Amancio Guerrero, jefe de bomberos: "Hemos cambiado el sistema de actuación para evitar contagios dentro de la plantilla"
Amancio Guerrero es el jefe de bomberos de Elda. En 1997 accedió a la jefatura del cuerpo de bomberos y desde entonces ha trabajado para mantener la seguridad en la población. El estado de alarma decretado por el gobierno nacional ha significado para el cuerpo de bomberos cambios en la forma de trabajar y de actuar en la plantilla. Amancio Guerrero explica cómo es para él la nueva situación que está viviendo:
"La actividad normal en el cuerpo de Bomberos ha cambiado en muchos aspectos. Ahora tengo más cuidado y trabajo con mucha más precaución en cuanto a las normas a seguir para evitar la contaminación. También hay mucha más carga de trabajo ahora: para organizar los parques de bomberos de Elda y Villena cambiamos la sistemática de actuación cada cierto tiempo para evitar contagios y trabajar frente a la Covid-19 para protegernos nosotros y hacer las cosas lo mejor posible.
En cuanto nos enteramos de que había trabajadores en el cuerpo de bomberos con síntomas de coronavirus los apartamos del servicio, los enviamos de cuarentena a sus casas y les hicieron analíticas para ver si eran positivos o negativos por COVID-19. Estamos haciendo analíticas a todos los bomberos de la provincia en orden de prioridad: primero a los que presentan síntomas y a sus compañeros de trabajo. Ha habido algún positivo.
Las normas de conducta tanto dentro como fuera del parque son diferentes con respecto a antes porque ya no sabemos por dónde puede llegar el contagio: los compañeros hacen turnos de 72 horas y luego libran 12 días para evitar que en ese tiempo contagien a alguien, si fueran positivos, ya que el parque de bomberos no puede cerrarse.
Es una medida que han aceptado, pero representa un esfuerzo muy grande porque trabajar durante 72 horas es muy estresante. Además, estamos siempre en contacto y hablamos todos los días por videoconferencia con la unidad de formación y con técnicos de prevención de riesgos laborales.
Los primeros días la población se lo tomaba a broma, creían que no podría llegar el coronavirus a España desde China o Italia. Pero nos hemos asustado al ver cuáles son las graves consecuencias que están sufriendo las personas de riesgo. La gente tiene miedo y está tomando precauciones, en general hay un buen comportamiento de casi todo el mundo y no conozco ninguna excepción.
Me da mucha alegría decir que no veo a los ciudadanos por las calles y eso es un buen síntoma. Estamos concienciados y sabemos que debemos estar resguardados para evitar el riesgo masivo.
Mi familia ya sabe cuál es mi trabajo y lo tienen asumido. Yo lo que tengo que hacer es velar por mi seguridad y la de mi familia para evitar el contagio. En mi jornada de trabajo de 7 de la mañana a 14 horas, me encargo de comprobar que los materiales y los vehículos están bien, damos la formación pertinente. Cuando termina mi jornada me voy a casa y procuro salir lo menos posible.
Los bomberos siempre hemos llevado EPIS. Trabajamos con riesgo biológico y somos profesionales de las emergencias así que ya sabemos cómo intervenir. Pero ha habido casos confirmados de coronavirus en la plantilla ya que en un principio no sabíamos cómo prevenirnos de este virus. Ahora mismo estamos cambiando el sistema para evitar contagios dentro de la plantilla y podamos trabajar en el exterior con total seguridad para protegernos nosotros y a las personas con las que estamos en contacto.
Es pronto para hacer una valoración de lo positivo o negativo de esta situación. No sabemos todavía cuál va a ser el futuro inmediato ni cuándo vamos a salir de esta grave crisis. No me atrevo a dar una valoración hasta que todo termine".