Instituto Azorín, que comenzó a funcionar en octubre de 1967. nieros, profesores de instituto y de universidad, maestros.. ? Como dato anecdótico, curioseando la lista de la primera promoción que se presenta al curso de Preuniversitario en el curso 1967-1968, me encuentro con el nombre de José Blanes García, presentando el mejor expediente de la promoción, actual Catedrático de Latín del Instituto y conocido por todos los eldenses por su dedicación a la Fiesta de Moros y Cristianos. Podríamos extrañarnos de algunas normas en vigor en esas fechas como es la separación de los alumnos por sexo en las aulas, las niñas en el ala derecha y los niños en la izquierda. Naturalmente esta norma también era aplicable en los cole qios privados: el Centro de la Sagrada Familia era sólo para chicos y el de las Carmelitas para niñas, pues sólo admitía niños en el parvulario. Y como dato también indicativo, tenemos que hacer cons EI I.E.S. La Melva, que desde 1968 alberq ĉ la Escuela de Aprendizaje Industrial, tar que en el Instituto se había dejado una depen fue reformado integralmente a principios de los años 90. dencia específica para capilla, y que como consta Teresa Soler Pastor. EI primer claustro que consta en el libro de actas se celebró el 6 de noviembre y se relaciona el siguiente pro fesorado: Emiliano Herráez Pérez, Jesús Rodríguez Marín, Emilio Maes tre Guarinos, Celia Martín de Valmaseda, Aureliano Redondo, Hipólito Navarro, Encarnación Muñoz Pueo, Consuelo Serrano Navajas, Pilar Espejo, Juan Guill, Celia Rodríguez, Vicenta Sebas tián, Tomás Payá, Ricardo Vicedo López, Francisco Coello, Carmen Mansilla, Ana Ferrando, Yolanda Villaplana, Juan Escámez y el sacerdote Antonio Poveda Maciá. Un total de 21 profesores de los cuales todavía está en activo en este mismo centro la profesora de Música Ana Ferrando. Supongo que a muchos lectores algunos de los nombres les traerán muchos recuerdos. Después han sido directores entre otros Jesús Rodríguez Marín, actual Rector de la Universidad Miguel Hernández de Elche, Jacinto Lozano Escriba no, Francisco García Úbeda, Carmen Alonso, Felisa Pérez, Celesti no Vicedo, Luis Antonio Villada, José Candelas, Joaquín Laguna Blasco actual director del IES Poeta Paco Mollá, siendo el director actual losé Casao Lucas. Ya en el primer curso de matrícula, curso 1967-1968, constan un total de alrededor de 500 alumnos, aumentando en el siguiente curso a 750. EI sistema educativo vigente en esas fechas constaba de un examen de ingreso a los 11 años, que daba acceso al Bachi Ilerato Elemental para el que era requisito indispensable aprobar la reválida de 4°, a la que seguirían los dos cursos de Bachillerato Superior, Ilamados 5° y 6° cursos, y tras pasar la reválida de 6°, podía cursarse el Preuniversitario, que tenía que ser aprobado completamente para pasar a la Universidad. Demasiadas barre ras para comenzar a estudiar. LCuántos profesionales de Elda y Petrer han pasado por estas aulas bien para dedicarse a la industria del calzado o bien para continuar sus estudios en la Universidad: médicos, abogados, inge __ _ ____ _ __ en el segundo claustro de profesores celebrado, a instancia del P. Poveda, Director Espiritual, se fijan los días 3, 4, 5 y 6 de abril para realizar los Ejercicios Espirituales. Éstos consistían en unos días dedicados exclusivamente a char las religiosas, meditación, confesión y penitencia, en los que el silencio era el marco imprescindible para su desarrollo. Por otra parte, el horario lectivo se extendía de lunes a viernes por la maña na y por la tarde, y el sábado desde las nueve hasta la una del mediodía. Qué difícil es imaginarlo en nuestros días. Cuando en la década de los setenta se implantó la Ilamada «semana inglesa» que terminaba el viernes por la tarde, no nos lo podíamos creer. La ley del 70 (Ley de Villar Palasí). Es la estructura que han seguido quienes actualmente están entre los 20 y 40 años. Es la primera ley que establece de una forma explícita la obliqatoriedad y gratuidad de los años escolares que com prendía desde los 6 a los 12 años, en los que se establecen los ocho cursos de la Enseñanza General Básica (EGB) que se impar tían en los colegios. Tras ellos, los alumnos que no obtenían el Título de Graduado Escolar podían acceder a los estudios de For mación Profesional que estarán regulados por la Orden de 13 de julio de 1974 y el Decreto de 23 de agosto de 1975, en donde se establecen los planes de estudios del Grado 1 y Grado 2, respec tivamente, de Formación Profesional. Los alumnos que superaban con éxito la EGB podían continuar con los tres cursos del Bachillerato Unificado y Polivalente (BUP) y el Curso de Orientación Universitaria (COU) que se impar tía en los Institutos, que pasan a denominarse Institutos de Bachi Ilerato. Es una etapa muy importante en España por lo que se refiere a su desarrollo político y social, ya que se produce el paso a la democracia y en él se forman las generaciones que van a regir la política en los próximos años. C ĉ . , EI Instituto Nacional de Enseñanza Media «Azorín» pasa a Ila marse Instituto de Bachillerato «Azorín». Y es en esta época en la que se inaugura en, 1968, la Escuela de Aprendizaje Industrial de Elda, ubicado en La Melva con las especialidades de Piel, Metal y Electricidad, y en 1979 el nuevo Instituto de Bachillerato Monas til para acoqer a la creciente población eldense. La Ley de190 (Ley Ordenación General del Sistema Educativo.- LOGSE) . Ha sido la innovación educativa que más resonancia social ha tenido gra cias a la implantación generalizada de la enseñanza gratuita en España y al gran desarrollo de los medios de comunicación. Su qénesis se había anunciado ya con la victoria electoral del Partido Socialista Obrero Español en el año 1982, y se delineó en la década de los ochenta dentro de una gran ilusión en los medios educativos. La ley pretendía cubrir dos necesidades urgentes: por una parte, extender la obligatoriedad y qratuidad de la enseñanza desde los catorce hasta los dieciséis años, puesto que hasta esta edad la ley no permitía inteqrarse en el mundo del trabajo; y por otra, resolver el declive que había sufrido la Formación Pro fesional que, tras la función social que había ejercido hasta los años 60, con el progreso social de la sociedad española había desembocado en una escisión de consecuencias desastrosas entre los estudios de Bachillerato y Universidad a los que tenían acceso los que aprobaban EGB, y los estudios de Formación Profesional a donde caían prácticamente sólo los que no obtenían el Título de Graduado Escolar. La LOGSE nace sobre una estructura conceptual que abría gran des ilusiones: • Comprensividad: todos los alumnos recibirían una formación troncal común que comprendería los aspectos teóricos tradi cionales como la Lengua, las Matemáticas, etc. y los aspectos prác ticos como la Tecnoloqía y la Informática. La separación vendría después de la etapa obligatoria. • Inteqración: sólo en casos extraordinariamente graves los alum nos recibirán la enseñanza en colegios especiales. Minusvalías de cualquiertipo, retrasos de madurez, diferencias culturales y sociales, todos tendrán que ser atendidos en los colegios ordinarios. • Educación en el sentido más amplio: los obje tivos de la enseñanza no se han de limitar a los contenidos como se venía haciendo tra dicionalmente, sino que tenían que incluirtam bién los aspectos de los procedimientos (los alumnos tenían que aprender a hacer las cosas), y de la actitud del alumno dentro del entorno social. En este sentido las distintas áreas se completaban con unos temas trans versales comunes a todas como son el cuidado del medio ambiente, la educación la paz, la educación sexual, la educación vial, la igual dad entre los sexos y la educación para la salud. • Constructivismo: la enseñanza ha de ser personalizada y ade cuada al nivel de cada uno de los alumnos, para lo cual el pro fesorado deberá de conocer el nivel inicial de los mismos y permitir así que los nuevos conocimientos engarcen con los ya asentados permitiendo así la construcción del edificio inte lectual. • Aprender a aprender: lo importante no es memorizar datos. Los tiempos cambian con mucha rapidez. En una década la configuración de Estados de un continente puede transfor marse profundamente. Lo importante era aprender a actuali zar constantemente sus conocimientos. • No competitividad: se pretende una integración social sobre valo res de cooperación y solidaridad frente a la competencia. Las calificaciones no son numéricas, sino conceptuales: Progresa o no adecuadamente, Insuficiente, Suficiente, Bien, Notable, Sobre saliente. Sobre estos conceptos aparecieron términos absolutamente novedosos que desconcertaban tanto al profesorado como a la sociedad en general: Adaptaciones curriculares, Informes individualizados, Evaluación formativa, Evaluación Sumativa, Promo ción Automática, Diversificación Curricular, Programa de Adaptación en Grupo y otros. Estas bases exiqían una gran transformación del mundo educativo: Los colegios tenían que adecuarse a las nuevas necesida des en cuanto a los espacios, y dotaciones y el profesorado tenía que transformar sus hábitos y esquemas de conducta a los nuevos objetivos, y requería una carrera universitaria específica para esta finalidad. Y todo ello requiere de tiempo. La estructura básica de la LOGSE se compone de Educación Infantil de 3 a 6 años, Educación Primaria de 6 a 12 años, Educación Secundaria, Obliqatoria de 12 a 16 años, y voluntaria con la deno minación de Bachillerato de 16 a 18 años. Una consecuencia de esta estructura es que los alumnos que permanecían hasta los 14 años en los colegios de Primaria, desde el año 1999 pasan a los Institutos a partir de los 12 años. Tras los 4 cursos de la ESO, en todos los centros de Elda están implantados los Bachilleratos de Huma nidades y Ciencias Sociales, y de las Ciencias de la Naturaleza y I.E,S. Yalle de Elda, el último centro de Secundaria construido, ya adaptado a la LOGSE. la Salud. Además, en el IES La Torreta está el Bachillerato Tecnoló qico. Como alternativa al Bachillerato se ofrecen Ciclos Formativos Medios para distintas especialidades profesionales que otorqan titu laciones de Técnico, y tras los Bachilleratos, como alternativa a la Universidad, Ciclos Formativos Superiores. Los institutos, tanto los de Bachillerato como los de Formación Profesional, pasan a deno minarse Institutos de Educación Secundaria, aunque todos estén esperando su adecuación al plan de la LOGSE, estando ya en mar cha los proyectos de los nuevos IES Monastil y La Torreta. En Elda, los ciclos formativos quedan implantados en los antiquos centros profesionales de La Torreta y La Melva, y en el construido especí ficamente para este plan de enseñanza Ilamado IES Valle de Elda, que comenzó a funcionar en septiembre de 1999. Entre otros están implantados los ciclos de Instalaciones Electrotécnicas, Calzado y Marroquinería, Administrativo, Sanitario, Comercio, Patronaje, Dietética y Nutrición y Educación Infantil. Desde el año 1990 que se aprueba la Ley, hasta el año 2001, no termina de implantarse el nuevo modelo.Y a lo larqo de estos años la ilusión del proyecto ha chocado con las dificultades de la cruda realidad provocando en padres, educadores y alum nos niveles de frustración muy altos. Graves retrasos en la ade cuación de los centros, difícil transformación del profesorado para asumir la nueva situación y posiblemente también errores de planteamiento en la misma Ley. Entre los 14 y 16 años hay un numeroso qrupo de alumnos que no encuentra motivación en el esquema educativo implantado, y sin embarqo la ley man tiene la obliqatoriedad de escolaridad. Por otra parte, ha qene rado un qran desconcierto entre padres y alumnos la fórmula de Promoción Automática que permite promocionar al curso siquiente teniendo incluso todas las áreas suspendidas. EI mismo cambio del entorno social en los jóvenes de estas edades dificulta enormemente el trabajo del profesor. EI valor que ocupa la cima en la jerarquía de valores es el disfrute del placer inme diato. Por otro lado, tras una dictadura autoritaria marcada por esquemas de imposición, se ha consolidado una cultura en la que se prima casi con exclusividad las actitudes reivindicativas y de rechazo a cualquier propuesta en donde el «NO» se ha con vertido en la respuesta más qeneralizada. Estas circunstancias y sequramente otras muchas han provocado manifestaciones de una qran insatisfacción social por este sistema y ha desem- bocado en una nueva reforma. La ley de12002 ( Ley Orgánica de la Calidad de la Educación.- LOCE). A través de este Ley se ha intentado correqir alqunos de los problemas que habían aparecido con la implantación de la LOGSE. Entre sus intenciones destaca la relevancia que se le otorqa al esfuerzo y pretende diver sificar la oferta a partir de los 14 años, a través de los Ilamados iti nerarios de la ESO, con el fin de que los alumnos que no encuentran acomodo en la actual ley, se sientan también acoqidos. Aunque los itinerarios están concebidos sobre distintas áreas todos dan la posibilidad de obtener el Título de Graduado en Educación Secundaria, hasta incluso el Ilamado de Iniciación Profesional, y por tanto, todos permiten el acceso a los Bachilleratos. Otra cosa es que no todos los alumnos se presenten con la misma preparación después de haber hecho trayectorias distintas. Por otra parte, la diferencia de rendimiento académico tendrá su reflejo en la expo sición de la nota media en el Título de Graduado en Educación Secundaria y en la prueba común que estarán obliqados a pasar tras los dos cursos de Bachillerato para obtener el Título, y que tendrá un valor decisivo para el inqreso en la Universidad. Por otra parte, aunque la promoción de curso requiera un máxi mo de dos suspensos por curso, al prohibir la repetición de un mismo curso más de dos veces, inevitablemente no parece supri mirse de esta forma el inconveniente presentado en el anterior plan. A modo de conr,lusión. En menos de 35 años hemos sufrido tres qrandes reformas en Educación Secundaria y, a pesar de todo, el problema no se considera zanjado ni mucho menos. No sólo en España; en todos los países desarrollados como Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido, etc. se presenta sobre la mesa como un problema sin resolver. Su complejidad deriva de la dificultad de intervenir en los elementos que intervienen. En primer luqar, dar respuesta a la prequnta qué enseñar. Cons tantemente aparecen posturas contrapuestas ante cuestiones como el aprendizaje del Latín, el Valenciano, otros idiomas o la Reliqión. Los niños disponen de un tiempo limitado y es pre ciso decidir de forma clara a qué dedican sus horas de clase. En sequndo luqar, la sociedad debe tener claro quiénes edu can, con el fin de reqular su función y su eficacia en la medida de lo posible. Todos somos conscientes de que no es la escue la precisamente la que en esta labor tiene el papel predominante. La familia, los medios de comunicación, la calle, ejercen una influencia educadora mucho más determinante que los profesores. Pero la formación de éstos y su dedicación dependen directamente del Estado, y éste ha de disponer de los suficientes medios humanos y materiales que permitan obtener los obje tivos propuestos, aun siendo conscientes de que educar es más un arte que una técnica y, por consiquiente, el adiestra miento en esta labor estará fuertemente limitado por las carac terísticas personales de cada educador. En tercer luqar, es de vital importancia adecuar los centros donde se educa. Con mucha frecuencia, se promulqan leyes sin estar acompañadas de los recursos necesarios para poner las en práctica. En un mundo en donde los medios técnicos y de comunicación han tenido un desarrollo tan qiqantesco, y han tenido aplicación a tantos ámbitos, la educación ha de sufrir una qran revolución en los próximos años. Finalmente, un problema de esta enverqadura no púede pasar por alto el tiempo necesario para poner en marcha cualquier cambio en la educación. Desde que se detectan los proble mas, se presentan proyectos, hasta que se aprueban y ponen en marcha, y se obtienen resultados, puede pasar una veinte na de años. EI plazo correspondiente a una qeneración. Dema siado tiempo para permitirse errores de bulto. aoi ^ o cn ^n ^ c^ o u^ ^ ^ c° ^ in °J = U á^ ^ o - fn ^ C6 U Ú ^6 Ú O U m ^ m M ^ N ^ U d ŭ O N ^ O U ^ ^ _ ^ O l.6-^ U Cn ^ O i O ^ -p ^ ^ Ŭ ^ U J U Li C3 N N O O N 4J O ^ ^ ^^ ^ Ĵ ^ Ĵ 4J O d ĉ ^ ^ [d C%J U a O ^ ^ ^ ^ U ^ m V Ĉ N O N ^ O U ^ ^ Ó w ^ ^ o Ĉ -a ^ C/^ p J Ŭ (^ U U ii C^3 N J ^ _ ¢ O 6, ^ z_ ^ o ^ ^ ^ ó a Ĵ ^ ^ ^ Ĵ O U ĉ C Ó ^ ^ ^ cv ^ v^ ^ ^ _ _ U ^ ^ U = ca ^C O ^ O 00 ^ ^ C^ M U .^ ca ^ ^ ^ ^ ^ ^ _ y^.. ^^, ^ C .^. ^O C Ŭ O cO VJ N _ ^ ^^ ^ ^ ^ ^ O^ ^ t ^^ Ó _ ^ ^_ tí ^ r C.7 O ^ . :..a .. . ^ _ ^ ^ o cO ^ a ^ ^ J ^ Ĵ ^ o 0 ^ 0 0 o c ĉ .^. _ _ _ . ^ ^c ^n ^ .^ ^ ^n -° -^ o cn ° o ^°n = a^ ^ ^ ^ ^ ° ° ° _ ^ á ^ : ^ -^ a.^ i U ^ v ^ U Q ^ ^ ^ U cO ^ m W ^ a^ 2^ U cC ^ m Vi N ^ ^ ^ a C cC ^ Q^ -^ ^ ^ Ñ [^ cC O ^ cO ^n Ñ Ñ J E ^ ^ O^ ^ ^ N ^ o a.^ .o Q cc ^ ^ ^^. L.L d d Ñ Q ^ ^ N _O ^: a ^ N ó0 cc ^ o ^ o ^ ^ ^ ^ ^ -a^ ^ ^ ^ E ^ ó ^ i ^ o ::a n ^ v^ w ^ o ^ ^ ^ ^ W M Co I^ 00 O^ O r N M ^ ^ CO I^ N La ransición ^^^ ^ ^^^ ^ y la escuela ^OSÉ LUIS DURÁN ALVAREZ _ _ _ urante la década de los sesenta, nuestro pueblo soportó una enorme avalancha de inmiqrantes provocada por un intensísimo éxodo rural; el incremento demoqráfico eldense alcanzó unas cuotas elevadísimas, a las que la ciudad respondía con exce siva dificultad, sin que las autoridades del momento supiesen responder con la celeridad y el interés de que hicieron qala los responsables municipales eldenses de anteriores periodos de expansión. Si la vivienda fue uno de los problemas inaplazables con que se enfrentaba la ciudad, no lo eran menos las insuficien- cias en todo tipo de servicios y, entre ellos, pocos más aban donados que el de la educación pública. Poco se había hecho desde la II República en cuanto a construcciones escolares. A principios de los años setenta Elda vive un momento de acelerado incremento de población, aqra vado además por el hecho de que toda España vivía el fenó meno del baby-boom, un aumento de la fecundidad que incorporaba a las escuelas qeneraciones cada vez más nume rosas. En aquel momen to, la enseñanza pública de Elda sólo contaba con los centros Padre ManjónCardenal Cisneros, Virqen de la Salud -ambos con numerosas aulas desper diqadas por toda la qeo qrafía eldense, en las calles de Ramón Nocedal, Fray Luis de Granada, 18 de Julio, o las parroquiales de Santa Ana, etc.- y EI Seráfico, inauqurado en febrero de 1970. Era una infraestructura a todas luces insuficiente para la cantidad de familias que deseaban optar a una plaza para sus hijos en centros públicos, con lo que el haci namiento escolar era nota ble en demasiadas aulas. Esta insuficiencia ayudó a la proliferación de la escuela priva da en Elda;junto a alqún coleqio materialmente bien dotado -enfo cado hacia las familias de mayor nivel adquisitivo- convivían numerosas escuelas y academias privadas, carentes muchas veces de unas mínimas condiciones hiqiénicas -a veces, con escasa luz natural, cuando no carentes totalmente de ellas, con aseos insalubres... o del material pedaqóqico necesario o puesto al día. Estas defi ciencias eran también padecidas por muchas de las aulas de la red pública, especialmente en bajos comerciales habilitados al efecto. Coincidiendo con esta época de penuria educativa surqe entre los docentes un movimiento reivindicativo, centrado en dos ver tientes: la económica, que luchaba contra los salarios miserables que habían convertido al maqisterio en un paradiqma de las caren cias materiales; y la pedaqóqica, que buscaba mejorar la realidad de la enseñanza y apostar por una nueva escuela pública ade cuada para la sociedad democrática que el país pedía a qritos. En nuestra ciudad, como en tantas otras ciudades españolas, se orqa nizó el Movimiento Unitario y Democrático de Maestros. Los objetivos de aquella orqanización docente eran ambi ciosos: la calidad de la enseñanza, con la exiqencia de una Mesa redonda con la coordinadora de asociaciones populares ( 29 de septiembre de 1977). MÁr^^^SfN ^ TRRt}pJO Y^NN05 SIN-E l zw^g^i r^^ ^^^, ^ Arriba, qente en la manifestación de la escolaridad celebrada el 1 de octubre de 1977. A la derecha octavilla convocando a dicha manifestación. bajada de las ratio de alumnos por aula, que en algunos casos superaban los 40 y hasta los 45 niños; la igualdad educativa, luchando por suprimir las tradicionales permanencias escola res, esa hora suplementaria de clase o repaso que los padres pagaban al maestro como un complemento al bajísimo salario estatal; la democra tización de la escuela, buscando una enseñanza más participativa, menos autoritaria, donde todos los estamentos afectados (padres, profeso res y alumnos) pudiesen participar en las decisiones que debían mejo rar la educación y la formación de las generaciones futuras. Ciudadano 9 s^^^:. . ; • ^ ^ , A ^ ante el problema de la escolaridad acude a la Manifestación legal convocada por las Asociacíones de Vecinos, Padres de Alumnos, Amas de Casa y Sin dicato de Trabajadores de Enseñanza que se celebrará el SABADO 1 DE OCTUBRE - a las 7 de la tarde Partiri de la plasa Caatelar y tranacurrir8 por sl alpulento Itlnerarlo: Martinez Anldo, Oeneral Varela, Josó M: Pemán, Dahalioa, General Mola, Calle Nueva, Colón y Plaza del Ayuntamlento. A1 final del xecorrido habrá intervencionee po= parte de loe orgaaizadorea. SI exiqes una enasñanza do calldad eat^s reivlndlcando la Iibertad del pueblo. TU COLABORACION SERA EFICAZ. PARTICIPA. nuestra ciudad La tarea era ardua y difícil si no se conseguía el apoyo y la colaboración de importantes y numerosos sectores sociales. En aquellos momentos del tardofranquismo la sociedad espa ñola estaba en plena ebullición, y la eldense no era precisamente ^ [iir,nnn:^nr^Tf^^^ ^ . ^ ^ ^. v^^.^r^ ^ ^y ^ 7.7^^^ ^RATUITAS !^^ C{^1^y^ Y P4RAlA(RI1^JlERA^(J i a{^-^9., ^;^•^^^ ^ T^NÁ Ñ^^ r^ar; , PRDFESOñ tÉS,^PRA^. ; _ - s ,c^ la menos activa. Eran años en que se estaban organizando todo tipo de movimientos sociales: las asocia ciones de padres de alumnos, las de vecinos, aumenta la afiliación de los partidos políticos, los sindicatos se hacían cada vez más patentes en las empresas... EI Movimiento Unitario y Democrático de Maestros se trans forma en el Sindicato de Trabajado res de la Enseñanza, acentuando sus similitudes con las organizaciones obreras y trabajando en estrecha vin culación con el conjunto del movi miento ciudadano, asesorando a las organizaciones populares en todo tipo de cuestiones relativas a la ense ñanza. EI trabajo conjunto conciencia a todo el tejido social de la caótica situación educativa que padecía y, particularmente, de las deficiencias de su escuela pública: malas y viejas instalaciones; carencia de gim nasios, de laboratorios, de biblioteca de centro, de comedores escolares suficientes; insuficiente y tardía dotación de un pro fesorado casi itinerante... En la educación infantil, la escuela la Plaza de Castelar hasta la del Ayuntamiento, sin incidente algu no, en una demostración cívica de un pueblo maduro, con pre sencia de todo tipo de asociacio nes y de unos partidos políticos que en aquel momento ya eran oficialmente representantes legí timos del pueblo. De aquella mani festación, de sus pancartas de todos los colores -aunque con claro predominio del rojo-, de la alegría de aquellos que pensaban que un cambio en profundi dad era posible, nos queda el recuerdo de consignas curiosas -«aulas sí, jaulas no»-, descrip tivas de las condiciones -«un octa vo en el comedor y, además, sin profesor», «niños amontonados Intervención del alcalde Paco Sogorb en la puerta del Ayuntamiento tras la manifestación del 1 de octubre de 1977. pública era un auténtico páramo: falta absoluta de guarderías; aulas de preescolar tan insuficientes que sólo admitían -y no siempre- a los niños de 5 años; poco personal y menos recur sos y materiales pedaqógicos. Poco después de la muerte de Franco, los cambios que pre dicen el inicio del camino democratizador (Adolfo Suárez, Pre- sidente del Gobierno, sustituyendo a Arias Navarro; Francisco Sogorb, Alcalde de Elda, sustituyendo a Porta Vera} comien zan a afectar tímidamente a la situación educativa: en 1976 se construyen con celeridad dos nuevos centros educativos: el Rico y Amat y el Sempere y Guarinos, ambos con nombres de eldenses ilustres. Suponen un alivio a una situación de penu ria extrema, pero todavía insuficientes para una ciudad cuya enseñanza pública seguía manteniendo ratios de 40 alumnos por aula. EI trabajo realizado por el movimiento ciudadano, al que el Sindicato de Trabajadores de Enseñanza prestó su apoyo técnico en todo momento, respaldado por amplias capas de la población que ya no sólo demandaban un puesto escolar para sus hijos sino una mejora de la educación a recibir, incre menta la presión social frente a la administración educativa, hasta el punto de plantearse la celebración de una gran manifesta ción ciudadana Por una enseñanza de calidad. Fueron varios meses de debate, de discusión en el seno de asociaciones de padres de alumnos, de vecinos, de la coordinadora de fuer zas políticas y sindicales, incorporando continuamente a nue vas instituciones en una reivindicación que ya era de toda una ciudad. Finalmente, el sábado 1 de octubre de 1977 se consi guió movilizar a miles de personas en las calles de Elda, desde y profesores parados»-, radica les -«más guarderías, menos pol icía»- o reivindicadoras de exigencias posteriores -«el hijo del obrero a la universidad»-. Todo colaboró a una de las principales expresiones multitudinarias de lucha por las libertades en la historia de la Transición en Elda. La manifestación había sido programada casi al milímetro: reuniones de coordinación con una frecuencia cada vez mayor; charlas informativas de los miembros del STE a orga nizaciones de padres, vecinales, sindicales o políticas; mani fiestos, comunicados, pegatinas... EI propio concejal afirmaba por aquellas fechas: «estoy harto de dar soluciones de mise ria». La presión popular acrecentada día a día y el recuerdo de la huelga del Movimiento Asambleario, vivida pocas semanas atrás, obligó al Ministerio de Educación y Ciencia a ofrecer alternativas que frenasen la magnitud de la protesta. Unos días antes de la manifestación convocada, en telegrama a un senador eldense de UCD, Roque Calpena, se le solicita quereúna a todas las organizaciones participantes para comuni carles que casi de inmediato se iban a resolver todos los pro blemas, al tiempo que ponderaba todos los esfuerzos realizados hasta ese momento. La reunión fue celebrada el jueves 29 de septiembre, dos días antes de la manifestación, horas des pués de la entrevista de Roque Calpena con Iñigo Cavero -Ministro de Educación en ese periodo- en Madrid. Nada salió de aquella reunión en una ciudad que, pese a promesas ante riores, había comenzado el curso con medio millar de alumnos de Primaria en comedores y gimnasios habilitados; el Movi miento Obrero y Ciudadano siguió su proceso, sabedor -más aún después de aquella reunión- de que el Gobierno sólo respondía ante los hechos consumados de las reivindicacio nes populares. IA6. 12; LA VERDAD MIERGOLES, 25,70.1978 DELEGACION: Calle Martínez Anido, 36 ^ 7ELEfONO; 385604 Increíble, pero cierto Se están consiruventla sie[e n ^ euos colegias Con capacidad para má; de 5.000 aumnos, cubrirán Ins necesidades escoiares entre 5 y 7 alios rmde p:rrrrrr inarrihle: rnsl todas In^ ediliraeionr. yur .r vir^ nrn emrvtnrrendo en t]Ida ,^Lin de^linxda.y n ser, en uu pl:reo u,uy Arece de tiempo, crntros i^rularre. Yunr;r en la hixtoriu dr IId:r hcrnos ¢siaido a una sllunriun dm sinqutar rn lo quc rospocla a I:r ttu_vrimnra ubligutori¢. Gn ..íete pimtos diatfnlos dr :n geugrafín del tcrmino rnrmicipal .r Ir^xnlnn. cr, lus molc ie oL•os tnntos rnir gian. 1¢ no cs cursticin de P^n.¢r ^rn Ias premcsas de I¢r aulorid^4rs procinri:a!es en m¢tevin de rduración, nl esPerrer a qae se rumplan, Ga ;e:rlidad dc hny e.; blrn dirctint;r a in dc• adon ah;íx cv lus qur satumente rab(:. esprrnr un herho fortuita pnra yae ^e nromctiernn lus rexlíearinnrs ea•.niares rpic n.•rrsilab:r lu riudad. ItrsuiLr, pues, t nsombro.o, r,:uprobur cl alranvc drl plan e.straordinarlo de e^,^nla Nr.a-itin pFlra 7998, ;,nvplriudo por Io5 poctas de La Jiuuclw. lliria^e quc lnrlo ĉ sr hau Ducs^tu de nrurrdo p;rra qur las obrns cnnrhp:qr Ml q r.tronu: todns los frrlegios en cnnvtrucrtón deber:ip c lar h,tu. p;.rrs t•nmicnzns dc la LrGzlma prim:t^^era. `XT1 ` -^CtP, ip9 Co:e({;os CU}Aq obr+vs e;tán en vias de eJ^cnr^ón, ulgunns m:is ad^lontad¢s qu,r ottrts. En tatal stywnen ]a pucst¢ en funcionamicnto ctc 1;t2 unfdx_ drs ecrc,arrs yue };odr&n a:her gir a mís de 5.000 a;ybmr^os ^ii0 e-,^c 739 . ,.^r . ,. .. esLUdinni-!les dr ]a }7bInc16n. Ia cntrada ev (ttnclontun;ento. x p:n•tir de mntzo próx7to. sepitn m¢rcan todcrs las pY,vslaus --con el suúsiguJente margcn ry-^ a ímlt:rvistos , de los nueros an.rc4 eseotnzes en 1a bare tlc 1+I cyl.u I s colegns tu sc r.uu:truyrn en Ia.. par(idn. drl ArKrrt c•EI Gttnpico lamhos nrribn), ^1eno_x arrn^^.ada^. nsl.rn l:rc obnr+ dct de Lo^ Corr.rles•. ^.• La 1unt[u.._(holon Cnrisun; rrtata dc let ftes,d^neta Ca:narcal i^n a^^tttaLOn d•; G r ..^^;, ,, o^,^ n^il^.tn-^o d ntro del p^, d I t 5cgnridttid Su :al ^ dc R tt ddac,e,v, 1c.td:a mu^ r.r.-.,^ (tr,^n .1 . ....... ..... ... .. ,n. ae.. ...._ ,_ ,,..,_.._._ .. .. Fragmento del artículo de La Verdad del 25 de octubre de 1978 en que se indica que se están construyendo siete colegios. Desde aquella manifestación, pero sobre todo después de aquel largo proceso que convenció a toda la ciudadanía de la necesidad de una enseñanza pública acorde con los nue vos tiempos, todo pareció acelerarse mucho más. Los Pactos de la Moncloa, con su plan de construcciones escolares, cola boraron a dar mayor celeridad a los proyectos. EI Ayunta miento eldense convirtió el asunto escolar en una de sus mayores prioridades, si no la primera, Ilegando a colaborar, tam bién él, con el Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza, nombrando a uno de sus representantes asesor personal del alcalde para los asuntos educativos. Hay que recordar que, en aquel periodo en que el franquismo apenas resistía pero la democracia aún no acababa de Ilegar, la corporación muni cipal se fraccionó hasta tal punto que un buen número de concejales dimitieron de sus cargos, precisamente aquellos que hasta entonces se habían distinguido por su apoyo al alcalde en la lucha decidida por democratizar la gestión municipal. A partir de ahí, la colaboración entre Alcaldía, representantes del profesorado y movimiento obrero y ciudadano fue más estrecha y los resultados no se hicieron esperar. En un solo pleno municipal, el del 13 de febrero de 1978, se aprueba la adquisición de más de sesenta mil metros cuadrados de suelo para construcciones escolares y se afectan diversos solares para centros de enseñanza, que se ofrecen al MEC para que cons truya en ellos: son los terrenos situados en La Almafrá, Los Corrales, La Sismat, EI Campico o EI Negret, donde en poco tiempo se inaugurarían colegios como Pintor Sorolla, Miguel Hernández, Santo Negro y varios otros. La supresión de las aulas situadas en locales sin ventilación o en edificios inadecuados iba a ser posible en muy poco tiempo. Tres días después, se hace público que Elda contaría con un nuevo Ins tituto de Bachillerato. A los pocos meses, iniciativas como las Aulas de la Tercera Edad o la Escuela Comarcal de Música dejaban ya muy claro que siempre se necesitarían -por suer te- nuevas infraestructuras educativas cada vez más sofisti cadas y específicas. Sin embargo, a finales de 1978, los eldenses sabían ya que las dotaciones escolares más irrenunciables y básicas eran ya un problema casi resuelto: la reducción del número de alumnos por aula, la ampliación de comedores escolares, la mejora de las instalaciones y su cesión a enti dades, el incremento del número de profesores y otras mejo ras Ilegaron sucesivamente a un país que -al menos hasta principios de los noventa- incrementó el gasto educativo real. En aquel año 1978, las organizaciones ciudadanas elden ses sabían también que eran ellas mismas quienes lo habían hecho posible con su esfuerzo. Las tareas de la ^r ^ ^u ^ ^:^ ^ ^r IVIIGUEL A. ^ZOUIERDO LÓPEZ ste artículo quisiera contribuir a un mejor cono cimiento del mundo de la enseñanza por parte de aquellos lectores que no tienen un contacto directo con ella, y lo hace mostrando algunos aspectos del trabajo de las personas -profesores y profesoras- que dedi can su esfuerzo y conocimiento a una tarea sin duda apasio nante: la de la educación. En cierta ocasión el filósofo Paul Ricoeur escribió: «iQué es lo que hago cuando enseño? Hablo. No tengo ofro medio de ganarme el pan y no tengo otra dignidad. No tengo otra manera de transformar el mundo y no tengo otra inFl uencia sobre los hombres. La palabra es mi trabajo, la palabra es mi reino». No se puede expresar de un modo más bello y preciso una verdad más profunda y exacta. iQué hacen, en qué ocupan su tiempo de trabajo, en efecto, los profesores?. Hablan, utilizan la palabr;^,-éfla és lá hérramienta fundamental de su trabajo, con ella se diti.gér^a^s Ŭ^s 21r^rrínñ5 Fiáblan _a tás alumnos y con los -----_-- _.. __._._ alumnos. Sin embargo, existe una cierta imagen del trabajo de los pro fesores que no hace justicia al mismo y, a primera visfa, la afir- mación del filósofo podría entenderse como una a e ^ nseñar confirmación de esta imagen: para algunas personas las tareas de un profesor se reducirían a dar sus clases, es decir, a entrar en el aula y hablar a sus alumnos y alumnas durante el tiempo que dura la misma, y poco más. No es éste, evidentemente, el sentido de la afirmación de Ricoeur; sin embargo, en ocasiones se oyen comentarios o se muestran imágenes en los medios de entretenimiento que parecen reducir las tareas de un profesor a algo parecido a eso, a una caricatura que no le hace ningún beneficio a esta profesión. Los pro#esores expltcan, exponen, responden, aclaran, orientan, y también: dialogan, justi#ican, debaten, CYitican, recti#1Cari, argurnentan -___ __ . _ Para comenzar a hacernos una ic^ea más ajustada de este trabajo describamos algunos aspectasque no son tan visibles a primera vista pero que, una vez conocidos, seguramente nos ayudarán a comprender un poco mejor la afirmación del filósofo seqún la cual los profesores háblan. Para empezar esta breve descripción, vamos a partir de ese mismo hecho: el uso de la palabra. Los profesores hablan a sus alumnos: durante el tiem po que dura una clase los profesores explican, exponen, res ponden, aclaran, orientan, y también hablan con sus alumnos: dialogan, justifican, debaten, critican, rectifican, argumentan. Todo esto, y seguramente mucho más, significa hablar a lo alum nos. Estamos ante una tarea cotidiana e inmediata, se realiza todos los días y en relación directa con los alumnos. Pero deten gámonos un momento en este aspecto de la tarea de un profe sor, merece una pequeña reflexión: bien mirado tiene tanto de tarea profesional, técnica, como de actividad creativa, casi diría artística. Por un lado, el hecho de hablar con los alumnos impli ca el dominio de una cierta técnica científica (el profesor es profesor de...) y también didáctica (el profesor habla pero den tro de unas coordenadas pedagógicas específicas, que no utilizan, por ejemplo, los veterinarios o los arquitectos en su propio tra bajo); por otro lado, implica un cierto acto de creación propio del que hace alqo «en vivo y en directo»: si sale mal, no tiene vuelta atrás, lo dicho, como se ha dicho y cuando se ha dicho queda así. Es un riesgo que los profesores conocen y afrontan poniendo todo el cuidado del mundo en que las cosas salgan bien, procurando -en la medida de lo posible- controlar posibles imprevistos. Pero es también la parte más apasionante y digna de la tarea de enseñar: su puesta en práctica ante y con jóve nes que reaccionarán a su vez también creativamente, es decir, como ellos suelen hacerlo habitualmente: de una manera ori ginal y franca. A este respecto, no se debería olvidar nunca que los profe sores trabajan con seres humanos, con jóvenes habitualmente, no con objetos o animales. Y esa faceta de la tarea de enseñar también tiene sus propias complicaciones: los chicos y chicas des tinatarios de la palabra del profesor no son un «papel en blan co» ni espectadores pasivos: ellos observan, interpretan y responden desde su propia cultura; sus ideas, prejuicios, acti tudes y aptitudes estan siempre presentes en el aula, entran en clase con ellos e interfieren çon los objetivos diseñados por el ,. profesor, unas veces positi vamente otras no tanto, haciendo que sus pala b.ras adquieran uno u ^ otro sentido, y ten gan la eficacia pre vista o no. _ __.__., El profesor está también ahablando sin palabras», otro curríCUlo está funcionando paralelamente, ayudando o interfiriendo negativamente en su labor Si con nuestros alumnos entran en el aula el mundo exterior y el suyo personal, con el profesor se introducen otros aspectos poco evidentes pero no menos importantes en relación a su trabajo: el curriculo oculto y la neqociación. Los pedagogos y soció logos de la educación han puesto hace tiempo en evidencia estos dos aspectos de la actividad del profesor en el aula y que acom pañan constantemente al más evidente y trivial acto de hablar. Cuando un profesor habla a sus alumnos lo hace desde el Ilamado currículo explícito, es decir, habla sobre lo que se supone que tiene que hacerlo, explica lo que sabe, un conocimiento adquiri do en su periodo de formación científica, y lo explica ateniéndo se a herramientas y metodologías establecidas de antemano y de probada eficacia; un profesor de Filosofía, por ejemplo, habla de filosofía, usando instrumentos filosóficos y medios adecua dos. Sin embargo, el profesor está también, por decirlo así, «hablan do sin palabras», otro currículo está funcionando paralelamente, ayudando o interfiriendo negativamente en su labor. Es el currí culo oculto, y aquí oculto quiere decir que no se explicita cons cientemente, pero no quiere decir que no se perciba -por supuesto se percibe-, los alumnos lo perciben: captan, por ejemplo, la acti tud del profesor con respecto a sus conocimientos, que puede ir desde apasionada a rutinaria, o su actitud con respecto a ellos mismos, que puede ser desde autoritaria a dialogante. EI currí culo oculto es el terreno de las áctitudes, qestos, emociones, talan te que forman parte de la personalidad del profesor. EI profesor está hablando pero en este caso no con palabras, aunque su lec ción es perfectamente captada por los alumnos y mucho más si esta lección y la otra son contradictorias, si no son consecuentes la palabra y el gesto. Todos los profesores son conscientes de ello y una buena parte de su esfuerzo y dedicación se dirige a domi nar este currículo oculto, a racionalizarlo para que sea una ayuda en su trabajo, un estímulo, una imagen motivadora y positiva. Avanzando algo más en nuestra comprensión de lo que siq nifica hablar con los alumnos -y ya estamos viendo que es un poco más complejo de lo que parecía a primera vista-, también la relación profesor alumno en el aula implica aspectos que no son fáciles de notar a primera vista, pero que están bien pre sentes en el aula: toda clase es una negociación. También en un aula se dan conflictos de intereses, entendiendo interés en un sentido amplio. Están por un lado las necesidades, deseos, expectativas, de los alumnos y por otro los objetivos y previ siones del profesor (y sus deseos e intereses). Esto inevitable mente produce un «choque», que a menudo se supera con facilidad y algo de paciencia, y que Ilega a ser incluso estimulante al poner en marcha mecanismos de negociación que son tam bién una forma de enseñar y aprender (significativamente los alum nos aprenden el valor de la palabra para la resolución de conflictos), pero que otras veces no son tan fáciles de superar, se tornan irresolubles y degeneran en situaciones muy pro blemáticas y frustrantes. Desgraciadamente, son estas últimas las únicas que suelen aparecer en los medios de comunicación, bajo el ambiguo título de «conflictos en el aula», casi siempre en el sentido más negativo de la palabra conflicto, y sin embargo los conflictos no tienen por qué ser negativos, al contrario, pueden ser muy productivos y enriquecedores. El trabajo de un profesor implica una mezcla singular de conocimientos científicos y de creatividad, de organización y de improvisación, de racionalización y de azar, que hace de la tarea de enseñar un desafío diario Todos los profesores saben que los qrupos de alumnos son heterogéneos, como debe ser tratándose de grupos formados por seres humanos. Saben que hay muchas diferencias entre unos alumnos y otros: diferencias intelectuales, afectivas, actitudi nales, etc. Todos los profesores dedican también una parte importante de su trabajo en el aula a identificar estas diferen cias, a tratarlas de manera distinta, a negociar con sus alumnos sus esfuerzos, los objetivos que pueden alcanzar, a captar su interés, a descubrir sus inquietudes, sus ideas, sus «limitacio nes», etc. Hasta ahora hemos estado hablando de aspectos del tra bajo del profesor poco conocidos por el público en general. Llegar a conocerlos puede dar una idea más justa de lo que hacen los profesores su trabajo cotidiano. Sin embargo, todo este trabajo implica una dimensión que es aun más descono cida para las personas que no tienen un contacto directo con la enseñanza. Nos referimos a la programación. Esta tarea ya no se puede realizar en el aula, no forma parte directa del diá logo que un profesor entabla con sus alumnos, pero es, no obs tante, fundamental para que este diálogo se produzca, para que la palabra pueda ser efectivamente el medio esencial del trabajo de un profesor. Un profesor habla, es cierto, pero nunca de cualquier cosa, ni de cualquier manera, ni en cualquier orden. Existe todo un trabajo previo para organizar, racionalizar, integrar, estructurar las palabras y las «lecciones» que el profesor va a desarrollar duran te el curso. Y existe una labor constante y casi diaria de revisión de ese trabajo, de transformaciones, de evaluaciones, de correc ciones o innovaciones que los profesores realizan, solos o en equi po, para que todo el esfuerzo realizado Ilegue a buen puerto. iQué hacen los profesores cuando programan? Debaten, analizan, marcan objetivos, tiempos, seleccionan materiales, herramien tas, preparan métodos, etc. Sin todo este trabajo, la «clase» sería imposible, un error, o peor aún, sería un fraude. Aunque parez ca sorprendente, gran parte del tiempo de trabajo de un profe sor no consiste en dar clase. Por el contrario, dedica mucho tiempo y esfuerzo a orqanizar esas clases; al comienzo del curso en especial, los profesores deben establecer consensuadamente los objetivos, métodos y contenidos que luego guiarán su labor en el aula. Cuando un profesor traspasa la puerta del aula no entra solo, sino acompañado de todo un trabajo previo de orga nización que no siempre es conocido, incluso por los mismos alum nos, deestinatarios finales de este trabajo previo, ya que ellos solo perciben, por decirlo así, los efectos que tiene la programación en el decurso cotidiano del aula. Tras lo expuesto hasta aquí, ahora estamos en condiciones de hacernos una idea más completa sobre las tareas de la pro fesión de enseñar, tareas que Ricoeur cifraba con la expresión «hablar». Quizá ahora estamos más cerca de entender por qué el trabajo de un profesor implica una mezcla singular de cono cimientos científicos y de creatividad, de organización y de improvisación, de racionalización y de azar, que hace de la tarea de enseñar un desafío diario y que conlleva una implicación en el trabajo, intelectual y emocionalmente, en ocasiones tan qrande. Pero también por qué el trabajo de enseñar implica en muchos momentos tensiones y frustraciones, incomprensiones y malentendidos -por parte de todos: administración, ciuda danos, incluso alumnos y profesores-. Éxitos y fracasos que los profesores conocen muy bien, a los que se enfrentan a diario y que son, en definitiva, parte consustancial de la tarea de ense ñar. EI filósofo Fernando Savater señaló con toda claridad este hecho en un libro suyo dedicado precisamente al «valor de enseñar»: «La pedagogía tiene mucho más de arte que de cien cia, es decir que admite consejos y técnicas pero que nunca se domina más que por el ejercicio mismo de cada día, que tanto debe en los casos más afortunados a la intuición». R e to s educativos del S1 g 10 xX AGUSTÍN CARUANA ^/AÑÓ ^ onstantemente podemos leer en los medios de comunica ^Ir ción referencias a los avances tecnológicos con frases como ^.,,^„%las siguientes: «Cada 18 meses nuestros ordenadores o computadoras son ciber chatarras que impiden el auancey el manejo eficienfe de los datos». «IBM proyecta para el 2005 su Blue Gene capaz de frasmitir el conte nido completo de la Librería del Congreso de 1os EE.UU en menosde dos segundos». «Para e12010 el hardi.uare del más desarrollado ordenadorsuperará el poder de la mente humana». «Químicos, biólogos, ingenieros yfísicos están colaborando en inuesfigaciones y espe ran obtener pronto ordenadores de tamaño molecular», etc. ® Probablemente, muy pocos lectores de este artículo desconozcan, a estas alturas, a qué me refiero si hablo de GOOGLE. Para quienes aún no lo sepan diré que es un robot de búsqueda en Internet que recibe más de 100 millo nes de consultas diarias. Hace las funciones de una Enciclopedia Informática Universal que rastrea la información conteni da en más de un billón de páqinas WEB en todo el mundo. Simplemente tecleando una palabra nos ofrece cientos de miles, incluso millones, de páqinas sobre cualquier tema que nos interese en pocos sequndos. No es de extrañar que, desde hace ya alqún tiempo, formen parte de nuestro vocabulario términos como «estrés informativo» o«estrés tecnolóqico», etc. Sabemos que estamos expuestos a un exceso de información. Filósofos contemporáneos como Salvador Pániker nos recuerdan que nuestro cerebro procesa en un día más información de la que recibía en toda la vida un ciudadano de la Edad r^ Archrvo EoicYÓn Ver Ir Favoritos Nerran^fentas Venta^ro Ayuoa IQSI ,y^ InternetExplorer ^ ^ G°aqle ^j ^ cs tr r. ^ ^ ^ ^ ea^na hM^ m ^ ^,_.,^^„^-.^^e,^,,.,..^^, ,^,^..,, ^,s,,roE,,.^,.^^ .^b ^iu 2 ^ V l ^ ) ^^ ^ ^^f=,.. a & . ^.. ... Imaganzs Grupos. .. . Dirzctone tJ?ws ^^^-.^: ^ e^,a^a, a^ ^9iisquetlaenGOOqle yoyatener5uerte __ , ^ Busqueda la `A^nas en espaRol^inas Aa Espafla ^ Google es ofrecido en. catala a a leqo eusb.ara i Puóhadad - Todo acerca de Gooole ^ Gao^,}I? ^^.em in En^:^sh, uacs .^oei.. su,^a^aa;^r.u¢a^^n osa.^,,,.xe Media. Pero también nos recuerda, puede que para situarnos a cierta distancia de modo que los árboles no nos impidan ver el bosque, la célebre cita de Alan Watts que, no sin cierta ironía provocadora, nos invita a la reflexión: «Puesto que el mundo no va a ninquna parte, no hay prisa». Cuando hablamos de cambios rápidos, a veces vertiqino sos, no debemos pensar únicamente en el mundo de la tecno loqía. Nuestro cerebro es el ordenador más perfecto y, sobre sus cualidades y características, también podemos encontrar cifras deslumbrantes en los libros: «se calcula que tenemos entre 30y 100 billones de neu ronas (mayor que el número de estrellas de 1a vía láctea), un solo cerebro humano tiene un número mayorde conexio nes posibles entre sus células neruiosas que e1 número total de partículas atómicas que hay en el uniuerso», «el cerebro sería equiualente a una computadora con 20 millones de libros de 500 páginas cada uno», «comparando el cerebro con una de Ias computado ras mas potentes del mundo, se ha calculado que a 400 millones de cálculos por segundo, tardaría 100 años en conse^uir lo que el cerebro es capaz de realizar en un minuto», «si recibiéramos 10 unidades (palabra/imagen) porsegun do durante 100 años, no habríamos usado ni 1/10 parte de la capacidad de almacenamiento del cerebro», Como orqanismos vivos estamos inmersos en un proceso constante de orqanización-desorqanización: cada año se renue va el 98% de los átomos de nuestro cuerpo, el orqanismo repo ne diariamente entre 25.000 y 750.000 millones de células que mueren en nuestro cuerpo. A la incertidumbre de naveqar en un entorno sociocultural sometido a incesantes cambios se suma la imperiosa necesidad de adaptarnos a nuestros cons tantes cambios internos, y, qeneralmente, no recibimos un apoyo formal sistemático de nuestro entorno (escuela, familia, sociedad) para hacerlo como conviene. ZQué respuesta puede dar la edu cación para afrontar estos cambios? Damos por supuesto, siquiendo la terminoloqía del Informe Delors, que los sistemas educativos sequirán enseñando a cono cer, comprender y descubrir contenidos científicos y cultura les, y enseñando a hacer cosas para aportar a la sociedad en forma de trabajo. Pero, los otros dos pilares de la educación siquen siendo desafíos educativos que se van dejando de lado, asiqnaturas pendientes para no se sabe cuando, o a las que se dedica una atención esporádica o circunstancial, no sistemáti ca: aprendera conuiviry a trabajar en proyectos comunes (tra bajo en qrupo, cultivar la empatía, etc.) y aprender a ser, es decir buscar el desarrollo total y máximo posible de la persona (educación inteqral). Somos orqanismos con elementos biolóqicos, psicolóqicos y sociales y la educación debería atender a estas tres dimen siones para dar satisfacción a todas las facetas que inteqran nuestro ser. La educación emocional puede ser una de las herra mientas que contribuya a ese desarrollo inteqral erradicando el analfabetismo emocional descrito por Goleman. Se ha defi nido la educación emocional como un «proceso educatiuo, con tinuo y permanente que pretende potenciar e1 desarrollo emocional como complemento indispensable del desarrollo cognitiuo, cons tituyendo ambos los elementos esenciales del desarrollo de la personalidad integral. Para ello se propone el desarrollo de cono cimientos y habilidades sobre 1as emociones con objeto de capa citar al indiuiduo para afrontar mejor los retos que se plantean en la vida cotidiana. Todo ello tiene como finalidad aumentar elbienestarpersonalysocial» (Rafael Bisquerra). Los objetivos, contenidos y métodos de la educación emocional deberán ocu-par un sitio cada vez más amplio y destacado en nuestro sistema educativo. Como seres sociales uno de los retos más diqnos que puede plantearse la educación es transmitir los mejores valores de nuestras sociedades, acrisolados a través de siqlos de convivencia, a las futuras qeneraciones: la justicia social, los dere chos humanos, la democracia, la iqualdad de consideración, de oportunidades y ante la ley, la paz, la solidaridad, la libertad, el respeto a los demás sea cual sea su origen o condición, el res peto a la diversidad y al mundo que nos rodea incluyendo plan tas y animales (valores ecológicos y medioambientales), etc. Es decir, erradicar el analfabetismo moral. la cuestión de las minorías (alumnado con necesidades educativas especiales, o específicas, alumnado extranjero, comu nidades rurales, personas mayores, minorías étnicas, etc.) plan tea un profundo reto al sistema educativo. Y convendrá afrontarlo dando respuesta a los conflictos entre posiciones ideológicas contrapuestas en educación que se expresan en agrios deba tes demasiadas veces estériles, planteando líneas de actuación educativa en torno a la igualdad y la diversidad, y matizando el significado de estos y otros términos: escuela inclusiva fren te a selectiva, inteqración frente a segregación, igualdad pero no uniformidad, diversidad pero no desigualdad o discrimina ción, etc. Si queremos una sociedad más justa, deberemos abor dar este tema con una reflexión profunda y serena, realista pero también honesta y generosa con las personas que se encuentran en situación de desventaja. Promover la compensación de desi gualdades en materia de educación y procurar que los grupos más desfavorecidos no se conviertan en ciudadanos de segun da categoría en cuanto a posibilidades de acceso a la educa ción debería ser una meta ineludible para las sociedades avanzadas y justas. La escuela tiene que transmitir una visión trans formadora de la sociedad con el objetivo de superar las desi gualdades sociales. Y esto es tarea de todos, no sólo de la escuela. Quizás con venga precisar en este punto que, como ya he dicho anterior mente, si bien la escuela no debe hacer dejación de sus funciones y responsabilidades tampoco deben hacerlo -como parece estar sucediendo actualmente- ni la familia, ni los restantes grupos, agentes o entidades sociales. Puede que suene un poco dura y pesimista pero, casi todos pensamos que hay algo de verdad en frases como esta: «lo que la escuela enseña en 15 días, la TV puede destrozaren IS minutos». Puede, pero no debe ni es ine vitable, y en este pequeño margen entre lo posible y lo inevi table, se encuentra la libertad de decisión del individuo ante las diferentes opciones que se le presentan. Por ello, formar individuos libres, personalmente equilibrados, maduros en el plano psicoemocional y con criterios sólidamente asentados en el plano cognitivo e intelectual, es a mi juicio uno de los retos más nobles y elevados que puede plantearse la educación. En todo caso la frase ilustra una de las contradicciones o problemas que habrá que resolver si queremos salir airosos ante los desafíos planteados. Marchesi ha destacado seis: 1) La sociedad es cada vez más exigente con la educación pero no se quiere comprometer en la práctica proporcionando condiciones, medios, recursos y apoyos. 2) Las familias piden más educación pero delegan la acción educativa en la escuela e incluso actúan de forma opuesta en el hogar (algo así como «haz lo que te dicen en la escuela pero no lo que ves hacer en casa»). 3) Los profesores han de realizar nuevas funciones pero se mantienen los esquemas tradicionales en la organización del trabajo. 4) La sociedad ha cambiado pero se añora la educación del pasado. 5) Las escuelas deben realizar nuevas tareas pero su modelo organizativo continua invariable. 6) Las nuevas qeneraciones de alumnos cambian pero los esti los de enseñanza apenas se modifican. Ante los retos o desafíos mencionados y otros que puedan surgir en el futuro el sistema educativo, junto con la familia y otras instituciones sociales con quienes comparte la tarea de educar, deberá hacer un enorme esfuerzo en, al menos, cuatro direcciones: 1) Enseñar el manejo de las TIC (tecnologías de la informa ción y la comunicación) será una de las tareas a las que habrá que de dedicar recursos, espacios y esfuerzos si no que remos una sociedad de analfabetos tecnológicos . Debe remos hacerlo para rehuir nuestras obligaciones como educadores, pero sin subordinar el ser humano, reve rencia) y acríticamente, a los avances tecnológicos . Ante el exceso de información, muchas veces superflua, nos vere mos obligados a ser más selectivos, habrá que decidir constantemente qué es lo que realmente nos interesa digerir. 2) Por ello, deberemos dedicar nuestro mayor y mejor esfuer zo a formar personas íntegras, con criterio, es decir que sean capaces de mantener el equilibrio interno ante las nue vas demandas, y así lograr una sociedad sin analfabetos emocionales ni morales . Formar personas, en palabras de Pániker, que sepan navegar dentro de la incertidum bre para lo que precisarán buenas dosis de creatividad. 3) El rol de la escuela y el de los docentes deberá revisarse, replantearse y modificarse en profundidad (organización, estructuras, métodos utilizados, actitudes y mentalida des, etc .) . De lo contrario los sistemas educativos, nunca esta rán suficientemente preparados para asimilar los vertiginosos cambios que constantemente se están produciendo . 4) Se impone un periodo de reflexión de la sociedad en su con junto con el fin de tomar decisiones claras sobre bases sóli das que lleven a definir el papel de la educación ante las nuevas circunstancias y qué tipo de personas queremos que integren la sociedades del futuro . El Informe Delors apunta seis dilemas educativos que habrá que resolver en ese proceso de toma de decisiones colectivo : globalización frente a localización ; tradición frente a modernidad ; soluciones a largo o a corto plazo ; competitividad frente a igual dad de oportunidades ; expansión de conocimientos frente a capacidad de asimilar ; dimensiones materiales frente a espirituales. No quisiera que este artículo se entendiera como uno de esos listados de exigencias o demandas, que añaden nue vas cargas sobre los castigados hombros de la educación o los docentes . El nefasto, y cada vez más frecuente, síndro me del profesor quemado quizás sea consecuencia de la falta de ilusión del sistema educativo que se expresa con toda su dureza en el eslabón más frágil el ser humano—pro fesor/a . El fracaso escolar, puede analizarse en clave de desencuentro entre educadores y educandos que se expre sa, asimismo, con toda su dureza en el ser humano-alumno/a, que carece de ilusión por aprender y está deseando abandonar y así liberarse del sistema educativo . Una breve narración tomada del magnífico libro de Idries Shah puede servirnos para estimular la reflexión sobre las posibles cau sas de ese desencuentro: En una noche oscura pasaba un derviche junto a un pozo seco, cuando oyó un grito de auxilio desde el interior de éste . «¿Qué sucede?», preguntó, mirando hacia el interior del pozo. «Soy un gramático y desgraciadamente, debido a que ignoro el camino, caí en este profundo pozo, en el que ahora estoy casi inmovilizado», respondió el otro. «Agárrate, amigo, que voy a buscarla escalera y soga», dijo el derviche. «Un momento, por favor», dijo el gramático . «Tu gra máticay pronunciación son defectuosas, ten a bien corregirlas». «Si eso es mucho más importante que lo esencial», gritó el derviche, «será mejor que tú permanezcas donde estás, hasta que yo haya aprendido a hablar correcta mente .» Y siguió el camino. Distinguir lo principal de lo accesorio es esencial a la hora de decidir qué legado queremos transmitir a las futuras gene raciones . En cuanto al modo de transmitirlo, las palabras clave son compromiso e ilusión . Es bien sabido que las personas nos comprometemos con ciertos objetivos, y trabajamos mucho y bien cuando el tema nos interesa y rendimos al mínimo cuando carecemos de motivación . La ilusión como la desi lusión son tremendamente contagiosas . Recuperar y contagiar ilusión es fundamental para enfrentar los desafíos educativos del siglo XXI . [DOSIER] TRANSPORTE, ALMACENAJE Y DISTRIBUCIÓN SERVICIOS TERRESTRES, MARITIMOS Y AEREOS ELDA TRANS, S .L. C/ . Italia, 75 - Polígono Campo Alto • Tfnos . : 965 382 172 - 965 389 068 • Fax 966 980 327 E L D A (Alicante) W1V ORGANIZACIÓN NACIONAL DE TRANSPORTES