El fuego consume unas impecables Fallas

El fuego fue el encargado, como siempre, de cerrar las Fallas de Elda anoche con la esperada cremá de los 20 monumentos que se plantaron el jueves en los diferentes distritos falleros. El fuego purificador convirtió en cenizas primero la falla oficial, frente al Ayuntamiento, y se fue extendiendo por toda la ciudad hasta que ardió la última, la mejor de este año, Huerta Nueva.

Las Falleras Mayores, Carmen Cebrián y Andrea Laín, y sus Damas de Honor, Rebeca Bañuls, Rocío Martínez, Valeria Villena y Esther Mellinas, como por la mañana en la mascletá, prendieron la mecha de la falla oficial, del eldense Joaquín Rubio. Cientos de personas acudieron a esta primera cremá y miles a las de los diez distritos eldenses.

Fueron tres horas y media de cremá en una noche en la que los bomberos se encargaron de que no hubiese incidentes. Los fuegos artificiales ascendieron al cielo en cada punto de la ciudad para avisar de cada una de las cremás. La única falla a la que costó algo arder fue la infantil de Trinquete, pues tras la traca necesitó algo de ayuda para comenzar a quemarse.

Muchas de los falleras no pudieron evitar las lágrimas al ver arder las obras de arte efímeras pues estas fiestas las han vivido como representantes.

Como es tradición, las Falleras Mayores y sus Damas de Honor así como el alcalde de Elda, Rubén Alfaro, presenciaron cómo ardía la falla ganadora, la de Huerta Nueva, la última en hacerlo, en torno a la 01:30 horas.

La presidenta de las Fallas, Eva Vicente, valoró anoche el trascurso de las fiestas: "Han sido muy positivas, han sido muy buenas, el tiempo ha acompañado, la población tenía ganas". Además se ha congratulado de las novedades como la creación de la nueva comisión Falla Jardín de la Música pero, sobre todo, "es importante que por primera vez en muchos años la AMCE Santa Cecilia nos acompañase en la Ofrenda de Flores. Nos acompañaron 15 delegaciones y es un orgullo poder mostrarles el talento musical de Elda". También remarcó que este año también se ofrendó a San Crispín y San Crispiniano. Por último destacó la hermandad que hubo cuando Trinquete sufrió un pequeño percance en su falla infantil y tanto falleros como artistas de otras comisiones colaboraron  para que quedase de nuevo perfecta. 

Procesión

Las diez comisiones falleras participaron antes, por la tarde, en la Procesión en honor a San Crispín y San Crispiniano, que este año partió desde Santa Ana, donde se encontraban las imágenes, hasta la Inmaculada, donde ya descansan. Fue un acto solemne y emotivo en el que la fiesta mostró su devoción por los patronos de las Fallas.

Curiosamente desde las 14 horas hasta el comienzo de la procesión la imagen de San Crispín y San Crispiniano permaneció en la calle, en soledad a las puertas de Santa Ana, a la espera del inicio del recorrido en el que fueron portados por los miembros de su mayordomía. Este hecho es insólito, ya que normalmente se saca la imagen momentos antes del inicio de la procesión. 

Ahora comienza de nuevo la cuenta atrás para que los falleros preparen durante un intenso año todo lo necesario para disfrutar el último fin de semana de septiembre de 2025 de un nuevo capítulo de las Fallas de Elda.