La Residencia La Molineta comienza a recuperar la normalidad
La Residencia para Mayores La Molineta cuenta en este momento con 81 usuarios, todos vacunados, aunque desde que comenzó la pandemia han registrado un total de diecisiete decesos. La directora del centro, Julia Rico, explicó que ahora es diferente, se avanza hacia la nueva normalidad, ya se han vacunado, es distinto ya que "en la primera ola no teníamos información, ni equipos, mientras que en la segunda ola ya contamos con equipos para trabajar de forma segura y poder controlar el brote".
La Molineta tiene una capacidad de 107 plazas, pero debido a las circunstancias actuales "la Conselleria nos obliga a tener plazas de reserva para hacer aislamientos. Los ingresos se realizan de forma paulatina hasta que se recupere la normalidad".
Esta residencia ofrece un servicio de atención integral al mayor, en un entorno agradable, donde disfrutan de un área ajardinada, además de contar con Centro de Día y Residencia. Ambos espacios se distinguen por ofrecer una atención personalizada. Los ingresos se hacen por voluntad propia del usuario, salvo que no esté en condiciones y entonces es el juzgado el que tiene que autorizar su ingreso.
En este momento, el centro permite la visita de las familias con cita previa. La normativa les obliga a mantener las restricciones hasta que se dé por concluida la pandemia. Por el momento, solo están permitidas una o dos visitas a la semana por cada ingresado, pero pueden salir a la calle.
Julia Rico procura que las personas mayores que se encuentran en el centro se sientan como en su casa, pues "nuestro objetivo es que reciban la mejor atención en la etapa final de sus vidas". Así lo corroboran los dos personas que se encontraban en el jardín junto a sus familiares. Saturnino López de 95 años y Victoria San Bartolomé de 93, afirmaron: "No nos hemos contagiado de COVID-19, además aquí tenemos todo lo que nos hace falta". Su sobrino insiste en que están confiados porque hay equipos médicos y enfermeros que tienen todo controlado.
De otro lado, José Antonio López y su madre Isabel López, de 84 años, ambos de Petrer, afirmaron que han llevado bien el confinamiento, pues "mi familia me enviaba fotos y hablaba con ellos varias veces a la semana por teléfono", dijo Isabel.
