Pretérito perfecto de la industria del calzado en Elda. El proyecto de exportación a EE.UU.
Hablar de la industria del calzado en pretérito puede suponer un acicate ejemplarizante para los momentos actuales, aunque solamente sea por la divulgación de actuaciones, en el pasado, que prepararon nuestra industria para “tiempos mejores”, merece la pena traer aquellas experiencias a la actualidad.
Las primeras incursiones a los mercados norteamericanos tienen un punto álgido, octubre de 1959. Los señores Roque Calpena y Oscar Santos. comisionados por un grupo de fabricantes de calzado de Elda, viajan a Chicago con 600 modelos de diferentes fabricantes. Los resultados fueron sorprendentes, grandes comercializadoras americanas, entre las que destacaban General Companys con más de 1200 tiendas propias y 1700 filiales; la A.S. Berk o la Shoe Corporation de América, entre otras, se interesan por el calzado eldense, consiguiendo casi cien mil pares de zapatos, en ventas directas, lo que supuso un éxito sin precedentes ante aquella primera salida agrupada de nuestros más preciados zapatos.
La euforia por aquellas ventas dio paso a la convocatoria urgente, en el cine Cervantes, el 12 de noviembre (hace ahora 66 años), de una macro-reunión, aquella emblemática sala quedó pequeña ante la asistencia masiva de fabricantes locales. La convocatoria estuvo presidida por el entonces presidente del sindicato de la piel, José María Gran, arropado por los industriales José María Alarcón; Francisco Cremades y José Aguado Puche, allí se recibieron los informes de Calpena y Santos, y se acordó por unanimidad, de todos los presentes, trazar un plan que recogiese, en comisiones de trabajo, el estudio de aquel mercado estadounidense; las calidades para alcanzar de lleno el éxito que se preveía y las numeraciones a estandarizar para los zapatos españoles que debían venderse en América.
Como anécdota diremos que la cotización del dólar en aquel final de 1959 rondaba las 59 pesetas por dólar americano que, según las crónicas de la época, se consideraba una cotización excesivamente alta, con el encarecimiento de los precios en aquel país.
Noviembre de 1959 marcaría el inicio de una nueva etapa para la industria eldense, en particular, pero también la plataforma de salida para el lanzamiento en EE. UU. de las ventas masivas del calzado español. De aquellos logros saldrían otros, como fue el caso de “Elda Exportadora”.
José María Amat Amer, es un apasionado del calzado. Como ingeniero técnico, el destino lo encaminó hacia la industria de su ciudad. Como profesor de Tecnología del Calzado, llego a conocer investigando, la industria del calzado. Publicando algunos libros sobre tecnología, artesanía y desarrollo social; siempre con el calzado como única premisa. El Museo del Calzado fue una de las realizaciones que le llevó a pasar de técnico a un apasionado del zapato. Con la mejor de las intenciones, y siempre con la pretensión de prestigiar la industria y el calzado de la ciudad de Elda, colabora en este blog para crear más amigos con inquietudes similares.